Esta es la segunda parte,"El Espectáculo" Relato Erótico.

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Aborto de Forero
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22 Oct 2010
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El Espectáculo 2, la gran bacanal.:145

Hace una semana que no veo a Eduardo y Claudia, desde que disfrutamos de las virtudes de mi esposa que no los veo.
Mi mujer pregunta por ellos también.
Hacia la tarde me lo encuentro a él y mantenemos un pequeño dialogo.
-“Hola, te tengo dos noticias, no te vi. antes porque no sabía como devolverte el favor de aquella noche”, empieza diciendo él.
-“¿Y?” respondo yo
-“Vimos a ese tal Tony, pero mi mujer no se animó a subir al escenario, volví muy mal a casa”
-“¿Todo mal entonces?”
-“Bueno, esa noche si, pero…un noche follando le pregunto que opina de Uds., de hacer tríos, orgías y para mi mayor sorpresa pues no conocía esa cara de mi mujer, me dice que si es con ustedes no hay problema, la muy puta”, cuenta riendo Eduardo.
-“Bueno, hay que fijar una fecha, mejor consultamos a ellas no vaya ser que estén con la regla”.
-“Así quedamos te llamo”.
-“Esta vez en mí casa, la de fuera del pueblo”, me responde.
Llego a casa y le comento a mi mujer, de una comida en casa de Edu, encantada irá me responde.
Luego voy al dormitorio abro la mesa de luz y miro cuento sus píldoras anticonceptivas le quedan 10, tenemos diez días.
Llamo a Eduardo y le propongo fechas dentro de los próximos diez días, el me dice a su mujer le quedan calcula 7 días para la regla, tendrá que ser el Sábado próximo, hecho.
Ya me está excitando la idea, hace horas que tengo una erección, lo primero que hago es ir a una tienda y comprar una filmadora, salgo de ahí voy a casa y por Internet me compro unos juguetes sexuales nuevos, gastando un pastón.
Con algunos temores encaro a mi mujer,
-“¿Hola en que andas?”, me pregunta a lo que respondo…”Golondrina,” cae en trance,” te gusta sexualmente Claudia y nunca te molesto que te filmaran follando” le digo, “de acuerdo, solo recordaras que me viste entrar en casa”.
-“¿Hola en que andas?”me pregunta ella.” De compras, Ah! quedamos con Edu, en su casa de campo, los cuatro el sábado próximo a cenar”
-.” Bien, mando los nenes con Mamá sábado y domingo”, responde mi mujer
-“Salgo un rato de compras. Chau.
Sábado, es ya de tarde, cuento los minutos, las horas. A las 22.00 nos aprontamos ella sin yo decirle nada se pone un vestido muy justo, muy sexy.
Montamos en el coche y partimos a las 23hs llegamos.
Nos recibe una muy prolija maquillada y sexy Claudia.
Saco la filmadora y el bolso del auto, mi mujer no se inmuta, pero una pícara Claudia pregunta:
-
“¿Vas a grabar todo, todo?”” Sí claro” respondo con naturalidad.
Monto la cámara en el comedor, hay una mesa bien provista, velas, cava no faltaba nada.
La cena fue muy buena, la conversación normal, pero un poco de alcohol aflojó las tensiones, Claudia y ni esposa empezaron a bromear sobre la forma fálica de las zanahorias comidas, luego las velas, todo de empezó a calentar.
Yo estaba sentado a la derecha de Claudia por bajo la mesa meto mi mano por debajo de su mini vestido, sobre sus muslos, ella me mira, pasa la lengua por sus labios y afirma, esto se pone interesante Claudia se le cae un cubierto entre las piernas de mi esposa y con la excusa de su torpeza al intentar levantarlo, mete su mano sobre la tanga de la otra.
-“¿Porqué no vamos a un sitio mas cómodo?” indicando el dormitorio.
Claudia coge a la otra de la mano y se la lleva, Edu y yo con cámara, bolso detrás.
Yo monto la filmadora en su trípode mirando a la cama.
Las chicas comienzan, se besan y se desnudan mutuamente, sacándose los vestidos por sobre su cabeza, una lleva lencería negra y la otra roja.
Se arrancan los brassier y se bajan las tangas, ambas tienen sus chochos sin un vello, luego masturban mutuamente, se abren una a otra el coño, gimen.
Luego nos miran y nos invitan a participar, rápidamente nos desnudamos.
Nuestras pollas ya miran en 45º al cielo.
Claudia me mira y me dice
-“¿Querías algo conmigo?”
-“Saborearte” respondo.
Nos besamos, si sacar su boca de mi piel ella baja hasta mi polla, se mete mis huevos en su boca, mientras miro como mi esposa le hace una felación a Eduardo que esta recostado en la cama.
