Hogan no le iba a la zaga. En mi cabeza aun revolotean esas escenas donde se rompia la camisa, resoplaba, alzaba las manos al aire, esos sudores, esos gritos, y un largo etc de botaratadas varias que hacia la delicia de sus incondicionales. Sabiendo que todo aquello era una farsa, para mantener ese nivel de euforia tan realista, me quedan dos opciones: una, que Hogan era un ingenuo y morira pensando que fue campeon de algo parecido al MMA, o dos, la mas evidente ...