Gunnr30
Forero del todo a cien
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- 28 Abr 2010
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Se acabó lo de invertir horas y horas, aguantar conversaciones que no me interesan una puta mierda y “travestir” mi verdadera forma de ser para ganarme el derecho de meterle la polla a una tía.
Tiro la toalla, me paso al bloque duro del foro.
Elmer, Stravroguin, Nueces, Lord Nelson, Saca-al-tarado… teníais razón. Lo reconozco. Quise pensar que estabais equivocados, que vuestro planteamiento era el erróneo y tal, pero el errado era yo.
Sé que salirse del molde te condena al ostracismo y a ser un tipo sospechoso de toda clase de cosas negativas a ojos de los demás, pero como decía Krishnamurti “no es saludable estar bien adaptado en una sociedad profundamente enferma”.
Miro a mis amigos y voy preparando los estantes en mi particular “museo de cera” Stavroguin style. Todos resignados (y así lo expresan cuanto ellas no están delante) a tragar carros y carretas a cambio de, la verdad, no sé exactamente qué.
Solo hay un problema y es que no soy putero, así que habrá que subsistir con las asépticas pajas y de vez en cuando follar a alguna incauta o desecho que no de demasiado por culo. Hasta los tréboles de 4 hojas existen.
Como el hamijo Sir Ano dijo una vez, estoy harto del puto juego.
Las muy hijas de puta han conseguido convertir las relaciones en un auténtico campo de batalla emocional aderezado de minas en forma de tragedias y numeritos.
No compensa. No me compensa. Ya no.
Y yo solo aspiraba a encontrar a una tía que no diera tocara demasiado los huevos, equilibrada mentalmente y con un físico medio, ¿soy un iluso? ¿es tanto pedir?
Sé que pensareis que digo como esto porque estoy recién follado y que cuando los huevos vuelvan a apretar desfalleceré, y no digo que no pueda pasar, pero esta vez voy a intentar de verdad que las hormonas no me alienen el buen juicio.
Hoy he dado el primer paso, dejar a mi follamiga que ya estaba con neuras raras tipo "pasas de mi", "no se que soy para ti", etc.
Joder, en lo que se ha convertido ser un hombre hoy en día, siempre mendigando encubiertamente un poco de sexo y casi pidiendo perdón por tener deseos y necesidades.
Camaradas, nos vemos en las trincheras.
Tiro la toalla, me paso al bloque duro del foro.
Elmer, Stravroguin, Nueces, Lord Nelson, Saca-al-tarado… teníais razón. Lo reconozco. Quise pensar que estabais equivocados, que vuestro planteamiento era el erróneo y tal, pero el errado era yo.
Sé que salirse del molde te condena al ostracismo y a ser un tipo sospechoso de toda clase de cosas negativas a ojos de los demás, pero como decía Krishnamurti “no es saludable estar bien adaptado en una sociedad profundamente enferma”.
Miro a mis amigos y voy preparando los estantes en mi particular “museo de cera” Stavroguin style. Todos resignados (y así lo expresan cuanto ellas no están delante) a tragar carros y carretas a cambio de, la verdad, no sé exactamente qué.
Solo hay un problema y es que no soy putero, así que habrá que subsistir con las asépticas pajas y de vez en cuando follar a alguna incauta o desecho que no de demasiado por culo. Hasta los tréboles de 4 hojas existen.
Como el hamijo Sir Ano dijo una vez, estoy harto del puto juego.
Las muy hijas de puta han conseguido convertir las relaciones en un auténtico campo de batalla emocional aderezado de minas en forma de tragedias y numeritos.
No compensa. No me compensa. Ya no.
Y yo solo aspiraba a encontrar a una tía que no diera tocara demasiado los huevos, equilibrada mentalmente y con un físico medio, ¿soy un iluso? ¿es tanto pedir?
Sé que pensareis que digo como esto porque estoy recién follado y que cuando los huevos vuelvan a apretar desfalleceré, y no digo que no pueda pasar, pero esta vez voy a intentar de verdad que las hormonas no me alienen el buen juicio.
Hoy he dado el primer paso, dejar a mi follamiga que ya estaba con neuras raras tipo "pasas de mi", "no se que soy para ti", etc.
Joder, en lo que se ha convertido ser un hombre hoy en día, siempre mendigando encubiertamente un poco de sexo y casi pidiendo perdón por tener deseos y necesidades.
Camaradas, nos vemos en las trincheras.