Claudia mete mi polla en su boca sacándome gemidos, luego inexplicablemente para y me dice.
-“Vamos esto va a ser interesante, quiero ver como se follan a ella”.
Le toca el turno a mi esposa que ya se encuentra boca arriba sobre la cama y Eduardo le está abriendo las piernas como a una rana.
Su mujer se acerca la besa, luego le come sus tetas…
-“ hummm..., tienes leche” comenta curiosa
Mientras un gran, erecto miembro viril, se acerca a su coño grande rosa ligeramente abierto, el glande se acerca a la entrada y desaparece dentro con facilidad, abriéndose un paso entre labios mayores y menores, ayudado por la humedad, desatando gemidos, Edu empieza a embestir acompasadamente, yo parado al lado de la cama observo como el matrimonio de amigos se follan a mi mujer, ella grita” ahhhh”, el primero de la noche, diez largos minutos después mi mujer tiene el coño de la otra en su boca y él aún dentro de ella.
Claudia con una mano acaricia mi pene y me masturba tras tensos minutos eyaculo en sus manos y en los pechos de mi mujer.
Rápidamente nuestra amiga unta mi semen por todo el cuerpo de la otra, hasta donde le llegan las manos como si fuera crema para cuerpo.
Él respira profundo, aguanta, sus testículos van reventar, hinchados, tensos, cargados, de la boca de ella parte un hummm..., de la él un aaaahhhrr y de la de Claudia un triunfante “siiii! que rico!” una cascada de semen caliente llena a mi esposa, vagina y .útero.
Cuando el retira su flácida y goteante verga, un mar se esperma sale de mi hembra, que jadea y suda.
Claudia empieza a beber el esperma del marido que chorrea el coño de mi mujer, mientras que el mete su pene en boca de mi señora.
Ver eso me excita mi polla coge forma, el culito en pompa de la mujer de mi amigo mira hacia mí, su rajita es pequeña, apretada, no dudo, le relleno el coño con mi polla. Ella no se lo esperaba y gime;
-“¡Traidor! ya que estas dentro de mí, dámela toda”.
Su culito firme sus caderas pequeñas me ponen a cien, la cama trine, ella araña el colchón, vibra, grita, su primer orgasmo, es diferente a mi mujer menos gritona
-“Quiero que te corras dentro de mí, dale, dale me pide.uy. ufff..., que rico, dámela ya”.
No aguanto tanto incentivo y siento como me derramo, como pierdo parte de mí, me voy en leche, ella mira hacia atrás y me dice riendo.
-“Sí, te siento caliente dentro de mí”, su coño prieto es como una ventosa.
La saco dejándole su rajita blanca, pero no sale ni una gota.
Se da la vuelta limpiándome la polla con su boca saboreando los restos de esperma. Perdí la noción del tiempo y espacio por segundos.
No veo a mi esposa en la cama, cuando la ubico, está montado a Eduardo en un sofá, de él solo se descubren unos huevos grandes hinchados bajo la rajita de ella, el pene ha desaparecido en el interior de ella.
Cabalga, hacia arriba y hacia abajo, sobre él , con sus ojos entrecerrados y su boca abierta de la cual parten largos gemidos.
-”Dame más amor, así, así” susurra ella , mientras con sus manos atrae la cabeza de él hacia sus turgentes pechos.
Mi amigo tiene su boca sobre los pezones de ella y los chupa succionando la leche materna que fluye, sus manos están afirmadas en los glúteos de ella, hasta que ambos integrantes del abrazo carnal llegan al éxtasis, en simultaneo grito, que retumba en la casa, un clímax hermoso envidiable, dejando grandes manchas de un liquido biológico blanco viscoso en el sofá y en las nalgas de ella los 10 dedos marcados del amante luego jadeantes se besan y se dan las gracias, dialogan…
Veo que Claudia también observaba a los amantes y se masturbaba.
Ellos se incorporan de la mano vienen a la cama.
Un hilo largo de semen desliza o lo largo de las piernas de mi cónyuge.
La polla de mi amigo se reduce a su más mínima expresión, sus huevos retraídos, pequeños, colgantes han dejado su fecunda carga dentro de la matriz de ella.
Eduardo mira a su mujer, me mira y me dice.
-“¿Quieres probar su colita?”.
-“¡Es virgen!” a lo que ella responde.
-“Por ahí nunca lo he hecho, duele, nunca lo haré”.
Las dos mujeres hablan entre sí. y minutos después…
Claudia acepta probar, ponte en 4 en la cama le decimos, traigo el bolso y saco un gran dildo, bolas chinas, vibrador y crema.
Le unto con crema el ano. ella tiembla, cojo el dildo, intento meterlo, no se deja, grita no, mi mujer le abre las nalgas ,Eduardo le sujeta las manos, introduzco un bien encerado pero grande dildo hasta la mitad, ella ruega sacadlo, duele, pero lo empujo mas…
