Pensando con la polla

  • Iniciador del tema Iniciador del tema lemikox
  • Fecha de inicio Fecha de inicio

lemikox

RangoFreak
Registro
25 Ago 2009
Mensajes
8.325
Reacciones
224
Follar, follar y follar más. El objetivo y punto neurálgico de este relato.

Ubicación: Ushuaia, literalmente; el fin del mundo.

Un ser con problemas de apoplejía me acompaña durante todo este/nuestro viaje. Yo, una persona sana, de 1`80, ojos verdes, 75 kilos y 11 cms de gran RABO dispuesto a edulcorar la vida de todas las pequeñas niñas argentinas, mejicanas, yanquis, suizas y terneras (me han dicho y he comprobado que la carne argentina está muy rica) que encontrase.

El trayecto del bus han sido 17 putas horas de viaje desde El Calafate. No hay problema, todos los momentos de mi vida están enfocados y dirigidos a lo mismo: FOLLAR. Allí donde los demás ven desesperación yo vislumbro oportunidades de meter el cilindro cual percutor.

Así pues, ya dentro del bus hice un repaso táctico de la situación. Yo soy un tío serio, con clase y por eso no me monto en cualquier mierdecilla, así que después de engañar a mi fiel servidor para que me/nos pagase el viaje en un coche-cama (mi compañía cuesta dinero, que no soy ningún pepero en paro, señores) hice el primer vuelo rasante, cual ave fénix… ¿o es cual águila imperial? Bueno, da igual, que me desvío. La maquinaria ya estaba en marcha. Ustedes pensarán que lo que hago es visualizar coños (al estilo terminator) pero no, mi técnica es mucho más REFINADA y difícil de ejecutar pero gracias a todos mis años como dependiente en una bollería de trasgos y el hecho de haber residido en un internado (atento a cualquier cambio sutil de olor en el ambiente para poder salir airoso de las putadas de mis compañeros) me otorga un gran poder, y he podido desarrollar mi olfato a escalas CAOTICO-CUANTICAS.

Lo dicho, dentro del coche-cama cerré los ojos y empecé a olfatear, cada olor es único pero repetido, me explicaré: los olores van asociados a momentos de mi vida, así si huelo a pequeñas dosis de Brumel con restos de sudor automáticamente sé que hay personas mayores por mis alrededores. Todo eso me recuerda a mis años de pubertad entrando a la sala del cura para recibir su palabra y su doctrina. Esto viene acompañado de una imagen mental, siempre.

Bueno, empiezo a olisquear cual San Bernardo buscando supervivientes después de una avalancha; huelo a cuero (imagen mental: vendedores ambulantes) a pegamento y metal (imagen mental: a mi madre y el desatascador de tuberías) a cartones viejos sudaos con requesón(imagen mental: acampada año 2002-2003, sin ducharse y matándose a pajas parte de la dotación establecida en esa tienda) a mierda (imagen mental: autocagada en el cubo de basura de la casa de otro esclavo-amigo) y por fin huelo a COÑO (aquí, la imagen mental la dejo al libre albedrío de ustedes, no quisiera joderles esa visualización relatándoles mi recuerdo) mezclado con orina mal limpiada, dulce elixir.

Subo hacia el segundo piso del bus, no sin antes darme una hostia contra el techo por no abrir los ojos. Como ya he dicho, sólo tengo un objetivo en esta vida y lo demás es secundario. Demasiada concentración en un mismo punto; mi RABO.

Allí, en el segundo piso, me encuentro un percal no esperado: a un machupichu le empiezan a entrar convulsiones y se tira en mitad del pasillo dando patadas y bailando el robocop. Mi fiel escudero, buena persona que es, se tira velozmente a ayudar a este ser con tan mala suerte (ya dije que tenía una gran falta de coordinación) que se tropieza con el reposabrazos del asiento y acaba incrustando su cara contra el cristal de enfrente mientras pisa las pelotas al hombre-simio que seguía convulsionándose. Yo, preocupado por el estado de mi amigo-HUCHA me encuentro en una situación desesperante, decidirme por uno de los dos, y lo hago: pego un grito, diciendo “¡No sus preocupéis que tengo el cursillo de primeros auxilios!”. Observo como mi acompañante se quita las manos de la cara y me mira con cara de”¿pero qué coño dice este colgao?”, ahí me percato de que él no estaba sangrando, sólo había sido el golpe contra el cristal.

“¡Dejadme paso, apartarse, que necesita aire! Tú, tráeme una botella de agua; usted, deme su almohada; y tu put… er…señor de color, cójale de los pies!”. Bueno, bonita situación, yo no tengo hecho el puto curso ni nada, pero como ya he dicho sólo tengo un objetivo en mente: FOLLAR. Me imaginé dando la vuelta al bus, como los toreros, y aclamado por la multitud, después de salvar la vida de aquel sudaca. Todas las personas del bus me considerarían un héroe, aunque a mí me importase una mierda. Yo sólo quería que la niña de unos 16 años o así estuviera chorreando por mí.

