ruben_clv
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Cuando Moisés llevaba sobre la tierra más de cien años, su señor Yavhé consideró oportuno retirarlo para siempre de los verdes prados terrenales y dedicarlo al pastoreo angelical sobre los algodones celestiales. Pero hasta el mismo Dios judío palidecía ante el mal humor del profeta -hecho probado con creces en su affair con los egipcios-, circunstancia que explica que un Ángel en persona se le apareciera para avisarle de que Él había decidido prescindir de sus servicios para con los humanos y que su ascenso al más allá estaba próximo.
Moisés, que se las sabía todas, sólo añadió: "Está bien. Pero considero justo que se me vaya avisando poco a poco del momento que ha de llegar. Quiero dejar todo atado y bien atado en mis tierras, con mis mujeres y mis hijos; saldar mis deudas y perseguir a mis deudores". El Ángel aceptó inclinando la cabeza.
Pasaron los años y el Ángel volvió a la tierra. Moisés, es el momento de partir, despídete de tu familia y de tu cuerpo impuro -señaló con autoridad-. Nada de eso -respondió Moises-, hicimos un pacto que no se ha cumplido, habéis faltado a vuestra palabra, ninguno de vuestro avisos ha llegado a mí. El Ángel, sonriendo, dijo: "Y qué crees que eran las canas en tu pelo, los dolores de tu espalda, la afonía de tu voz. Qué crees que significaban las calvas en tu cabeza, las arrugas de tu piel, lo pesado de tu aliento. Mil y un avisos hicimos llegar, ¿acaso tu acusada ceguera no te dejó verlos?"
Y así se cuenta que murió Moises, el más grande de los profetas judíos. Le tomaron el pelo un poco.
¿A qué viene toda esta mierda? No es que me vea mayor, sólo tengo 30 años, pero últimamente vengo preocupándome por lo que veo a mi alrededor. Digamos que veo a la gente envejecer, dejar de ser quienes eran y convertirse en otra cosa que, aunque diferente, a mí me parece peor. La verdad es que no sé a qué edad uno empieza a perder la fe en su cuerpo. Viendo a mi abuelo diría que es a partir de los 70 cuando todo va en caída libre, y es muy jodido ser consciente de todo eso si tu cabeza está al 100%, como es el caso. Está claro que la idea de ser un viejo verde es atractiva, pero necesito que los mayores de verdad, Mundele y cia, me digan si el deseo carnal disminuye a la misma velocidad a la que se deteriora tu cuerpo. No me imagino más que acosando jovencitas y creo que prefiero quitarme la vida a terminar con el culo en prisión. Ignoro si la solución pasa por tomar algún tipo de medicamentos, bromuro o alguna sustancia similar.
El problema es que me he dado cuenta que ni siquiera me gustan las chicas de mi edad. Es conocer a una tía de "30y" y dejar de verla como un bocado apetecible. Demasiados vicios, demasiadas culpas, demasiados pecados que perdonar. Normalmente son buenas amantes, pero no consigo hacer que ese lazo se convierta en algo más fuerte. Sin embargo, es tratar con una chica de veintipocos años, lozana, alegre, orgullosa, y me lleno de vida como un pajarito en primavera. Son relaciones breves, pero joder, ¡qué relaciones! Un caudal inagotable de energía, mentiras, ficciones, excusas, falsos sentimientos, lágrimas fáciles, manchas de pintalabios, purpurina en las sábanas, comida basura, música pop, llamadas perdidas... las adoro. Sabiendo como sé que no saben amar, lo más parecido al amor que he sentido ha sido junto a ellas. Son actrices, protagonistas de su propia película, comparto plano con ellas unos instantes y, luego, al despedirse de mí, me levanto y aplaudo su actuación. Maravillosas... Y las otras, ancianas en su juventud, me miran poniendo cara de "Hey, ahí va un idiota que no sabe que están jugando con él". Jajajajaja, ignorantes, jamás me he sentido mejor que cambiando de pareja en un baile de máscaras.
¿Entonces? ¿Qué debo esperar del futuro? Ahora mismo encontrar una pareja estable de mi edad es lo más sencillo, pero actuar así sería traicionar a mis principios. ¿Y cuando deje de ser atractivo para ellas? ¿Habré de rendirme? ¿Será el momento de formar una familia y seguir con la mentira? Y, si uno no está seguro de ser capaz de todo eso, ¿qué debe hacer?
Mi duda es seria. No quiero que me malinterpretéis, deseo enamorarme y tener a alguien a mi lado, pero estoy casi convencido de que acabaré siendo protagonista de una farsa de dimensiones cósmicas. Recuerdo al Dr. Manhattan en Marte alucinando en colores por el milagro de la vida y no puedo más que reír pensando que quizá acabe teniendo un hijo sólo porque sí.
A veces os leo y veo que alguno tiene fantasías con viejunas de cuarenta años, y yo, que sólo me llevo una decena de años con ellas, sólo siento lástima al ver cómo se han transformado en algo tan alejado de lo que yo amo. Quiero curarme, quiero mirarme al espejo y darme cuenta de que yo también envejeceré, quiero fijarme en titis que hayan perdido mil y una batallas, comparsas de mi tristeza interior; quiero no sentir asco cuando mire las arrugas de su cuello -aviso: sólo me causan pavor las arrugas, el resto de defectos estéticos me la sudan- y no sentir miedo cuando piense en lo que me espera dentro de veinte años junto a ella.
