El llorica

Golfo Perlésico

RangoForero del todo a cien
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29 Jun 2022
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Yo era el llorica de clase. Bueno, estaban *nombre1 y *nombre2. nombre1 lloraba a poco que se metían con él. Sus padres eran de esos separados en los 90, cuando eso sonaba a familia desestructurada, a drogas y prostitución. Era el rumor, que su madre era puta. Yo qué sé, era buen tío. Ahora es chungo, de esos que puedes llamar para pillar lo que sea. *nombre2 era de los que se ponía enfermo en clase y lloraba hasta que venían a buscarle. De los que vomitaba, que eso siempre daba mucho asco en EGB, de los que se mareaban en el autobús y acababa vomitando siempre. Yo era el llorón de los de "maemía, la que me va a caer". Que decía la profesora "Golfo Perlésico, un 0 por hablar, y me echaba a llorar pensando en la zurra que me iba a caer, en los 3 meses sin salir a la calle aunque mi nota media fuese un notable. Que una vez me copiaron en examen dos de los chungos, que yo me dejé copiar sólo por encajar, y luego el profesor les sacó a la pizarra: "me habéis dejado sin palabras, resolved esta mierda aquí para que vuestros compañeros con chándales de tactel lo flipen de lo listos que sois". Que no sé si os he contado que mi madre me hizo borrarme del equipo de fútbol por eso de que "luego hay que ir a verte jugar y no tenemos tiempo". Que ni me gustaba el fútbol, sólo era por encajar, pero le marqué un gol al portero, que era un par de cursos más mayor y le llamaban Boomer por lo bueno que era, que recuerdo que "adolescente con pendiente que mola mil" me dijo, eso no vale que chutaste de puntera. Que joer, cuando crecí en todas direcciones me pasé media vida pensando "que se meta conmigo en un bar, que le reviento". Que luego igual me partía la cara, a saber.
 
Bueno, a mi directamente no iban a verme al fútbol. Recuerdo una vez que nos tocó ir a jugar un poco más lejos, y fui a la puerta de nuestro cole donde estaban los del equipo con sus familiares y un padre se ofreció a llevarme. Pero al acabar el partido, allí estaba solo yo, todo dios se había ido con sus padres y me tuve que buscar la vida sin saber donde tenía la mano derecha. 10 u 11 años tenía.
 
Bueno, a mi directamente no iban a verme al fútbol. Recuerdo una vez que nos tocó ir a jugar un poco más lejos, y fui a la puerta de nuestro cole donde estaban los del equipo con sus familiares y un padre se ofreció a llevarme. Pero al acabar el partido, allí estaba solo yo, todo dios se había ido con sus padres y me tuve que buscar la vida sin saber donde tenía la mano derecha. 10 u 11 años tenía.

Qué te dijeron respecto a eso o en general sobre el fútbol?
 
Qué te dijeron respecto a eso o en general sobre el fútbol?
Nada, mis padres no saben ni lo que he estudiado ni tan siquiera de qué trabajo. Así que imagina lo que les importaba lo del fútbol.

Si que una vez vino mi madre, y vino para liarla parda, la historia es tan lamentable y jodida que creo que aún no la he superado. Adelanto que gracias a esa visita, me estuvieron dos años tocando los cojones en el colegio. Vamos, lo que hoy se llama "mobbing".

Resulta que en el segundo año, me metieron en otro equipo. Eran todos amigos y allí llegaba yo, el nuevo, el raro, el subnormal que encima no es que fuera un Quini de la pelota. En esto que en un partido va la estrella del equipo, como todas las estrellas, el más subnormal, y no sé porqué me meto en medio de una jugada intentando ayudar y se choca conmigo. Yo esperaba un pase y vamos, ni pase ni mierdas, nos chocamos. Me llamó de todo y el entrenador, supongo que tendría un master en motivación, me sacó del campo y al banquillo.

Al acabar el partido, vino este, la estrella, y me llamó de todo, hijo puta, subnormal, montón de mierda, que me iba a reventar... y junto a él se juntaron el resto de los del equipo. Le había jodido una jugada clara, y claro, tenía que pagar. Me fui llorando y bueno, se vinieron arriba. Me persiguieron un rato llamándome de todo y riéndose de mi mientras lloraba como una puta niñata.

Llego a casa sin decir nada, y me meto en mi cuarto, entra mi madre y me pregunta qué te pasa, y maldita la puta hora en la que le dije lo que había pasado. Me coge por el brazo, enfadada, y nos vamos al campo de fútbol, y allí delante de todos, el horror. Gritos, insultos, el entrenador aparta del equipo a la estrella, y yo no vuelvo a jugar. Al llegar a casa mi madre me echa bronca aduciendo que siempre la dejo en ridículo. Al llegar mi padre lo mismo: que este niño parece maricón.

Decir que todos éramos del mismo puto colegio de mierda, y la que me cayó en los meses posteriores no se lo deseo a nadie.
 
