Prestar dinero, ese concepto

Darkiano

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16 Jun 2013
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Le acabo de prestar 100 euracos a un compañero de trabajo.

Por mi experiencia, dudo que me los devuelva, ya os contaré.

He prestado dinero a unas diez personas en todas mi vida, casi todas más por conveniencia que por gusto.

Nunca me han devuelto el dinero ninguno de ellos, cosa que ya sabía que ocurriría.

El dinero tiene una cosa que lo diferencia de un objeto, y el que el billete fisico prestado lo gasta, y cuando consigue otro billete, no es el mismo, lo considera suyo, no del que le ha prestado dinero.

Por qué prestar dinero?

En mi caso porque lo considero un gasto conveniente. En mi empresa con este ya van dos a los que he prestado pasta.

Este compañero en concreto es el más antiguo de la empresa, amigo íntimo del dueño... Veis por dónde voy?

Ahora toca cobrarse esos diez euros... Me acaba de ayudar a cambiar una rueda y cargar mi camión. Va a pedirle al jefe que me dé una serie de materiales consumibles que tienen pie el taller que de otro modo no habría pillado, le habla bien de mi al jefe, etc.

Es todo una serie de intereses laborales, que son los que hay que cuidar.

Por supuesto podría haberle dicho que no, y no habría sufrido muchas consecuencias negativas a priori, pero seguramente sí a largo plazo.

Vosotros habéis prestado dinero?

Motivo? Os lo han devuelto?
 
Lo que tu has hecho no es in préstamo sino una inversión

Exacto, su relación con el jefe hace que esos 100 euros puedan ser una útil arma de propaganda.
Yo jamás he prestado, siempre he reglado, es decir: a mi me venía un familiar pidiendo algo (no más de 100 euros) diciendo que era un préstamo y se lo daba aún sabiendo que no lo era y que no me iba a enfadar con un familiar porque no me lo devolviese, a los familiares que me caen mal ni les he dado pie a que me pidiesen moneys, así que heil hitler y hilo rulando.
 
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Gente que acaba de descubrir el beneficio más allá de lo crematístico. Impresionante.
 
Considero de muy mal gusto andar marraneando relaciones humanas con flujos monetarios. Creo que es algo a evitar siempre que sea posible. Rarísima vez he pedido o me han pedido dinero, y desde luego siempre, desde cualquier extremo del asunto he quedado a la par con la otra parte.
 
Considero de muy mal gusto andar marraneando relaciones humanas con flujos monetarios. Creo que es algo a evitar siempre que sea posible. Rarísima vez he pedido o me han pedido dinero, y desde luego siempre, desde cualquier extremo del asunto he quedado a la par con la otra parte.

Siento ser quien te lo diga, pero el altruismo no existe. Por eso fracasan todos los socialismos, cayendo uno por uno con una exactitud casi suiza.
 
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¿Y ESO QUÉ COJONES TIENE QUE VER CON LO QUE YO HE ESCRITO?????
YO ES QUE ME CAGO EN TU BOCA HASTA QUE CAGUES MI MIERDA. HIJO DE UN CONVOY DE PUTAS.

Con esto también, por ejemplo: "De hebreos es cobrar comisión. Eso sí."

No sé, es para dar algo de fuste al post y el concepto del beneficio personal. Pero repito que los comunistas todavía no habéis entendido algo tan básico.
 
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Con esto también, por ejemplo: "De hebreos es cobrar comisión. Eso sí."

No sé, es para dar algo de fuste al post y el concepto del beneficio personal. Pero repito que los comunistas todavía no habéis entendido algo tan básico.
Vete a educar a tu puta madre con tus plusvalías, que espero que esté muerta o mejor aún muriéndose.
 
Si no hay trato fóllico o de vater público a tope de tristeza y miseria, es como comprar loteria.
Si lo hay y con mujeres con rabo, es inversión de futuro. Lo anuncian en La Caixa.
 