Me gustaría que vosotros, los casados, vinierais aquí a confesar vuestro asco por vuestras otrora bellas esposas, que digáis cómo se os pone dura al mirar a vuestras sobrinas y sus compañeras de clase. Quiero saber que todos sentís lo mismo que yo y, sobre todo, quiero que ellas sepan la verdad.
Quiero una como esta:
Moisés, que se las sabía todas, sólo añadió: "Está bien. Pero considero justo que se me vaya avisando poco a poco del momento que ha de llegar. Quiero dejar todo atado y bien atado en mis tierras, con mis mujeres y mis hijos; saldar mis deudas y perseguir a mis deudores". El Ángel aceptó inclinando la cabeza.
Pasaron los años y el Ángel volvió a la tierra. Moisés, es el momento de partir, despídete de tu familia y de tu cuerpo impuro -señaló con autoridad-. Nada de eso -respondió Moises-, hicimos un pacto que no se ha cumplido, habéis faltado a vuestra palabra, ninguno de vuestro avisos ha llegado a mí. El Ángel, sonriendo, dijo: "Y qué crees que eran las canas en tu pelo, los dolores de tu espalda, la afonía de tu voz. Qué crees que significaban las calvas en tu cabeza, las arrugas de tu piel, lo pesado de tu aliento. Mil y un avisos hicimos llegar, ¿acaso tu acusada ceguera no te dejó verlos?"
Y así se cuenta que murió Moises, el más grande de los profetas judíos. Le tomaron el pelo un poco.
¿A qué viene toda esta mierda? No es que me vea mayor, sólo tengo 30 años, pero últimamente vengo preocupándome por lo que veo a mi alrededor. Digamos que veo a la gente envejecer, dejar de ser quienes eran y convertirse en otra cosa que, aunque diferente, a mí me parece peor. La verdad es que no sé a qué edad uno empieza a perder la fe en su cuerpo. Viendo a mi abuelo diría que es a partir de los 70 cuando todo va en caída libre, y es muy jodido ser consciente de todo eso si tu cabeza está al 100%, como es el caso. Está claro que la idea de ser un viejo verde es atractiva, pero necesito que los mayores de verdad, Mundele y cia, me digan si el deseo carnal disminuye a la misma velocidad a la que se deteriora tu cuerpo. No me imagino más que acosando jovencitas y creo que prefiero quitarme la vida a terminar con el culo en prisión. Ignoro si la solución pasa por tomar algún tipo de medicamentos, bromuro o alguna sustancia similar.
El problema es que me he dado cuenta que ni siquiera me gustan las chicas de mi edad. Es conocer a una tía de "30y" y dejar de verla como un bocado apetecible. Demasiados vicios, demasiadas culpas, demasiados pecados que perdonar. Normalmente son buenas amantes, pero no consigo hacer que ese lazo se convierta en algo más fuerte. Sin embargo, es tratar con una chica de veintipocos años, lozana, alegre, orgullosa, y me lleno de vida como un pajarito en primavera. Son relaciones breves, pero joder, ¡qué relaciones! Un caudal inagotable de energía, mentiras, ficciones, excusas, falsos sentimientos, lágrimas fáciles, manchas de pintalabios, purpurina en las sábanas, comida basura, música pop, llamadas perdidas... las adoro. Sabiendo como sé que no saben amar, lo más parecido al amor que he sentido ha sido junto a ellas. Son actrices, protagonistas de su propia película, comparto plano con ellas unos instantes y, luego, al despedirse de mí, me levanto y aplaudo su actuación. Maravillosas... Y las otras, ancianas en su juventud, me miran poniendo cara de "Hey, ahí va un idiota que no sabe que están jugando con él". Jajajajaja, ignorantes, jamás me he sentido mejor que cambiando de pareja en un baile de máscaras.
¿Entonces? ¿Qué debo esperar del futuro? Ahora mismo encontrar una pareja estable de mi edad es lo más sencillo, pero actuar así sería traicionar a mis principios. ¿Y cuando deje de ser atractivo para ellas? ¿Habré de rendirme? ¿Será el momento de formar una familia y seguir con la mentira? Y, si uno no está seguro de ser capaz de todo eso, ¿qué debe hacer?
Mi duda es seria. No quiero que me malinterpretéis, deseo enamorarme y tener a alguien a mi lado, pero estoy casi convencido de que acabaré siendo protagonista de una farsa de dimensiones cósmicas. Recuerdo al Dr. Manhattan en Marte alucinando en colores por el milagro de la vida y no puedo más que reír pensando que quizá acabe teniendo un hijo sólo porque sí.
A veces os leo y veo que alguno tiene fantasías con viejunas de cuarenta años, y yo, que sólo me llevo una decena de años con ellas, sólo siento lástima al ver cómo se han transformado en algo tan alejado de lo que yo amo. Quiero curarme, quiero mirarme al espejo y darme cuenta de que yo también envejeceré, quiero fijarme en titis que hayan perdido mil y una batallas, comparsas de mi tristeza interior; quiero no sentir asco cuando mire las arrugas de su cuello -aviso: sólo me causan pavor las arrugas, el resto de defectos estéticos me la sudan- y no sentir miedo cuando piense en lo que me espera dentro de veinte años junto a ella.
Me gustaría que vosotros, los casados, vinierais aquí a confesar vuestro asco por vuestras otrora bellas esposas, que digáis cómo se os pone dura al mirar a vuestras sobrinas y sus compañeras de clase. Quiero saber que todos sentís lo mismo que yo y, sobre todo, quiero que ellas sepan la verdad.
Quiero una como esta:
