A mí me encantó
El capitán salió a comer y los marineros tomaron el barco, libro en el que el autor refleja su apatía y falta de esperanza por el mundo durante su últimos días de vida; probablemente es su obra más madura. En cuanto a los relatos cortos, es muy recomendable
La máquina de follar, a pesar de su grosero título, es un relato breve bastante penoso sobre las carencias afectivas del hombre.
Si buscas algo trágico no puedes perderte estos indispensables clásicos:
La metamorfosis, de Kafka;
De profundis, una desgarradora epístola del genial Oscar Wilde;
La gata sobre el tejado de zinc caliente, de Tennessee Williams (cualquiera de sus obras teatrales es magistral, es mi dramaturgo favorito sin duda);
La familia de Pascual Duarte, libro sórdido y brutal donde los haya; y, en último lugar, la historia más trágica que he leído en toda mi vida,
Justina o los infortunios de la virtud, terrible. Si no te conmueve esta última es que eres un verdadero hijo de puta sin alma. Cualquier texto de Sade que leas te fascinará por su brillante uso de lenguaje y por darte la posibilidad de contemplar la desnuda miseria de la humanidad, pero también te volverá huraño y aún más reacio a relacionarte con los demás si ya eres previamente desconfiado. Sade atrae, pero asquea al mismo tiempo. Ha sido uno de los pocos genios capaces de presentar sin tapujos todas las vilezas de nuestra especie sin miedo a ser castigado por ello por la sociedad en la que le tocó vivir, por eso ha sido visto siempre como un hombre malvado, cuando en realidad no fue sino un desgraciado que sufrió el desamor, la guerra y el escarnio, pero no una mala persona en realidad; fue único.
Los 120 días de Sodoma tampoco tiene pérdida.
Me
puedes preguntar.
Off-topic/on-topic:
Sade y Freud han sido dos de los pensadores que más han influido en mi forma de ser y de percibir lo que me rodea, lo que explica que sea consciente de la irracionalidad de los hombres, así como que muestre predilección por el movimiento surrealista. Además de recomendar libros al autor del hilo, se podría aprovechar el mismo para hablar acerca de qué autores han marcado nuestro crecimiento espiritual.