Yo estaba en el equipo de ajedrez y mi viejo jamás vino a jalearme, a darme aliento, eché de menos un machaca a ese hijo de puta!, destrozalo, ese enroque, vamos sandokan, hemos trabajado ese gambito en casa mil veces, follatelo, con el pito te lo follas.

Nunca
 
Nada, mis padres no saben ni lo que he estudiado ni tan siquiera de qué trabajo. Así que imagina lo que les importaba lo del fútbol.

Si que una vez vino mi madre, y vino para liarla parda, la historia es tan lamentable y jodida que creo que aún no la he superado. Adelanto que gracias a esa visita, me estuvieron dos años tocando los cojones en el colegio. Vamos, lo que hoy se llama "mobbing".

Resulta que en el segundo año, me metieron en otro equipo. Eran todos amigos y allí llegaba yo, el nuevo, el raro, el subnormal que encima no es que fuera un Quini de la pelota. En esto que en un partido va la estrella del equipo, como todas las estrellas, el más subnormal, y no sé porqué me meto en medio de una jugada intentando ayudar y se choca conmigo. Yo esperaba un pase y vamos, ni pase ni mierdas, nos chocamos. Me llamó de todo y el entrenador, supongo que tendría un master en motivación, me sacó del campo y al banquillo.

Al acabar el partido, vino este, la estrella, y me llamó de todo, hijo puta, subnormal, montón de mierda, que me iba a reventar... y junto a él se juntaron el resto de los del equipo. Le había jodido una jugada clara, y claro, tenía que pagar. Me fui llorando y bueno, se vinieron arriba. Me persiguieron un rato llamándome de todo y riéndose de mi mientras lloraba como una puta niñata.

Llego a casa sin decir nada, y me meto en mi cuarto, entra mi madre y me pregunta qué te pasa, y maldita la puta hora en la que le dije lo que había pasado. Me coge por el brazo, enfadada, y nos vamos al campo de fútbol, y allí delante de todos, el horror. Gritos, insultos, el entrenador aparta del equipo a la estrella, y yo no vuelvo a jugar. Al llegar a casa mi madre me echa bronca aduciendo que siempre la dejo en ridículo. Al llegar mi padre lo mismo: que este niño parece maricón.

Decir que todos éramos del mismo puto colegio de mierda, y la que me cayó en los meses posteriores no se lo deseo a nadie.

Joder, ya lo siento macho...
 
Nada, mis padres no saben ni lo que he estudiado ni tan siquiera de qué trabajo. Así que imagina lo que les importaba lo del fútbol.

Si que una vez vino mi madre, y vino para liarla parda, la historia es tan lamentable y jodida que creo que aún no la he superado. Adelanto que gracias a esa visita, me estuvieron dos años tocando los cojones en el colegio. Vamos, lo que hoy se llama "mobbing".

Resulta que en el segundo año, me metieron en otro equipo. Eran todos amigos y allí llegaba yo, el nuevo, el raro, el subnormal que encima no es que fuera un Quini de la pelota. En esto que en un partido va la estrella del equipo, como todas las estrellas, el más subnormal, y no sé porqué me meto en medio de una jugada intentando ayudar y se choca conmigo. Yo esperaba un pase y vamos, ni pase ni mierdas, nos chocamos. Me llamó de todo y el entrenador, supongo que tendría un master en motivación, me sacó del campo y al banquillo.

Al acabar el partido, vino este, la estrella, y me llamó de todo, hijo puta, subnormal, montón de mierda, que me iba a reventar... y junto a él se juntaron el resto de los del equipo. Le había jodido una jugada clara, y claro, tenía que pagar. Me fui llorando y bueno, se vinieron arriba. Me persiguieron un rato llamándome de todo y riéndose de mi mientras lloraba como una puta niñata.

Llego a casa sin decir nada, y me meto en mi cuarto, entra mi madre y me pregunta qué te pasa, y maldita la puta hora en la que le dije lo que había pasado. Me coge por el brazo, enfadada, y nos vamos al campo de fútbol, y allí delante de todos, el horror. Gritos, insultos, el entrenador aparta del equipo a la estrella, y yo no vuelvo a jugar. Al llegar a casa mi madre me echa bronca aduciendo que siempre la dejo en ridículo. Al llegar mi padre lo mismo: que este niño parece maricón.

Decir que todos éramos del mismo puto colegio de mierda, y la que me cayó en los meses posteriores no se lo deseo a nadie.
Es que pareces maricón.
 
Mi padre tiene el don de la motivación.
Nunca era suficiente lo que hiciese ni yo ni mi hermana, pues era "nuestra obligación". No sabía ni en qué curso estaba ni que hacía, solo ha sabido poner pegas por todo a lo que hiciéramos.

Recuerdo en 3ESO que llegue con 7 de 11 asignaturas sobresaliente en junio, fue el "premio" de no tener apenas amigos en aquel momento, mi madre me dio la enhorabuena, mi padre me dijo que porque no había sacado las otras 4 también. Creo que ese fue uno de los días más tristes de mi vida.
Ese verano hice la asignatura pendiente, tener algún amigo, empecé a fumar, a beber y me hicieron mi primera paja. El resto de cursos la verdad que los aprobé pero con el mínimo esfuerzo.

La venganza se sirve fría, ahora me da bastante pena que sus nietas apenas le miren con cerca de 80 años, ni juegan con el ni nada, porque "el abuelo solo hace que decirnos que hacemos las cosas mal y no nos gusta eso".
 
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Nada, mis padres no saben ni lo que he estudiado ni tan siquiera de qué trabajo. Así que imagina lo que les importaba lo del fútbol.

Si que una vez vino mi madre, y vino para liarla parda, la historia es tan lamentable y jodida que creo que aún no la he superado. Adelanto que gracias a esa visita, me estuvieron dos años tocando los cojones en el colegio. Vamos, lo que hoy se llama "mobbing".

Resulta que en el segundo año, me metieron en otro equipo. Eran todos amigos y allí llegaba yo, el nuevo, el raro, el subnormal que encima no es que fuera un Quini de la pelota. En esto que en un partido va la estrella del equipo, como todas las estrellas, el más subnormal, y no sé porqué me meto en medio de una jugada intentando ayudar y se choca conmigo. Yo esperaba un pase y vamos, ni pase ni mierdas, nos chocamos. Me llamó de todo y el entrenador, supongo que tendría un master en motivación, me sacó del campo y al banquillo.

Al acabar el partido, vino este, la estrella, y me llamó de todo, hijo puta, subnormal, montón de mierda, que me iba a reventar... y junto a él se juntaron el resto de los del equipo. Le había jodido una jugada clara, y claro, tenía que pagar. Me fui llorando y bueno, se vinieron arriba. Me persiguieron un rato llamándome de todo y riéndose de mi mientras lloraba como una puta niñata.

Llego a casa sin decir nada, y me meto en mi cuarto, entra mi madre y me pregunta qué te pasa, y maldita la puta hora en la que le dije lo que había pasado. Me coge por el brazo, enfadada, y nos vamos al campo de fútbol, y allí delante de todos, el horror. Gritos, insultos, el entrenador aparta del equipo a la estrella, y yo no vuelvo a jugar. Al llegar a casa mi madre me echa bronca aduciendo que siempre la dejo en ridículo. Al llegar mi padre lo mismo: que este niño parece maricón.

Decir que todos éramos del mismo puto colegio de mierda, y la que me cayó en los meses posteriores no se lo deseo a nadie.
Tengo una duda:

Acaba el partido y vas a casa; te metes al cuarto a llorar, entra tu madre y vais al campo de fútbol otra vez a liarla. ¿Que hacia todo el equipo en el campo de fútbol después del partido y no en sus casas como tú ?
 
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Tengo una duda:

Acaba el partido y vas a casa; te metes al cuarto a llorar, entra tu madre y vais al campo de fútbol otra vez a liarla. ¿Que hacia todo el equipo en el campo de fútbol después del partido y no en sus casas como tú ?
Pues que se quedaban viendo otros partidos o haciendo el postpartido camelando. Incluso muchas semanas había más de un partido. Eran ligas de colegios.
 
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Yo era bastante mierdoso, muy cobarde. Tenía mucho miedo a que me pegaran y no tener los cojones de responder. El caso es que nuncq me dieron motivos para desatar mi potencial llorica. Si a mí me llegan a hacer bullying me destrozan.

Supongo que por eso siempre he evitado los ambientes donde la masculinidad tóxica toma forma, donde el más retrasado es el que dicta las normas y todo eso. Y a los que se sienten cómodos en esas situaciones los desprecio.
 
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Yo era bastante mierdoso, muy cobarde. Tenía mucho miedo a que me pegaran y no tener los cojones de responder. El caso es que nuncq me dieron motivos para desatar mi potencial llorica. Si a mí me llegan a hacer bullying me destrozan.
Si quiere se lo hacemos aquí, no vaya a morirse sin perderse la experiencia.
 
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Mi padre tiene el don de la motivación.
Nunca era suficiente lo que hiciese ni yo ni mi hermana, pues era "nuestra obligación". No sabía ni en qué curso estaba ni que hacía, solo ha sabido poner pegas por todo a lo que hiciéramos.

Recuerdo en 3ESO que llegue con 7 de 11 asignaturas sobresaliente en junio, fue el "premio" de no tener apenas amigos en aquel momento, mi madre me dio la enhorabuena, mi padre me dijo que porque no había sacado las otras 4 también. Creo que ese fue uno de los días más tristes de mi vida.
Ese verano hice la asignatura pendiente, tener algún amigo, empecé a fumar, a beber y me hicieron mi primera paja. El resto de cursos la verdad que los aprobé pero con el mínimo esfuerzo.

La venganza se sirve fría, ahora me da bastante pena que sus nietas apenas le miren con cerca de 80 años, ni juegan con el ni nada, porque "el abuelo solo hace que decirnos que hacemos las cosas mal y no nos gusta eso".

Sigues siendo la misma llorona de siempre. La tristeza de tu padre es que su línea sanguínea se haya perpetuado en ti.

Te metía una hostia para que llores como una puta
 
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