cocreta2000
Maricón por oposición
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Pues sí hamijos, una de las claves de una relación fluida y duradera es mantener vínculos amorosos, para lo cual es más que recomendable practicar continuamente actividades que nos tengan en sintonía con nuestra compañera.
La clave es dedicar un ratito cada vez que vas a la cama a cuidar y que te cuiden, debe ser un reparto equitativo.
Evidentemente, no es lo mismo un lunes por la mañana que un fin de semana. Cuando uno madruga para currar, un sencillo besito o gesto es suficiente porque prima ponerse en marcha, pero a la noche o el fin de semana hay que dedicarle al amor el tiempo que se merece. Y el sepso, cuando surje y apetece.
¿Qué incluye aquello que llamo mimosear? Pues por ejemplo
La cuchara extended edition.
No hablo de echar el brazo por debajo del cuello de la señora y dormirse como un ceporro, hablo de una cuchara activa. Mientras se está pegado y abrazado, besos y caricias.
Esta práctica, en versión más o menos larga, se puede hacer todas las noches antes de dormir, y al despertarse si uno no tiene prisa.
Caricias
Una práctica muy recomendable antes de dormir. Unas caricias sobre la pareja desnuda, en espalda, brazos, piernas, axilas, glúteos... la deja relajada, feliz, y predispuesta, dependiendo si nos ceñimos a caricias relajantes sin más, o caricias orientadas a animar el asunto. Nada mejor que las manos, aunque los hay que usan plumeros y otros artefactos (yo no soy de cacharros externos).
Masajes relajantes y sensuales
Nada mejor para aliviar las tensiones del día o tras acabar una tanda de duro ejercicio que recibir un pequeño masaje. Al igual que las caricias, puede ceñirse a una relajación para dormir mejor, o ir degenerando a un masaje sensual hegre-art edition. Aquí viene bien usar un aceite de masaje, o con moderación, algún aceite esencial. Inciensos y similares no me gustan, me resultan cargantes.
Más que recomendable una música suave de fondo.
y pudiendo acabar en mambo o no, tampoco es prioritario, no obstante un masaje pausado y bien dirigido pone a una mujer en predisposición de hacer de todo.
Y otro consejo que más de una vez he mencionado, el dormitorio, como el de un monje budista. Ni televisión ni aparatos electrónicos. Lo único enchufable que tengo es una lámpara minimalista. La música relajante, la pongo en un móvil anulado en modo avión.
Cuidar los detalles es lo que ayuda a que una relación se mantenga viva con los años, y que el sexo se disfrute más.
La clave es dedicar un ratito cada vez que vas a la cama a cuidar y que te cuiden, debe ser un reparto equitativo.
Evidentemente, no es lo mismo un lunes por la mañana que un fin de semana. Cuando uno madruga para currar, un sencillo besito o gesto es suficiente porque prima ponerse en marcha, pero a la noche o el fin de semana hay que dedicarle al amor el tiempo que se merece. Y el sepso, cuando surje y apetece.
¿Qué incluye aquello que llamo mimosear? Pues por ejemplo
La cuchara extended edition.
No hablo de echar el brazo por debajo del cuello de la señora y dormirse como un ceporro, hablo de una cuchara activa. Mientras se está pegado y abrazado, besos y caricias.
Esta práctica, en versión más o menos larga, se puede hacer todas las noches antes de dormir, y al despertarse si uno no tiene prisa.
Caricias
Una práctica muy recomendable antes de dormir. Unas caricias sobre la pareja desnuda, en espalda, brazos, piernas, axilas, glúteos... la deja relajada, feliz, y predispuesta, dependiendo si nos ceñimos a caricias relajantes sin más, o caricias orientadas a animar el asunto. Nada mejor que las manos, aunque los hay que usan plumeros y otros artefactos (yo no soy de cacharros externos).
Masajes relajantes y sensuales
Nada mejor para aliviar las tensiones del día o tras acabar una tanda de duro ejercicio que recibir un pequeño masaje. Al igual que las caricias, puede ceñirse a una relajación para dormir mejor, o ir degenerando a un masaje sensual hegre-art edition. Aquí viene bien usar un aceite de masaje, o con moderación, algún aceite esencial. Inciensos y similares no me gustan, me resultan cargantes.
Más que recomendable una música suave de fondo.
y pudiendo acabar en mambo o no, tampoco es prioritario, no obstante un masaje pausado y bien dirigido pone a una mujer en predisposición de hacer de todo.
Y otro consejo que más de una vez he mencionado, el dormitorio, como el de un monje budista. Ni televisión ni aparatos electrónicos. Lo único enchufable que tengo es una lámpara minimalista. La música relajante, la pongo en un móvil anulado en modo avión.
Cuidar los detalles es lo que ayuda a que una relación se mantenga viva con los años, y que el sexo se disfrute más.
Freak total
Freak
Forero del todo a cien