Este momento está algo confuso en mi memoria,porque recuerdo estar sujetando (intentándolo) al tipo mientras bebía de la botella de agua que me habían traído y colocaba la almohada debajo de mis rodillas para no lastimarme. El negro seguía con las piernas del gaucho, las tenía en sus manos y hacía un movimiento eléctrico al intentar parar las acometidas del epiléptico. Miré hacia arriba y vi un montón de ojos clavados en mí, pensé “cagonlaostia, ¿y ahora qué hago?” me sorprendí buscando en mis bolsillos y me acordé de la fiesta del día anterior, donde unas americanas me habían dado unas pastillas para disfrutar más de la noche. A mí no me gustan las drogas, esas cosas son para FRACASADOS pero acepté las pastillas y se me olvidó tirarlas después de haberme cepillado a la yonqui, así que metí mi mano en el bolsillo y saqué una de las pastillas, la miré. También dirigí mi mirada a mi fiel escudero y pude ver horror en sus ojos. A mí me la soplaba, yo sólo quería percutir en chocho mojado. Así que le espeté un hostia con el envés de mi mano al epiléptico pero el tío no paraba de hacer cosas extrañas con la boca y tampoco era plan de liarme a golpes con un ser inferior. Cambié de táctica y cual Kobe Bryant le tiré la pastilla a la boca, cualquiera mete ahí los dedos con el minihombre haciendo aspavientos y mordisqueándose la boca, acto seguido el muy hijoputa empezó a echar espuma por la boca y moverse con mas frenesí aún si cabe. “Tranquilos, esto es un efecto secundario” dije yo a la gente agolpada alrededor. La verdad, no tenía ni puta idea de lo que hacía pero la teen estaba chorreando por mí. El hombrecito estuvo como medio minuto más moviéndose a lo Sammy Davis para al final, pararse durante un segundo aproximadamente, se quedó inmóvil, inerte. Tiempo suficiente para que me acojonase cual maricón entre una reunión de hijos de la raza aria. “¡Cagondios! ¿¡A qué me lo he cargao!?” pensé. Pero no, el pequeño machupichu se deshizo del negro 4puertas y se incorporó de un salto. Pegó un grito, debía de ser un grito de guerra de sus ancestros o de su tribu porque nadie le entendió, y se fue corriendo para salir del autobús (yo creo que empezaron a hacerle efecto las pastillas pero como no soy drogaino no lo sé), el individuo se pegó tal hostión al salir y caerse al suelo que al final le llevaron en ambulancia al hospital más cercano(así que supongo que acabaría yendo a Buenos Aires porque allí todo es cuartomundista), no por el ataque epiléptico en sí, sino por la rotura de cadera o de fémur o lo que fuera que tenía después de aquel trompazo. El muy joputa aún seguía haciendo movimientos de mandíbula y continuaba repitiendo frases sin sentido cuando se lo llevaron. “Puto yonki” pensé.

Yo ya era un icono, un HÉROE para esa ninfa y para el resto. Después de recibir los vítores y aplausos del respetable salimos, hora y media más tarde de la hora prevista. Necesitaba un poco de descanso para bajar ese subidón de adrenalina antes de atacar a aquel conejo babeante, y por eso me fui a sentar al lado de mi compadre que me miraba de forma rara, como desautorizando lo que había hecho. No le di más importancia, ya que me la suda todo lo que no sea PERCUTIR. Él, al final, me iba a echar un sermón cuando fui a coger el IPHONE para pasar de su charla y en vez de sacar el aparato saque una cartera, la cartera del machupichu; mecagondios! No sé como coño llegó a mi bolsillo, los dos nos quedamos mirando la cartera hasta que él chilló “la madre que te par…” ahí le tapé la boca para que se estuviera callado, que la íbamos a liar, bueno, me iba a joder el rollo con la teen.

Ahí anduvimos discutiendo del tema, que si devuelve la cartera, que si un cojón que no la devuelvo, que van a pensar que soy un ladrón que si esto que si lo otro (que me quedo sin follar, coñe!). Cuando le hice entrar en razón, tampoco fue muy difícil gracias a mi gran poder de convicción, ya eran las 12 o así de la noche; la gran parte del bus estaba durmiendo o intentándolo. Yo ya estaba más calmado y focalicé mi objetivo: la ninfa argentina.

Bajé al primer piso y allí estaba ella, acababa de salir del baño.

Aquí debo de hacer un inciso y decir que en los colectivos (buses) argentinos el baño está al final del bus y los coches-cama (buses) son de tres asiento por fila, dos a la izquierda y uno a la derecha. Ella se sentaba en el de dos, en la parte del pasillo y a su izquierda había un señor calvo con bigote (era su padre como más adelante malamente descubrí), en el otro asiento no había nadie.

Vuelvo al tema. Ella al salir del baño me miró, yo clavé mis ojos en sus pechos, llevaba una camiseta suelta, como de pijama. Pude advertir como se endurecían debajo de esa blusa ya que cada vez me miraban con más fuerza. Ella se quedó de pie un segundo más de lo previsto y yo pasé por su lado rozándole con mi rabo ERECTO todo su trasero, acto seguido entré en el baño. Ella había defecado y me encontré con todo el pastel; me dieron ganas de coger una cuchara y empezar con el postre pero luego pensé que mi boca estaría en su coño o en su boca y que no le gustaría saber qué es lo que ella expulsa por ese orificio que también tenía pensado horadar. Me hice una paja. Otra. Cayó una tercera y salí del baño dispuesto a atacar a esa hembra pampeña. Salgo y la encuentro sobando con el asiento casi convertido en cama, su padre roncando no era problema para mi gran ingenio y mis sutiles movimientos.

