Spade
Veterano
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Buenas días.
Llevo media semana con una especie de virus intestinal que hace que cague más blando que un batido agitado. Ayer creía que me encontraba algo mejor, pero no, luego resulta que aquello se parecía más al Test de Roschard, que a uno de esos torpedos insumergibles indicativos de una sana digestión.
¿Por qué cuento esto? Porque el hilo se quedaba algo breve. Y porque sospecho que mi disfunción y varios días de encierro en casa estén afectando a mi buen juicio.
El caso es que hay nueva chica en la oficina.
Oh si. Y está de buen ver. Y es maja y esas cosas.
Como soy honrado y tengo escrúpulos, me toca joderme y trabajar.
Varias horas al dia. Varias horas al día, y en ocasiones, codo con codo con esta persona. Que está de buen ver, es maja y esas cosas. Y con la que ya he compartido alguna cervecita y algún pitillo a la salida del curre.
Como no podía ser de otro modo, la envidia corroe al resto de machos de la manada, que carecen de mi carisma para ganarse las atenciones de la nueva. Y claro, ya que no pueden tirarle los tochos a ella, optan por tirar pullas. A ella se la bufa, aparentemente, pero yo que soy de sangre caliente me encuentro batallando a la pérdida, lo cual, pues eso, me toca los huevos, ya que mi laburo es ya de por si altamente estresante.
Total, y para concluir, que me gustaría que compartierais conmigo vuestras experiencias. románticas o romancescas, que hayan transcurrido en vuestro entorno laboral. Mayormente para que terminéis de desanimarme, porque mi sentido común está perdiendo puntos en el debate que sostiene con mis dos sacos de esperma.
Probablemente ya hay un hilo sobre el tema, pero un egocéntrico como yo precisa de respuestas personalizadas.
También es una buena oportunidad para que todos aquellos que me la tienen guardada, o que simplemente necesiten descargar algo de adrenalina, aprovechen esta circunstancia de aparente debilidad por mi parte para darme algo de caña. No puede ser peor que las jiñadas de los últimos cuatro días.
Gracias y buenas noches.
Llevo media semana con una especie de virus intestinal que hace que cague más blando que un batido agitado. Ayer creía que me encontraba algo mejor, pero no, luego resulta que aquello se parecía más al Test de Roschard, que a uno de esos torpedos insumergibles indicativos de una sana digestión.
¿Por qué cuento esto? Porque el hilo se quedaba algo breve. Y porque sospecho que mi disfunción y varios días de encierro en casa estén afectando a mi buen juicio.
El caso es que hay nueva chica en la oficina.
Oh si. Y está de buen ver. Y es maja y esas cosas.
Como soy honrado y tengo escrúpulos, me toca joderme y trabajar.
Varias horas al dia. Varias horas al día, y en ocasiones, codo con codo con esta persona. Que está de buen ver, es maja y esas cosas. Y con la que ya he compartido alguna cervecita y algún pitillo a la salida del curre.
Como no podía ser de otro modo, la envidia corroe al resto de machos de la manada, que carecen de mi carisma para ganarse las atenciones de la nueva. Y claro, ya que no pueden tirarle los tochos a ella, optan por tirar pullas. A ella se la bufa, aparentemente, pero yo que soy de sangre caliente me encuentro batallando a la pérdida, lo cual, pues eso, me toca los huevos, ya que mi laburo es ya de por si altamente estresante.
Total, y para concluir, que me gustaría que compartierais conmigo vuestras experiencias. románticas o romancescas, que hayan transcurrido en vuestro entorno laboral. Mayormente para que terminéis de desanimarme, porque mi sentido común está perdiendo puntos en el debate que sostiene con mis dos sacos de esperma.
Probablemente ya hay un hilo sobre el tema, pero un egocéntrico como yo precisa de respuestas personalizadas.
También es una buena oportunidad para que todos aquellos que me la tienen guardada, o que simplemente necesiten descargar algo de adrenalina, aprovechen esta circunstancia de aparente debilidad por mi parte para darme algo de caña. No puede ser peor que las jiñadas de los últimos cuatro días.
Gracias y buenas noches.