Yo creo en la existencia del efecto Ben Franklin, según el cual a medida que le haces favores a alguien, te acaba cayendo mejor esa persona (porque necesitas justificar psicológicamente el gasto de recursos que has hecho), y al final acabas a las rodillas de aprovechados que te la acaban metiendo doblada.

Nunca hay que ser el que hace los favores, hay que ser el que los pide. Yo en general intento ser generoso solamente con la gente que se ha preocupado por mí en algún momento, y a los demás, si no me sale en el momento decirles que no, al menos les pongo mala cara si me piden algo.

Por ejemplo el canarión de mi piso es de los que piden favores, siempre (dinero, comida, ábreme la puerta que salí sin llaves por vigésima vez, etc), y está acostumbrado a que se los hagan, pero luego suelta cosas como "yo no soy la puta de nadie". A esos narcisistas hay que hacerles el vacío y no darles ni agua.
 
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El Efecto Ben Franklin es sacar la polla por la ventana, en noche tormentosa y esperar que caiga un buen rayaco, 1,21 Gigahertzios mínimo, en el piercing conductor que llevas en la punta de la polla, atado a una cometa de milar con chasis de cobre rumano recién robado.

Si se cumple, te deja la huevada vacía como cuando tenías 9 meses y saliste del coñotumadre. Además cauteriza el frenillo y te deja el glande cuan broca de titanio laminado con kevlar (la piel de Robocops). A partir de ahí puedes horadar en modo percusión no solo carne, sino objetos astrales, antimateria, exoplanetas y enanas marrones. Se supone que puedes también puentear el Horizonte de Eventos del agujero negro de un putón nigeriano, aunque eso es sólo una hipóteis.

Así me saqué el Doctorado Cum Laude en la Pompeu Fabra. Todo es teoría de cuerdas BDSM y física de partículas de poso de bragas, pero es factible y existen muchos trabajos y tesinas (cerdas y no publicadas) al respecto.

No juegue con la ciencia, hijodeputa.
 
Yo creo en la existencia del efecto Ben Franklin, según el cual a medida que le haces favores a alguien, te acaba cayendo mejor esa persona (porque necesitas justificar psicológicamente el gasto de recursos que has hecho), y al final acabas a las rodillas de aprovechados que te la acaban metiendo doblada.

Parecido al método para ganarse la vida del prota de 'Asfixia' de Palahniuk.
 
He prestado dinero, mucho.
Nunca habia prestado hasta que cumpli los 45, siempre lo evité.Hay "personas" y personas, y "motivos" y motivos.
En estos 2 años he dejado...cerca de 18.000 euros.
Todo me lo han devuelto.


No.Norteño, a ti no.No pidas.
 
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Quien tiene un amigo en algún momento de la amistad ha dejado dinero que no ha vuelto. Suelen ser siempre pequeñas cantidades a usarse para cubrir una necesidad momentánea; por ejemplo, "¿me dejas un euro para la máquina del café?" y tú lo das sabiendo que las probabilidades de que ese euro vuelva a ti son menores a pillar en verde todos los semáforos que te tocan de vuelta a casa. Creo que eso lo hemos hecho todos y en mi caso tantas veces que no merece la pena pararse en ello.

La única vez que presté dinero fue hace un par de años, en pleno proceso de quimioterapia. Fue a un buen colega, del pueblo de estos de no toda la vida pero sí desde la tierna adolescencia. La cantidad: 1000€. ¿El motivo? Ayudar a un colega que estaba jodido conviviendo con una, reciente, ex-novia que le maltrataba psicológicamente en el extranjero y sin curro. Ella se aprovechaba de que tenía un curro y él no. Una situación bastante jodida, la verdad. Uno no es de carne, cuando se corta, sangra y en el momento en el que a mi amigo por teléfono se le quebró la voz contándome su situación -fui al primero y durante mucho tiempo único al que se atrevió a contar su cruda realidad, sus padres ignoraban el asunto aunque su hermano no, convivía en esa casa también, pero tenía sus rollos y su actitud era de cobarde equidistancia entre mi amigo y su ex- me decidí a actuar y lo primero que le propuse fue que le pagaba un avión para el día siguiente que le volviera a la madre patria al refugio de sus padres porque esa situación en la que estaba era indigna. Le sonaba bien pero lo rechazó porque "tenía cosas que hacer/cerrar" ahí así que le dije frontalmente si con 1000 euros tenía para buscarse una habitación y colchón económico para aguantar el tiempo necesario para buscarse un trabajo, que siempre dignifica y lo que necesitaba era recuperar la dignidad; entre lágrimas me dijo que sí, que con eso tiraba y ponía mandar a tomar por culo a la perra del infierno.

