__Moroder__
Clásico
- Registro
- 8 Jun 2005
- Mensajes
- 2.134
- Reacciones
- 0
Todos nos hemos pasado algún que otro orco, si en el fondo al cabo del tiempo nos reimos y poco más.
A mí cuando mi ex me enchufó, la única que merece tan glorioso rango entre el resto de escombros posteriores que han pasado, me dió por acostarme todo lo que se me pusiese en frente y hubiera ocasión puesto que junto a la depresión de caballo que llevaba encima ( nunca mais y a dios rogando ) tenía que sofocar de algún modo la otra parte de la batalla personal, esto es, el anhelo sexual hacia esa persona que no me dejaba dormir y más sabiendo que ella estaba por ahi de fiesta complaciendo sus caprichos sexuales cuando y como quisiera.
La cosa es que estando de fiesta lleno hasta los topes de alcohol a eso finalizar la noche se me acerco una chica bajita un poco entrada en carnes pero bastante guapa de cara ( y bastante enchufada de pastillas la pobre todo sea dicho ) y me empezó a dar paliqueo sin parar ( es lo que tiene ir en ese estado ... ) , total que sin entrar en detalles nos acabamos liando en la discoteca de una forma bastante fogosa a lo que no dudé de invitarla a mi casa a la salida de la discoteca puesto que como ya he dicho uno que escribe llevaba las hormonas al extremo, craso error.
Ya metidos en el Metro y con las luces mucho más definidas me empezé a comer la cabeza dado que ahora que la veía mejor la cosa no pintaba tan bien, entre que no era especialmente alta ( y yo que yo mido 1,89 ) , sus patas eran más similares a un jamón de Guijuelo y la carne se le salia un poco del top la cosa no estaba para tirar cohetes, pero como ya he dicho de cara era bastante guapa y el pechamen que lucia era bastante imponente así que no le di demasiada importancia.
Llegamos a mi casa y previas chorradas varias nos empezamos a liar y la cosa no pintaba mal en ese instante, fuimos a la cama y yo me despeloté y ella también excepto el sujetador a lo que al principio no le di demasiada importancia dado que me imaginaba que bajo esa prenda se escondía algo que compensaría de sobras de cintura para abajo. Le comí el parruso con una cierta falta de motivación ya que su pelvis transmitía de todo menos excitación y ella me repasó los bajos con su pequeña boquita por lo que tampoco fue como para tirar cohetes.
La cosa es que nos habiamos repasado los bajos mutuamente , yo había conseguido pese a todo la excitación necesaria para echar un polvo pero el sujetador seguía ahi puesto sin sentido alguno y uno que iba borracho y no estaba para demasiadas tonterías le dijo que sujetador fuera a lo que ella no puso una cara especialmente alegre para sorpresa mía, en ese instante claro, porque maldita la hora en que se lo pedí ya que una vez fuera la prenda donde yo esperaba encontrar un excelso pechamen se asomaron dos masas enormes y deformes en forma de tetas que se le caían por los lados ( ella estaba tumbada ) y casi tocaban via lateral las sabanas todo ello decorado con unos pezones del tamaño de una mandarina, tetas de cabra como se conoce vulgarmente pero de forma exagerada a lo que a tal imagen el pito se me bajo ipsofacto y con las ganas de salir de la habitación cagando leches ya que en ese mismo instante asumi plenamente que aquello no se iba a levantar en toda la mañana y por consiguiente estaba metido en una situación de tierra trágame sin saber que decir y con los nervios a flor de piel al no saber como explicarselo de forma delicada.
La cosa es que me tuve que tragar el orgullo y decirle que estaba pasando por un mal momento personal y que precisamente encontrarme en una situación sexual con otra persona diferente me había deshubicado del todo, aunque era bién obvio que todo ocurrió tras deshacerse del sujetador pero me imagino que suficiente tendría ella con ese complejo como para no dar por válida esa excusa y hacer teatro como por buena, a lo que al final nos quedamos dormidos y por la mañana se fue no sin un cierto sentimiento de tierra trágame entre ambos, patético vamos
Entre la historia de la madura y recordar estos momentos bizarros personales me estoy pegando unas buenas carcajadas esta noche
Las féminas que campan este subforo también podría deslizarse a la altura del betún como hemos hecho unos cuantos y contar experiencias similares que por haberlas seguro que las habrán tenido.

A mí cuando mi ex me enchufó, la única que merece tan glorioso rango entre el resto de escombros posteriores que han pasado, me dió por acostarme todo lo que se me pusiese en frente y hubiera ocasión puesto que junto a la depresión de caballo que llevaba encima ( nunca mais y a dios rogando ) tenía que sofocar de algún modo la otra parte de la batalla personal, esto es, el anhelo sexual hacia esa persona que no me dejaba dormir y más sabiendo que ella estaba por ahi de fiesta complaciendo sus caprichos sexuales cuando y como quisiera.
La cosa es que estando de fiesta lleno hasta los topes de alcohol a eso finalizar la noche se me acerco una chica bajita un poco entrada en carnes pero bastante guapa de cara ( y bastante enchufada de pastillas la pobre todo sea dicho ) y me empezó a dar paliqueo sin parar ( es lo que tiene ir en ese estado ... ) , total que sin entrar en detalles nos acabamos liando en la discoteca de una forma bastante fogosa a lo que no dudé de invitarla a mi casa a la salida de la discoteca puesto que como ya he dicho uno que escribe llevaba las hormonas al extremo, craso error.
Ya metidos en el Metro y con las luces mucho más definidas me empezé a comer la cabeza dado que ahora que la veía mejor la cosa no pintaba tan bien, entre que no era especialmente alta ( y yo que yo mido 1,89 ) , sus patas eran más similares a un jamón de Guijuelo y la carne se le salia un poco del top la cosa no estaba para tirar cohetes, pero como ya he dicho de cara era bastante guapa y el pechamen que lucia era bastante imponente así que no le di demasiada importancia.
Llegamos a mi casa y previas chorradas varias nos empezamos a liar y la cosa no pintaba mal en ese instante, fuimos a la cama y yo me despeloté y ella también excepto el sujetador a lo que al principio no le di demasiada importancia dado que me imaginaba que bajo esa prenda se escondía algo que compensaría de sobras de cintura para abajo. Le comí el parruso con una cierta falta de motivación ya que su pelvis transmitía de todo menos excitación y ella me repasó los bajos con su pequeña boquita por lo que tampoco fue como para tirar cohetes.
La cosa es que nos habiamos repasado los bajos mutuamente , yo había conseguido pese a todo la excitación necesaria para echar un polvo pero el sujetador seguía ahi puesto sin sentido alguno y uno que iba borracho y no estaba para demasiadas tonterías le dijo que sujetador fuera a lo que ella no puso una cara especialmente alegre para sorpresa mía, en ese instante claro, porque maldita la hora en que se lo pedí ya que una vez fuera la prenda donde yo esperaba encontrar un excelso pechamen se asomaron dos masas enormes y deformes en forma de tetas que se le caían por los lados ( ella estaba tumbada ) y casi tocaban via lateral las sabanas todo ello decorado con unos pezones del tamaño de una mandarina, tetas de cabra como se conoce vulgarmente pero de forma exagerada a lo que a tal imagen el pito se me bajo ipsofacto y con las ganas de salir de la habitación cagando leches ya que en ese mismo instante asumi plenamente que aquello no se iba a levantar en toda la mañana y por consiguiente estaba metido en una situación de tierra trágame sin saber que decir y con los nervios a flor de piel al no saber como explicarselo de forma delicada.
La cosa es que me tuve que tragar el orgullo y decirle que estaba pasando por un mal momento personal y que precisamente encontrarme en una situación sexual con otra persona diferente me había deshubicado del todo, aunque era bién obvio que todo ocurrió tras deshacerse del sujetador pero me imagino que suficiente tendría ella con ese complejo como para no dar por válida esa excusa y hacer teatro como por buena, a lo que al final nos quedamos dormidos y por la mañana se fue no sin un cierto sentimiento de tierra trágame entre ambos, patético vamos

Entre la historia de la madura y recordar estos momentos bizarros personales me estoy pegando unas buenas carcajadas esta noche

Las féminas que campan este subforo también podría deslizarse a la altura del betún como hemos hecho unos cuantos y contar experiencias similares que por haberlas seguro que las habrán tenido.