A ella le colgaba la típica baba de la gente que duerme muy a gustito, debajo de la manta intuía que se estaba tocando, así que me dije “si a esta zorrita ya la tengo en el bote, voy a ir a saco” en ese momento me saque la polla y se la empecé a pasar por el brazo, por el cuello, entre el pelo y la fui acercando a su cara, a su boca hasta que con leves movimiento fui introduciéndola. Ella, en efecto, tenía sueños húmedos porque chupaba de mi rabo mejor que Jenna Marie Massoli. Yo la estaba gozando de tal manera que empecé a emitir pequeños sonidos de aprobación y mi mano se introdujo debajo de su manta, en ese momento ella se despertó (si es que no estaba ya despierta la muy zorra) y me cogió el rabo mientras seguía chupando. Yo le metí mis dedos en su coño y luego me los llevé a la boca, y de allí al coño otra vez. Que olor, que imagen en mi mente (esta imagen la guardo para mí, que es personal). Yo ya estaba introduciendo mi segundo dedo en su agujero húmedo cuando un frenazo del conductor me desequilibró. Saqué mi rabo de su boca, con el consiguiente quejido por mi parte, ahora sólo tenía un anclaje; el dedo dentro de coño. Pero no fue suficiente, demasiado chorreante estaba y no me pude sujetar, así que caí al suelo mientras decía “cagonla…”. Me levanté raudo y veloz cual gacela en celo sólo pensando en seguir con la pequeña ninfómana… pero, oh! Amigos, sorpresa. Su padre estaba despierto, el frenazo del puto chofer le había despertado y me miró a la cara, luego a la polla, en ese momento hubo una lucha de poder a poder. Los dos se miraban fijamente, mi rabo y él, y él a mi rabo. Mi gran polla achantó al viejo, y éste miró a su hija, menuda cara de guarra insatisfecha que tenía, la muy zorra podía haber disimulado un poco pero no, la niña tenía que hacer de mujer, de mujer y de puta (bueno, puta no que no le pagué) y dijo algo como “ mira papa, ese…” no oí más. El viejo calvo bigotudo se tiró hacia mí con un grito de guerra similar al emitido por el yonky epiléptico. A mí me dio tiempo a meterme la polla en el pantalón y medio subirme la cremallera, después recuerdo estar en el suelo mientras el gañan me PERCUTIA las costillas, lo último que recuerdo es a la gente decir “para, para, no pegués al chico, dejálo” mientras mi amiguete bajaba las escaleras asustado por los ruidos y caía de bruces encima de mí… puto apopléjico.
 
Encuentro sus aventuras fascinantes y me gustaría subscribirme a su blog y ser su hamijo en el feisbuk :roll:


PD: De su verosímil y real como la vida misma relato solo encuentro un detalle discordante, el llamar machupichu a lo que siendo Argentina debería ser un guachipán o guacamayo.

P2: No hace falta que presuma de rabo, ya tenemos bastante con no ser Roccos Sifredis para que hustec nos restriegue el poseer semejante cañón. :oops:
 
no es el sitio adecuado

Mikolex rebuznó:
Follar, follar y follar más. El objetivo y punto neurálgico de este relato.

Ubicación: Ushuaia, literalmente; el fin del mundo.
Increíble.¿Y has sido capaz de irte a esa mierda de sitio para hincharte de follar?.Yo creo que un tío inteligente se va a otros sitios...
 
Si te vas al extranjero hay mejores sitios para follar, curiosamente sitios en los que no ha estado ni Jesucristo.

Y haces menos el monguis.

Un sitio que os recomiendo son las Malvinas.

Son como las británicas pero más agresivas.

No están acostumbrados a ver gente extraña porque allá no va ni su padre, cuando ven a alguien "raro" se lanzan por él.

También os recomiendo Santa Elena y Tristán de Acuña.

Parecido, vamos.

Ah, no fui a esos sitios para follar, eso fue un daño colateral.

¡CON LA ILUSION QUE ME HACIA CASARME DE BLANCO!
 
Que puto asco me da la gente que mete parrafadas de su blog personal al ver que tiene sólo cinco visitas y cree que ha escrito un artículo al más puro Perez Reverte Style

sucnor
 
Si lo dices por el autor del hilo no creo que tenga mayor pretensión que la sorna y el cachondeo. Aunque en un subforo donde el sentido del humor brilla por su ausencia cueste encontrarle el sentido.

Por cierto Mikolex, cuenta el resto de la historia porque al menos en la primera parte no has follado.
 
pulgapedorra rebuznó:
También os recomiendo Santa Elena y Tristán de Acuña.

Siento fascinación sobre pequeñas islas en medio de la nada, especialmente si son de mayoría blanca. ¿Ha estado usted en la isla de Santa Elena? Cuente más sobre sus mujeres...
 
Siento fascinación sobre pequeñas islas en medio de la nada, especialmente si son de mayoría blanca. ¿Ha estado usted en la isla de Santa Elena? Cuente más sobre sus mujeres...

Santa Elena no es de mayoría blanca, es una olla podrida en la que te puedes encontrar de todo.

La población es muy beata y religiosa, va a misa todo cristo, aparentemente se tratan de gentes muy puritanas y costumbres sobrias.

Pero es sólo apariencia: beben alcohol (en casa) de manera descomunal y las vecinas te piden cada dos por tres que les vayas a arreglar un enchufe que no está roto.
 
cachondo mental rebuznó:
Increíble.¿Y has sido capaz de irte a esa mierda de sitio para hincharte de follar?.Yo creo que un tío inteligente se va a otros sitios...


A Brasil, ¿no? :lol:
 
Yo creía que de doce centímetros para abajo las mujeres te retiraban la palabra :lol:



:0)
 
Yo creía que de doce centímetros para abajo las mujeres te retiraban la palabra :lol:



:0)

Estás en un error. Te retiran la palabra de doce centimetros en adelante.

Hasta los doce centimetros pueden seguir hablandote aunque la tengan metida toda en la boca. Incluso por teléfono.
 
Game: Fucking in the Patagonia

Players: Ushuaia versus Mikolex

Ushuaia wins… for the time being.



Lo siguiente que recuerdo es estar bajando del bus en Ushuaia con un pequeño dolor de costillas y un sabor amargo en la boca pero bueno, da igual, yo soy un tipo fuerte; si me lo propongo puedo estar jugando al PRO unas 32 horas seguidas, tengo la resistencia de un condor.