-“¡Hay!” grita
Empujo un poco más, entra todo y se succiona solo.
Luego enciendo el vibrador y se lo meto en su inseminado coño, ella gime, ahora goza, meto y saco repetidamente el dildo y cuando el ano esta dilatado la penetro con mi miembro, al lado de nosotros pero en dirección opuesta, esta mi mujer que aún no saca las manos de las abiertas nalgas de Claudia, su expresión a cambiado porque el sabandija de mi amigo le metió las bolas chinas en su culo, ahora su polla y azota sus nalgas.
Minutos mas tarde ambas golfas reciben su ración de semen en sus intestinos. A la mujer de mi colega le gusto que la desvirgara.
Los cuatro nos dormimos agotados.
Domingo, día del retorno a casa, los cuatro juntos nos bañamos, salimos a disfrutar la mañana, a las 12 comemos a las 13.30 decidimos dormir una “siesta”, sin quererlo intercambiamos parejas y como el dormitorio grande estaba sucio, cada pareja se fue a uno pequeño, no nos podíamos ver entre nosotros.
Primero desnude lentamente a la hembra de mi amigo, le quite la blusa, pantalones , sujetador y suavemente sus braguitas, la bese le metí la lengua hasta la campanilla, bajé a su pechos y se los comí, luego vi su pequeño coño, estrecho depilado, la sentí mojarse la abrí de piernas y la miré con lascivia.
-“Métemela” me rogó.
Voy a sus pies son pequeños las uñas pintadas me encantan, subo desde ellos con mi boca por sus piernas, muslos, coño, jugueteo con su clítoris la penetro la hago gozar, un ahhh, apagado, luego otro, cuando estoy a punto de explotar…
-¨” Móntame” le pido y así lo hace.
Mi pene desaparece dentro de ella mis huevos quieren de un momento a otro regalarle su preciosa carga, su coño prieto devora mi polla, ella se mueve lindo y 5 minutos mas tarde me saca hasta la última gota de leche.
-“¡Siiii!”, grita ella.
Mientras recuperamos aliento y descansamos siento como mi pene se achica y el semen cae de la chica en mi pubis, al callarnos, escuchamos una conversación desde otro cuarto, la voz de Eduardo diciendo;
-“Abre las piernas, más, así”
Luego el chirrío intenso de una desvencijada vieja cama durante largos minutos y los fuertes gritos de mi mujer
-” Si, si, si,“ llegando al éxtasis de un orgasmo a otro y con largos ¡aaaaaahhhh!,
-” No aguanto más, no más ¡córrete ya!”
.Para culminar con gritos del amante ocasional hacia mi mujer.
-“Siii, guarra, te voy a impregnar, ¿la quieres bien dentro?”.
-“¡Cierra las piernas!”
-“! Que no se derrame fuera!” responde ella.
-“¡Ahhhhhhhh!” de ambos parecía.
-“! Abre la boca, más, más, así, rico!”Gimió él.
Claudia me mira riendo y me dice.
-“¿Te gustaría ver? “.
-!“Parece que está haciendo de goma a tu mujer, la va a partir en dos, como le está dando!” yo la miro serio, ella me pregunta
-“¿Celoso?”
-“Un poco”, le digo.
-“¿La amas verdad?”
- “Pues claro”, respondo.
Luego casi con bronca la doy vuelta le abro las piernas y la follo hasta dejar mi semilla en su coño, ella jadea, uf, uf, ahhhhhhhhhhhh le saco un inesperado, fuerte, largo grito que acompaña al clímax, esta vez si queda chorreando por su coño,
Media hora mas tarde nos reunimos, ellas se han bañado sin pintar y con el pelo mojado, de chándal, nadie adivina lo vivido anteriormente, aunque mi señora camina como un pato.
Claudia ríe, la mira a ella me mira a mí y susurra,
-“Te dije”.
Cojo la filmadora, nos despedimos y retornamos, en el coche, mi mujer suspira y afirma
- “He quedado…”,
-“Completita, satisfecha” termino yo la frase,
-“Eso mismo”, responde ella.
Meses mas tarde, Eduardo me dice, mi esposa está de 4 meses (mentalmente hago la cuenta, para descubrir, que o estaba ya preñada o lo quedo por entonces en nuestra aventura).y añade…
-“Tu eres el Pa…Padrino hombre”.
Mi esposa pregunta de vez en cuando por ellos.
Yo miro el video, la veo alcanzar el clímax y no me atrevo a preguntarle que sentía cuando mi colega la poseía.
Saber que ella estaba con un hombre follando, gozando como nunca, lejos de mí, me pone celoso y más de una vez he querido susurrarle Golondrina al oído, nada de lo vivido sucedió, lo olvidaras.
 
Segundas partes nunca fueron buenas.

Y la primera fue otra mierda.

Haga el favor de no volver más por aquí, superfluo.

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