Amroth Elendil
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Acabo de volver de dar tumbos por la calle y como aún voy un poco puesto, os voy a contar brevemente mis tres últimas y más importantes relaciones de pareja:
Tras una dura relación de 5 años, descansé 6 meses y volví a las andadas. Tuve otra relación muy complicada pero muy intensa con una andaluza durante medio año. A los escasos 10 días de romper de forma algo brusca, conocí a la que ha sido mi última pareja. Y al año, hace un mes escaso, se acabó de repente... Siempre le daba la neura, celos o cosas por el estilo y decía que me dejaba, que no me aguantaba más, pero a la media hora me llamaba llorando y se disculpaba, reconociendo sus prontos e incoherencias. Esta vez, la quinta, me prometió que no volvería más, que estaba harta de ir detrás mío. Y la verdad es que me siento entre aliviado y apático por todo esto.
Ahora salgo solo o con amigos a los bares y aunque a veces veo la posibilidad de arrancar algo, miradas, gestos, etc... me siento como un currante quemado que necesita unas vacaciones. Básicamente, me fijo en las chicas, pero si alguna parece que me hace caso, la ignoro completamente. Esta noche sin ir más lejos, he tenido 2 oportunidades evidentes, sumadas a otras dos que con un poco de esfuerzo, podrían desembocar como mínimo en una conversación interesante. Pero siempre pienso que si no me ligo a la más guapa del bar, no vale la pena. Por suerte o por desgracia, mi última pareja era muy guapa y no me acabo de acostumbrar a lo que me encuentro cuando salgo: trolls, jennys, drogadictas, guiris horteras, gordas nauseabundas, hijas de mordor, niñatas... Ni siquiera mi mente retorcida es capaz de encontrar morbo en tener, si se terciara, una noche loca con uno de estos especímenes, aunque sólo sea por la fresca guarrería bizarra y decadente. Pero nunca me encuentro ni demasiado borracho, ni lo suficientemente obsceno, ni necesariamente motivado. Cuando mis amigos me presentan a alguna, les digo que por ahora tengo el listón demasiado alto, que para irme con una peor que mi ex me voy solo a casa. Y eso es lo que hago.
Y últimamente me ha dado por observar como se relacionan los demás. Tíos entre pasables y atractivos, algunos realmente brillantes, emprenden estrategias encomiables, dan conversación con gran agilidad, se lanzan valerosamente con la sana intención de triunfar... y ellas lo único que hacen para merecer todo ese gasto de energía es estar ahí con su copa y cara de póker, ignorarlos y en la mayoría de los casos destruir, pisotear, ningunearlos. Absurdo...
En las grandes ciudades, pese a haber millones de personas, hay muchísima gente que se siente sola, pero unos no quieren reconocerlo y otros no encuentran ni una sonrisa de complicidad entre las sombras de un bar nocturno... En fin, todo esto para decir que veo el tema muy complicado y que no es fácil encontrar a alguien cuando tienes criterio y aspiraciones ... ¿Necesito descansar de coños? Los que os identifiquéis un poco con esto, iluminadme con vuestros consejos.
P.D: perdonadme, es que voy un poco pedo...
Tras una dura relación de 5 años, descansé 6 meses y volví a las andadas. Tuve otra relación muy complicada pero muy intensa con una andaluza durante medio año. A los escasos 10 días de romper de forma algo brusca, conocí a la que ha sido mi última pareja. Y al año, hace un mes escaso, se acabó de repente... Siempre le daba la neura, celos o cosas por el estilo y decía que me dejaba, que no me aguantaba más, pero a la media hora me llamaba llorando y se disculpaba, reconociendo sus prontos e incoherencias. Esta vez, la quinta, me prometió que no volvería más, que estaba harta de ir detrás mío. Y la verdad es que me siento entre aliviado y apático por todo esto.
Ahora salgo solo o con amigos a los bares y aunque a veces veo la posibilidad de arrancar algo, miradas, gestos, etc... me siento como un currante quemado que necesita unas vacaciones. Básicamente, me fijo en las chicas, pero si alguna parece que me hace caso, la ignoro completamente. Esta noche sin ir más lejos, he tenido 2 oportunidades evidentes, sumadas a otras dos que con un poco de esfuerzo, podrían desembocar como mínimo en una conversación interesante. Pero siempre pienso que si no me ligo a la más guapa del bar, no vale la pena. Por suerte o por desgracia, mi última pareja era muy guapa y no me acabo de acostumbrar a lo que me encuentro cuando salgo: trolls, jennys, drogadictas, guiris horteras, gordas nauseabundas, hijas de mordor, niñatas... Ni siquiera mi mente retorcida es capaz de encontrar morbo en tener, si se terciara, una noche loca con uno de estos especímenes, aunque sólo sea por la fresca guarrería bizarra y decadente. Pero nunca me encuentro ni demasiado borracho, ni lo suficientemente obsceno, ni necesariamente motivado. Cuando mis amigos me presentan a alguna, les digo que por ahora tengo el listón demasiado alto, que para irme con una peor que mi ex me voy solo a casa. Y eso es lo que hago.
Y últimamente me ha dado por observar como se relacionan los demás. Tíos entre pasables y atractivos, algunos realmente brillantes, emprenden estrategias encomiables, dan conversación con gran agilidad, se lanzan valerosamente con la sana intención de triunfar... y ellas lo único que hacen para merecer todo ese gasto de energía es estar ahí con su copa y cara de póker, ignorarlos y en la mayoría de los casos destruir, pisotear, ningunearlos. Absurdo...
En las grandes ciudades, pese a haber millones de personas, hay muchísima gente que se siente sola, pero unos no quieren reconocerlo y otros no encuentran ni una sonrisa de complicidad entre las sombras de un bar nocturno... En fin, todo esto para decir que veo el tema muy complicado y que no es fácil encontrar a alguien cuando tienes criterio y aspiraciones ... ¿Necesito descansar de coños? Los que os identifiquéis un poco con esto, iluminadme con vuestros consejos.
P.D: perdonadme, es que voy un poco pedo...