En cuanto pisamos tierra nos asaltaron dos jamelgas de unos cuarentaipico de años, a una de ellas le faltaban unos 4 ó 5 piños y a la otra chica no la vi malformaciones aparentes (obviamente me imaginé metiendo mi RABAZO entre esa boca mientras la otra puerca se sentaba encima de mí gritando “poséeme macho! Que eres muy macho!”. He de decir que la palabra macho se utiliza para señalar la virilidad del hombre). Yo pensé que las dos pilinguis nos iban a soltar:

100 pesos media hora

180 una hora

200 las dos media hora

50 te la chupo yo (la sindientes)

100 te la chupa ella y tu amigo mira. (lo típico que se dice en las películas, ya que igual que con las drogas, yo creo que las putas son para FRACASADOS y por eso no he ido nunca pero como estábamos en un país extranjero se podía hacer una excepción)

Yo soy todo un conquistador así que no me parecía extraño que esas dos humildes prostitutas nos hubieran entrado de esta manera. Ya les estaba diciendo si nos hacían un descuento por ser machos ibéricos cuando una de ellas me espetó “la oferta es igual para todos, argentinos o extranjeros: 50 pesos por persona en habitación de cuatro”

¿Comooorrr?? ¿ORGÍAAAA????? Estaba flipando, era llegar a esa tierra toda nevada y proponernos una orgía por 50 pesos, que al cambio son unos 10 euros. Miro al colega y le digo “¡vamos, vamos ya, de fijo ,corre!

Cogemos nuestras mochilas, las cuarentonas nos señalan un coche y nos dicen “montaros en él, que está Alberto que nos lleva hasta allí”. “Buenooooo, con chofer! Esto es la hostia” pensé. El colega me golpeó las costillas con el codo (lo típico entre amiguetes que se saben triunfadores) y yo ipso facto proferí un quejido lastimoso (todavía tenía reciente mi pelea con el viejo, que como ya comenté casi la gano) y la sindientes (puta nº1=la sindientes, puta nº2= la petable) se acercó ágilmente para interesarse por mi situación. Yo, por supuesto, mentí. Le dije que había tenido una pelea por defender a dos teens de unos delincuentes allá en Buenos Aires, en el barrio del Boca.

Ella cogió su mano y la acercó a mi pecho diciendo “pobrecito, que valiente eres” mientras bajaba hasta llegar a mis costillas. Mi miniyo empezó a despertarse y cuando nos sentamos en el coche ya estaba erecto cual pértiga buckiana, ni la actual imagen de Semenyeva podría tirar aquel mástil abajo.

Yo, astutamente, me senté detrás para poder estar con las dos pilinguis (quería rozarme, y quería hacerlo ya) pero una de ellas (la petable) dijo “ yo me quedo que voy a esperar al siguiente autobús”. Pensé “Cagonto! Ya nos la quieren meter doblada, y aquí el único que mete soy yo!!”. La sindientes comentó que no había problema, que allí estaban todos. Obviamente me entró el canguelo “¿todos?, pero…¿cuánta gente hay?” .“ah! Pues seremos unos 15 o así” me contestó. “¿Qué??? ¿15? ¿Y cuántas tías?”. Ella se rio y me dijo “joe guapo, no pierdes ni un segundo, ¿no?”. Ya le iba a meter mi lengua por esos recovecos marfileños pero mi puto colega le dijo al conductor “joder, cuanta nieve, ¿y no usáis cadenas?”, el conductor dijo “para qué, si el trayecto es corto. Bajas esa cuesta y ya estamos”. Mi amiguete es una persona muy inteligente, tanto que no se le ocurrió otra cosa mejor que decir “ostia tú, pues tira del freno de mano!”. Según dijo eso, la sindientes se incorporó hacia delante y dijo “Alberto, ¡ni se te ocurra!”. Joder, puto conductor, parecía un puto dibujo animado, se le pusieron los ojos como platos y empezó a babear “¡ahora mismo, con lo que me encanta!”. Acto seguido estábamos en el otro carril intentando no golpear al Clio aparcado mientras un transeúnte estaba haciendo literalmente el ángel porque nos fuimos contra él. Yo estaba cagándome en todo, aquí estábamos para FOLLAR, no para hacer el tontopolla con el coche.


Después de comer algo de nieve y escuchar los autopiropos del conductor (puto subnormal, conducir en nieve sin cadenas es más peligroso que la madre de ElHombreQueViola en una convención de foreros) llegamos al puti. La verdad es que por fuera no tenía mucha pinta de puti, pero bueno, teniendo en cuenta que había caído la mayor nevada en los últimos 15 años todo, absolutamente todo era igual: blanco inmaculado.


Así pues entramos dentro y me encuentro a un par de maromos con una mulata tirados en el sofá y al fondo una mesa donde estaban cenando unas 10 personas. Todo era muy juvenil y muy cercano al cliente. Había una relación de 3/1 en contra de los tíos, ya me imaginaba teniendo que percutir con mi colega y un desconocido a la sindientes…bueno, da igual, el caso era FOLLAR.

Entre la salita y la cocina, en la mitad, había una pequeña recepción y la chica se fue hacia el recepcionista y otro compañero que andaban por ahí. Ella se quedó dándome la espalda. Craso error. Yo quería meterla ya, pasaba de memeces y chorradas, así que deje mis mochilas en un lateral y fui a por la pava. Mi colega me tocó el hombre y me dijo “oye Mikolez, creo que…”. Bah, me la soplaba, no le hice ni puto caso, yo sólo quería FOLLAR. Así que me acerqué a la sindientes y le puse mi paquete en su trasero mientras le decía al oído “¿a qué estás esperando? Más dura no la puedo tender ya”. Y mi mano voló entre su muslo hasta llegar a ese coño experimentado.

La tía se quedo inmóvil, petrificada (eso es normal porque como ya he comentado anteriormente soy todo un Casanova y conozco técnicas mil para poder ligar o poner calientes a las tías). Se hizo el silencio y después la sindientes se dio media vuelta y me solto un hostión en toda regla, menudo sopapo. Yo, entre la cara de flipado y de asustado no daba crédito. El pavo de la recepción se agacho un milisegundo y después apareció con un pala de quitar nieve “!!!¿pero qué os habéis pensado hijos de puta???!!!. Me giré y vi a mi colega en la puerta diciéndome “pero gilipollas!esto es un hostel, te lo he intendo decir antes, corre!!”.

