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Me llamó la atención ver en esa lista una película que yo nunca había vuelto a ver mencionada por nadie, en ninguna circunstancia, durante los últimos 20 años: Velvet goldmine.
La que llevo años queriendo ver y que al final siempre me da pereza, es la de Spinal Tap, por las risas.
Una que NO recomiendo es "Miles ahead" interpretada por Don Cheadle en el papel de Miles Davis, un ejercicio masturbatorio de Don, que es guionista y director a la vez. Lo peor es que habiendo miles de documentos e historias interesantes en torno a la vida de Miles, decide inventarlo prácticamente todo, dejando una imagen lamentable del músico y sus motivaciones. Fracaso estrepitoso.
Vista la de Amy, está en el youtube.
El momento más deprimente es casi al final. Cuando los no-fans ya hemos empatizado un poco con la muchacha, se recuerda muy sutilmente comose reíannos reíamos todos de ella, y a continuación se ven unas imágenes en su apartamento donde parece un despojo esquelético drogadicto.
Tendemos a pensar que las adicciones que tienen la gente con dinero y fama son menos adicciones, cuando en realidad el sufrimiento es el mismo que el del tipo que vive debajo de un puente.
al contrario que el tío que vive debajo de un puente, estos tienen todas las oportunidades y pasta del mundo para salir del agujero en caso de que se metan.
El rico y famoso nunca va a llegar a esa situación en la que tenga que atracar una farmacia y una autoridad policial o judicial le obligue a rehabilitarse.
Están en una jaula de cristal donde realmente lo importante es quien tenga a su alrededor y su capacidad de influenciarles de manera positiva.
En el caso de Amy, prensa todo el día en la puerta, un marido drogadicto en la cárcel, y un padre más pendiente de giras y contratos.
Con lo que en estos casos extremos, igual que en el de Michael Jackson, lo que el dinero y la fama consigue es que encuentres un doctor que te pase lo que le pidas o que te sigan vendiendo heroína cuando no puedes ni sostenerte de pie.
Pero bueno, que es solo una reflexión mientras veía el documental, cada caso es muy distinto obviamente.
Hay decenas de muertes de músicos por drogas y alcohol, pero me cuesta recordar ejemplos concretos en los que en plena actuación diesen el cante.
Creo que Adele ha actuado una sola vez en Glastonbury y para de contar.
el padre sabía lo que había y aún así seguía negociando actuaciones por un millón de libras cada una.
Que esa es otra, ya hay que ser avaricioso para arrastrarla por todos los festivales del planeta, cuando seguramente no había necesidad.
Y no sé ustedes, pero a mí "Granujas a todo ritmo" me parece sensacional, y eso que no soy mucho de Aykroyd. Lograron juntar un elenco de estrellas glorioso, y me encantan sus persecuciones EXCESIVAS y alocadas.
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