Ligar en un súper alemán: del campo de nabos a pasearte con Oscar Mayers.

pakitopakito

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5 Abr 2007
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Resulta que en tierras de los Achtung han decidido que se puede ligotear en los supermercados, para lo cual según entras en el local puedes ponerte una pegatina con tu nombre y si alguien comprando el chucrú le molas, le puede dejar a la cajera una papeleta con respuestas establecidas respecto a la persona que te ha llamado la atención. Cosas del tipo me gusta para amistad, cena romántica, le metería un guantelete de acero por el ano, en fin, lo normal.

Creéis que funcionaría aquí con tanto bar cerrado y con las apps de follercio colapsadas de micropenes?

 
Resulta que en tierras de los Achtung han decidido que se puede ligotear en los supermercados, para lo cual según entras en el local puedes ponerte una pegatina con tu nombre y si alguien comprando el chucrú le molas, le puede dejar a la cajera una papeleta con respuestas establecidas respecto a la persona que te ha llamado la atención. Cosas del tipo me gusta para amistad, cena romántica, le metería un guantelete de acero por el ano, en fin, lo normal.

Creéis que funcionaría aquí con tanto bar cerrado y con las apps de follercio colapsadas de micropenes?

Primero la cruz de David y ahora esto. Es que no cambian.
 
Primero la cruz de David y ahora esto. Es que no cambian.
Lo de ligar en los súper hace al menos veinte años que se puso de moda en los USA; así que no es una cosa nueva, precisamente.

Yo lo intenté una vez, hará un par de años, con patéticos resultados: ocurrió alguna cosa graciosa con una mujer muy mayor y, con el comentario jocoso a la jovencita de al lado, que rió, le pregunté algo como si podíamos tomar una café... La chica, amablemente, me vino a decir que nanay.

Eso sí, con tantas tías buenas que te cruzas en el súper, resulta que no es tan guay. En un Carrefour, por ejemplo, me andaba encontrando "casualmente" con una tipa que, sistemáticamente, se ponía a mirar los lineales en los que yo estaba, y se me ponía justo al lado. Estuve a punto de soltarle algo, hasta que apareció el macarra con el que estaba; menos mal que no le tiré los trastos. Menuda putarrángana.

Por último, he de decir que las cajeras de súper e híper me ponen mogollón. Y eso que es difícil con los horribles uniformes que les endosan. Pero la prueba definitiva es que, si con esos uniformes están buenas (algunas seguro que se los ajustan), es que son unos pibones. También lo intenté con una de Mercadona, que estaba de aúpa; por supuesto, también con pésimos resultados, jajaj. Lo bueno de las cajeras, al menos, es que les puedes soltar algo y no pueden salir corriendo del miedo, porque están encerradas en su cubículo, juas.
 
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Hace poco estaba en un grupo de BDSM en kik. Tienen programada una ficha donde pones edad, altura, fantasia. En fantasia puse ligar en el super. Se quedaron ñé. Porque mi fantasia no es un trio o cosas raras sino ligar de manera fácil. Que la tia te lo ponga en bandeja, rollo maricones paseando el perro. Que las tias fueran por ahí narcotizadas, borrachas o directamente fueran retrasadas. Tampoco es que intente nada, sólo uso ese tipo de fantasia para las pajas. Sentirme un filimbi en cualquier situación sin necesidad de hacer ningun alarde.

Si recuerdo una vez que vi a una mature embutida en mallas rosas transparentando el tanga que entraba a un super. Fui detrás y al escucharla hablar me pareció del este. Al salir la seguí. Llevaba una bolsa a cada lado y parecia que pesaban mucho y se agachaba para dejarlas en el suelo y descansar. No pude sino soltarle un chascarrillo sobre lo bien que le quedaban las mallas y ofrecerle mi ayuda con las bolsas. No se si respondió que vivia cerca o qué pasa pero huí asustado
 
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