Cogí las mochilas como pude mientras la otra zorra, una que no había visto y también debía de ser currela de allí, me propinaba patadas en el trasero y por ende, en las pelotas(ahí me alcanzaron dos, menos mal que soy un experto en el sexo tántrico y no tuve problemas para digerir ese par de golpes). Mi colega ya estaba en la calle mientras yo aún bajaba las escaleras y les escuchaba decir “como te pille te mato puto gallego” o “pero qué se ha creído…”.

Salimos de allí corriendo cuesta arriba unos 100 metros, hasta que dejamos de escuchar lamentos de esos putos sudacas.

¡Joder! Eran las 12 de la noche, 10 grados bajo cero y buscábamos alojamiento…


P.D. Rubén, he puesto el post en este foro porque lo que promulgo es el libre folleteo y el ligue constante e incesante (que ya llegará), si lo ves correcto y lo quieres trasladar a otro lo veré bien (y bueno, aunque no lo vea usted es admin y hará lo que quiera) pero creo que aquí está en el foro adecuado.
 
*(Estuve en Argentina viendo las cataratas, el cabo del fin del mundo, las ballenas, el Perito Moreno y demás lugares: fui de viaje. Otra cosa es que uno sea un macho cabrío y no deje pasar ni una oportunidad para poder follar)

Host: hosting

Bien,bien,bien. Al final encontramos un hostel que tenia billar, play3 y unos dardos (joder, cómo se salen estos argentinos). Mi colega se fue a dormir y yo me quedé jugando con otros dos al PRO, dándoles la paliza de su vida y ganándoles todos los partidos por una diferencia mayor a 20 goles (ya he comentado anteriormente lo CRACK que soy),¡qué se jodan! Solamente me hubiera faltado darles por el orto para que sufrieran el poder español.

Una vez terminada mi demostración de superioridad me dispuse a ir a la cama, yo solo. Otro día tirado a la basura, sin follar.

A la mañana siguiente nos marchamos de ese hostel, ya que sólo tenían habitaciones dobles y por lo tanto, menos oportunidades de mojar.

Después de mucho buscar llegamos a ++++++++ (lo omitiré no vaya a ser que las 6 ó 7 mil personas que me leen en este foro quieran buscarme las cosquillas), eso sí que era un hostel. Dos chicas preciosas en la recepción nos estaban esperando, mi colega fue a preguntar para reservar una habitación pero yo, más rápido y mucho más ijueputa, le hice un placaje al estilo “undertaker” (pero el viejo, el que salía del ataúd y acojonaba a Hulki, no el marica de ahora) y me coloqué delante de estas dos hembras para iniciar el pertinente ligoteo.

Pero… oh,oh. Qué hostia se pegó mi colega, pobre hombre-hucha. Las dos pelambruscas, soltando improperios contra mí, se fueron directamente hacia él. Yo, con cara de no haber roto un plato, miro a mi amiguete y le veo tronzado en el suelo en medio de unas sillas de madera. He de decir que tengo una fuerza sobrenatural, incontrolable (como ya quedó demostrado en el primer post cuando le di la paliza al calvo bigotudo) y claro, me sobrepasé. Miré a mi alrededor, y observé como un tío de ojos azules y de piel pálida me miraba con cara lasciva (joder! Recorrer 10.000 kmts para que te ponga ojitos un maromo).

“¡Joder! Tío, esta vez te has pasado” me dijo mi amiguete. Yo le pregunté “¿Estás bien?”, a lo que él me contestó “Sí, sólo ha sido toda la historia esta del tropezón y las sillas” y yo “¡Ah! Ok, pues entonces paga, puta llorica”. En ese momento las dos jacas me miraban con cara de asco-rabia en sus ojos pero yo soy un tío GRANDE, me he tenido que desenvolver en peores situaciones y sé, por experiencia, que ser un cabrón las pone cachondas. Cogimos una habitación de cuatro camas, durante la reserva no hablé con ellas porque sabía que sus contestaciones no iban a ser muy amables, era mejor esperar hasta la tarde.

Subimos a la habitación y nos encontramos al maromo de antes, el de la mirada lasciva, él se quitó el anorak y el gorro, y por arte de magia aparecieron dos ubres (absortó me quedé mirándolas) y una melena rubia platina que le llegaba hasta la cintura; él se había convertido en ella (fallo mío por no haberme dado cuenta de que eso era una tía).

Era suiza y sabía un poquito de español (una mierda) estaba allí por la temporada de esquí ( no problemo, yo le iba a esquiar todo lo que ella quisiera y más), estuve hablando con ella un poco y me comentó que iba a hacer la travesía del Perito Moreno (cosa que nosotros también queríamos hacer), así que bajé abajo para reservar el viaje para esa misma tarde y, de paso, meter fichas a alguna de las dos jacas petables de esta mañana (la suiza ya era mía pero yo soy un tío fuerte y potente, tengo el tipo de Asnar, puedo con varias) .

Estaba sólo una de ellas, le comenté lo del viaje, hablamos un poco de la nevada (al parecer no había caído una tan grande desde hacía 15 años), de los sitios de marcha de la ciudad y de las fiestas que se montaban en el hostel (observé que en la pizarra que tenían había ofertas 2x1 de diferentes bebidas). También le pregunté si hacía mucho que trabajaba aquí y que yo en Egpaña trabajo de recepcionista en un hotel (mentira, y de las gordas. Yo no tengo ni puta idea), que se meten muchas horas, que tratas con todo tipo de gente y varias chorradas más.

1ªregla del manual de Mikolex: empatizar con la presa.

La tía se empezó a soltar, me contó sus problemas con la gente, con su encargada y demás mierdas. Luego le comenté que por lo menos, cuando llega a casa le darán consuelo. Ella me dijo que nanai, que su gato era el único alivio. PERFECTO. No tenía a nadie (cosa que me importaba un pimiento pero quería saber si tenía que luchar contra un novio adorable, un gañan o nadie). Acto seguido hice la reserva, subí a la habitación y de allí nos fuimos para el puerto (muahaha, a la vuelta le iba a hincar el diente a la jamona argentina).

En la travesía estuvimos viendo leones marinos, cormoranes y diversos glaciares (Upsala y Perito, entre otros). Ahí comprobé como la Milka rubia buscaba mi rabo, si yo subía a la cabina ella venía detrás; si me iba afuera a fotografiar los leones ella hacía lo mismo. Hablamos un poco de todo, principalmente le enseñé lo típico, lo que toda buena mujer tiene que saber: “ Quiero hacerte una mamada. Sí, mi amo. Te preparo un filete y luego follamos” ¡Vamos! Las típicas ideas/frases que toda buena mujer debería de saber y tener siempre como axiomas.

Hacía un frío de la hostia, así que después de sacar varias fotos
nos metimos para la cabina (sobra decir que las conversaciones las teníamos en inglés), el colega se quedo fuera haciendo fotos. Ella y yo nos tomamos un chocolate, la Milka se quita el anorak y, otra vez, me quedo mirando fijamente a esas dos peazo de tetas, ella se percata y me mira a los ojos, la miro y la cojo de la mano “You know what I`m thinking”, ella sonríe. Me levanto y me voy al baño. Espero unos 20 segundos y aparece ella por el pasillo del baño, estamos delante del baño de tías. La beso y entre sobadas, besos y apretones nos vamos para uno de los baños, está sin pestillo, ella me dice que a otro; el siguiente ¾ partes de lo mismo pero cierro la puerta y apoyo uno de mis pies contra ella. Le meto la mano debajo de las tres capas de ropa que llevaba y le sobo aquellas dos proveedoras de leche futura. Ella me palpa la polla (erecta) y empieza a desabrocharme el pantalón.

La situación era un poco complicada, apoyando un pie contra la puerta, sin sitio (porque el wáter era pequeño de cojones) y estábamos a punto de atracar. A mí me la soplaba (otra vez) yo quería triunfar, quería sentirme un campeón, llevaba dos días sin FOLLAR.

Ella baja y empieza a chupar, se la mete tres veces en la boca y la aparto, yo lo que quiero es percutir. Le bajo los pantalones y las bragas de encaje (esta guarra se debió de cambiar después de haberla mirado a las tetas en la habitación) y… ¡HOSTIAS! Tenía un tatu la mar de chulo, era algo así como esto:

Me paré por un segundo a admirarlo pero rápidamente me dije “concentración,concentración” y le puse mirando contra la pared: pim pam pim pam, movimientos iguales que los vaivenes del barco. Así estamos un rato y claro, concentrado que estaba, no me percato de que hemos parado. Por supuesto que mi pie ya no está sujetando la puerta y como no, una puta azafata viene a revisar los baños, abre la puerta, y el canto de ésta se para en mitad de mi trasero, entre las dos nalgas (bonita visión que tuvo que tener). La tía profiere un grito, a mí me da tiempo a darme media vuelta y verla marcharse corriendo. Yo estaba pensando si seguir o no percutiendo a la Milka pero ésta me saca de dudas; me aparta, se sube los pantalones y se marcha corriendo con el anorak, guantes y demás ropa en las manos. Mientras, yo sólo consigo balbucear “ey, eee…. ¿qué?..ehhhh, espera!!!”. Pienso “¡Mierda! No he acabado”. Bueno, me subo el pantalón, me pongo la chupa (porque yo al polo sur voy con chupa, que ya he dicho que soy un tío fuerte y resistente) y me dirijo a la salida. Ni rastro de la suiza, debe de estar en el muelle. Voy a salir de la cabina y una mano me toca el hombre y me dice “¡Eh, tú! ¡Guarro!”. Me doy media vuelta pensando “eh,tu ,guarro? Pero quien será el trol…?”. Y ahí estaba la tía que me había metido la puerta por el culo. Pufff, que polvazo que tenía la muy hijadeputa.

Estaba ella con otra tía, sería la encargada o algo. Le dice “este es el tío del baño” y yo les digo “¿qué queréis?, ¿un autógrafo?”, creo que eso las cabreó aún más. Empezaron a decirme de todo y vino otro maromo, yo estaba de espaldas caminando hacia la puerta, quería salir de allí, esto empezaba a ponerse feo. El tío preguntó que qué pasaba. Pensé “joder, ¿y ahora qué? ¿Me pueden multar o algo?”. Me quedaban como dos metros hasta llegar a la puerta de la cabina, y de allí a la pasarela había 5 metros o así. Yo (persona inteligente donde los haya, con un C.I. cercano a los 75 puntos) ideé un plan.

Entre la puerta y la cabina había como una barra donde te servían el chocolate, café, pastas, etc., pues bien, mi idea a la par que sencilla era infalible: dar un hostión a la pasta y al café y tirárselo todo a la cara.

Todavía estaba pensando si tirarles el café o las pastas cuando me sorprendí a mi mismo; le había calzado dos hostias a todo lo que había encima de la barra (los zumos, cerveza, café, pastas, trozos de tarta) y ya estaba corriendo y cerrando la puerta detrás de mí. Pegué un salto y corrí por la pasarela, llegué al muelle y vi a mi colega al fondo. Seguí corriendo sin mirar atrás, cuando llegue a la altura de mi amiguete le di un golpe en el hombre y le dije “la he armao,¡ corre!”, él no me hizo ni puto caso, bueno, tampoco había hecho nada, así que hizo bien.

Llegué al hostel con la lengua fuera, bueno, me paré antes en un bar a tomar una Quilmes (cerveza argentina). Cuando llegué al hostel vi a una de las jacas de la primera vez, le pregunté por ***** (la otra jaca con la que hablé para hacer la reserva del barco) y me dijo que no tenía que venir hasta mañana, “cagonlaputa, están a turnos” pensé.

Bueno, yo tenía a la lechera suiza para percutir esta noche y le acaba de echar el ojo a una mexicana morena, bastante guapa. Esta noche tendría fiesta sí o sí…
 
¡Maldito bastardo pichiflautico!

No sabes echar un puto polvo en condiciones, siempre acabas con los pantalones bajados y sin rematar la faena. :oops::oops:

Para mí que tu estas buscando sexo del otro/orto, tanto dejar el culo al aire tiene un profundo significado freudiano que no alcanzo a desvelar.

Si acaso me voy a hacer unos porretes y unas pastillikis que seguro que resuelven el enigma y te podré diagnosticar, impotente simplón.
 
*[Debido a las múltiples peticiones (MP) recibidas por ustedes; yo, el puto AMO Mikolex, seguiré relatando mi
verosímil y real como la vida misma relato
a riesgo de baneo por ser cansino.]

Estoy en el bar del hostel, que curiosamente, está en la entrada a tres metros de la recepción. Era tarde, las nueve y media. Después de echar una ojeada y ver a la subespecie de mi alrededor (argentinos, austríacos, yankies y dos catalanes), mi finísimo olfato descubre a una hembra morena de pelo negro como el tizón y cuerpo de puta mal paría.

Entraba por la puerta acompañada de una hija de Uruk y su novio (el boyfriend del trol). Todos iban de muy buen rollo. Ellos se quedan de pie, cerca de mí, estaban haciendo las reservas cuando baja mi colega pegando gritos con un argentino (están discutiendo sobre Buñuel y su puta madre), me mira y me dice “ o nos largamos o le inflo a hostias”. Hago la buena obra del año: me marcho con mi colega.

Nos damos una vuelta por el pueblo todo nevado, nos tiramos bolas de nieve como auténticos gilipollas, es más, me da por coger una bola de unos 20 kilos y se la lanzo: me cae en el pie.

Vamos a un puf, todo grifos: MIERDA.
Nos tomamos un par y de vuelta al hostel, serían las once. Ni rastro de Buñuel. Allí nos encontramos con los mejicanos que andan bebiendo cervezas (Coronita, para variar), observo a la mexicunt (supongo que serán las dos birras que me he tomado pero la veo más maciza si cabe) cómo chupa del botellín, eso era una maravilla; por lo tanto, hoy tendrá ración doble o triple… ¿Quién sabe?


Las dos Quilmes empiezan a hacer su efecto y voy al baño, cuando vuelvo, encuentro a mi amiguete hablando con el mejicano: perfecto. Me siento al lado de Adalia (por semejante mujer, con nombre de Diosa, surcaría los mares) y comienza un diálogo:

- Hola, me llamo Mikolex, ¿tú?
- Adalia. ¿Eres español,no?
- Sí. Soy de ****** (a vosotros os lo voy a decir, panda maricas). Tú eres de Mejico.
- ¿Tanto se me nota?
- Bueno, algo sí, además, antes os he oído, estabais haciendo el check in.
- Ahhh, a ti no se te nota que seas español (y le da un trago a la cerveza. Yo hago de pagafantas y pido dos).
- Bueno, lo dirás por los ojos, ¿no?
- Sí, los tienes… eh, ¿azules…?
- Una mezcla, son verdes pero depende de la luz se ven de un color mas pálido o más fuerte. Tú tienes unos ojos muy bonitos, negros como el culo de mi amigo (esto se lo dije algo rápido, sería algo así: negros comoel luloi damigo).
- ¡¿Qué?!
- Que tienen un color abismal, hasta dan miedo.
- Jajajaja, ¿miedo?, ¿por qué?
- Porque (la miro fijamente pero con dulzura) con su simple mirada pueden llegar a enamorar (punto para Mikolex. Estas chorradas vuelven locas a las panchitas).

Ella me mira y se ruboriza, separa los labios que deslizan una suave sonrisa dejando escapar un sonido casi imperceptible de aprobación.

Oigo un berrido y me doy media vuelta: el puto Buñuel ha vuelto y se está cascando un agarrao con mi amigo-hucha. Estoy a punto de darme media vuelta y hacer como que no he visto nada pero Adelaida me suelta “¡¡páralo,páralo!!”. Ahora soy un hombre que busca la aprobación de su hembra. A la velocidad de la cagalera me dirijo hacia la multitud (camareros-currelas del hostel, el mejicano que hablaba con mi colega, algunos amigos del Buñuel) y empiezo a hacer el helicóptero con los brazos. Este momento está un poco borroso después de escupir a un colega de Buñuel y que otro hijodeputa me diera un botellazo en la cabeza POR DETRÁS (puto panchito, cuando deshonor hay en ese país).

Se calma la cosa un poco y los de Buñuel suben para las habitaciones, todo esto entre insultos e improperios, mi colega y yo nos acercamos a la barra a lamernos las heridas(suerte que tuve que la botella no se rompió) y los camareros-currelas nos dan un poco la chapa (con las típicas cosas de siempre, que sea la última vez, a la siguiente fuera, etcétera).

Adelia se preocupa por mí y me pregunta si estoy bien, yo le digo que sí, que me voy a la habitación a cambiarme (tenía manchada de sangre la camiseta, sería de algún Buñuelista). Mi colega se queda en el bar con los mejicanos bebiendo cervezas y riéndose a grito pelao.

Voy subiendo a la habitación mientras me palpo un chichoncillo (cómo dolía el jodio) que pronto será un chichonazo. Entro en la habitación y doy la luz. La Milka estaba durmiendo y se despierta. JODER.

Se me había olvidado por completo, además no sabía nada de ella después de lo del barco. La saludo y le digo “What have you been doing all this afternoon?”, ella me dice que salió corriendo porque le dio vergüenza y miedo, que no sabía qué hacer, vino al hostel , cenó y se metió en la cama. Le digo que OK, que lo entiendo, que es normal y me voy a la ducha (una pasada rápida, como las tías, sin mojarme el pelo). Salgo del baño. La suiza está despierta y mirándome. Sé lo que quiere y yo (forero medio de PL: servicial, seguro y salido; las 3 eses) se lo voy a dar.

La habitación consta de dos literas, ella duerme en una de las de abajo. Con la toalla alrededor de mi cintura me acerco a ella, la Milka se aparta un poco y me meto con ella en la cama. Sobeteo, besos y comida de polla por su parte. Me pongo encima: la penetro. Veo su cara de puta lasciva, me pone más cachondo. Empujo con fuerza, con más fuerza. Me apoyo de rodillas y la sigo percutiendo, estoy a punto de correrme y la golpeó brutalmente, ella gime. Me golpeo con el chichón en la litera de arriba, veo las estrellas, ¡joder! ¡Qué puto dolor!

Me corro mezclando el Ying y el Yang, a Pherseo con Filimbi, a un pelo de polla en un plato de sopa, en definitva: el gozo del orgasmo con el martirio del dolor. Casi me desmayo, desfallezco sobre sus pechos durante unos instantes. Ella me dice algo, yo no estoy para chorradas, el dolor del chichón es más largo que el placer del orgasmo. Me siento en la cama. No sé porqué pero me cago en su puta madre (lo pienso, no se lo digo). Me levanto y dudo si pegarme otra pasada para que Adila no huela a chocholate suizo pero finalmente decido que es mejor así: a lo natural trabajado.

Me visto, le digo cuatro chorradas y bajo al bar del hostel (la suiza queda en la cama feliz y durmiendo). Ahí veo a mi colega con el mejicano y su novia, los tres andan medio-doblaos. Ni rastro de mi mexicunt, me dirijo al baño y me la encuentro.

Ella sale y nos cruzamos. Nos miramos. Le digo “ey… espera” y la acerco a la barra (es bastante larga, tendrá unos 13 ó 15 metros), estamos en la otra esquina y empiezo con el acoso y derribo. Tengo el rabo caliente.

Uso la táctica de la apisonadora (tiro pa’lante y siempre avanzando), me arrimo, ella está sin salida (la barra a su izquierda, la pared de los baños a su derecha y yo por el centro)la cojo de la mano y le digo “eres preciosa”, ella mira hacia abajo. Con la otra mano le toco la barbilla y se la levanto, le espeto “vos sos relinda”, ella sonríe. Me acerco más (ella nota algo duro por encima de su ombligo…putos panchitos, ¡enanos de los cojones!) y le suelto “tenía ganas de estar así, cerca de ti”. Ella no aparta sus ojos de los míos. Me aproximo más, estoy a cinco centímetros de su cara y mirándola fijamente, con un suave movimiento me desvío de su mirada y me acerco a su oído, la susurro “tú aún no lo sabes pero hoy vamos a acabar en la cama”. Ella me besa empezando por el cuello y siguiendo por la oreja, entre besos y lametones anda el juego, me agarra fuerte del pelo (me parezco a Sandokan pero con la barba de una semana). Me cagonensuputamadre: el chichón. Le digo que tenga cuidado y ella me dice “oh, perdona” y me da besos en la cabeza, yo pienso “esta tía está loca, parece que el botellazo se lo ha llevado ella”. La aparto un poco y la beso, nos besamos. Mi mano va haciendo eses hasta llegar a su vientre, sigo bajando. La huelo, la respiro, la olfateo…

¡Joder! Qué bien olía la muy puta.

Ella se aparta y me dice “¡PARA!”. La miro y le pregunto “¿qué pasa?”, ella me dice que nada, se deshace de mi llave a lo boa-constrictor y se marcha con su hermana. Vuelve y me dice que se marchan a la habitación a dormir un poco (habían tenido un viaje muy largo y estaban cansados), que en dos horas se levantan y salen de fiesta con nosotros. Me besa. El mejicano se queda y dice “no mames wey, una no más y descanso un ratito, que luego volvemos” (esto lo dice cantando, con ese típico acento mejicano).

Yo, junto a mi colega, me quedo en la barra; una, dos, tres, cuatro, cinco, así hasta 12 birras. Cierran el bar del hostel y mi ninfa no baja. Mi colega anda doblado en un sofá y yo debería de ir igual pero ese aroma que queda en mi pituitaria me hace aferrarme a Adela. Me levanto y voy hasta su habitación. El mejicano iba tan mamao que se había dejado la puerta abierta. Entro y los veo, ¡joder, qué si los veo! Mi dulce mejicana y el novio de su hermana juntos, en la misma cama y ella, desnunda totalmente. No vi más. Pegué una patada a la cama y me cagué en todos sus muertos. Mi corazón estaba roto.

Eso me pasaba por fiarme de las tías… TODAS PUTAS.
 
es lo que tiene pensar con la polla, que se folla poco o nada. Todo el mundo sabe que para follar hay que pensar principalmente con la cabeza.

Eso sí, para defecar los finstros de tronchos sobre este magno foro, he de reconocer que pensar con la polla es imprescindible...

Siga así, me encanta.
 
Rezo intensamente para que salga con bien de sus aventuras y por encima de todo deje el pabellón patrio y la hombría hispana en las alturas que les corresponden , por encima de los inertes cuerpos de frijolitos, panchitos, guacamayos y sudaquitos en general.

Quiero pensar que en la continuación de su relato no emprenderá la huida como una nena llorosa sino que se vengará del traidor zampatortillas y la puticana Adelita de alguna de las LOLaicas formas siguientes


  • Vomitando las 20 cervezas sobre ellos
  • Defecando en su pecho desnudo
  • Enviolandola mientras duerme y correrse en el jeto del novio
  • Robarlas los sugus, pastillas de colores y dinero de las vacaciones
  • Alguna otra cosa que su mente enferma discurra

Dígame que no ha ido hustec al fin del mundo a hacer el ridículo y a que se rían de España y los españoles.

¡ Dígamelo !
 
Arriba Pie