Con el dinero que le mandé pudo huir de esa casa no sin antes sufrir una nueva traición del hermano: le dijo que no se podía tener ese final tan a malas y qué menos que hacer una cena de despedida entre los tres. Supongo que el momento emocional de mi amigo influyó en la estupidez de aceptar y tener buena actitud en la cena de restaurante.

Pasado unos meses se volvió a España porque el padre le dijo que ya estaba bien de hacer el gilipollas y que se pusiera serio con la vida. Para facilitarle la cosa le consiguió un curro en la empresa en la que lleva más de 30 años currando muy bien pagado y me devolvió el dinero en dos cómodas cuotas de 500€ sin interés alguno. Y ya libre de cargas y deudas, desde entonces, disfruta de un tren de vida que le permite su sueldo de unos 45000 limpios al año, con coche y móvil de empresa, 200€ de dietas semanales y el internet de casa pagado por la empresa.

La vida.
 
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Quien tiene un amigo en algún momento de la amistad ha dejado dinero que no ha vuelto. Suelen ser siempre pequeñas cantidades a usarse para cubrir una necesidad momentánea; por ejemplo, "¿me dejas un euro para la máquina del café?" y tú lo das sabiendo que las probabilidades de que ese euro vuelva a ti son menores a pillar en verde todos los semáforos que te tocan de vuelta a casa. Creo que eso lo hemos hecho todos y en mi caso tantas veces que no merece la pena pararse en ello.

La única vez que presté dinero fue hace un par de años, en pleno proceso de quimioterapia. Fue a un buen colega, del pueblo de estos de no toda la vida pero sí desde la tierna adolescencia. La cantidad: 1000€. ¿El motivo? Ayudar a un colega que estaba jodido conviviendo con una, reciente, ex-novia que le maltrataba psicológicamente en el extranjero y sin curro. Ella se aprovechaba de que tenía un curro y él no. Una situación bastante jodida, la verdad. Uno no es de carne, cuando se corta, sangra y en el momento en el que a mi amigo por teléfono se le quebró la voz contándome su situación -fui al primero y durante mucho tiempo único al que se atrevió a contar su cruda realidad, sus padres ignoraban el asunto aunque su hermano sí, convivía en esa casa también, pero tenía sus rollos y su actitud era de cobarde equidistancia entre mi amigo y su ex- me decidí a actuar y lo primero que le propuse fue que le pagaba un avión para el día siguiente que le volviera a la madre patria al refugio de sus padres porque esa situación en la que estaba era indigna. Le sonaba bien pero lo rechazó porque "tenía cosas que hacer/cerrar ahí así que le dije frontalmente si con 1000 euros tenía para buscarse una habitación y colchón para aguantar el tiempo necesario para buscarse un trabajo, que siempre dignifica y lo que necesitaba era recuperar la dignidad; entre lágrimas me dijo que sí, que con eso tiraba y ponía mandar a tomar por culo a la perra del infierno.

Con el dinero que le mandé pudo huir de esa casa no sin antes sufrir una nueva traición del hermano: le dijo que no se podía tener ese final tan a malas y qué menos que hacer una cena de despedida entre los tres. Supongo que el momento emocional de mi amigo influyó en la estupidez de aceptar y tener buena actitud en la cena de restaurante.

Pasado unos meses se volvió a España porque el padre le dijo que ya estaba bien de hacer el gilipollas y que se pusiera serio con la vida. Para facilitarle la cosa le consiguió un curro en la empresa en la que lleva más de 30 años currando muy bien pagado y me devolvió el dinero en dos cómodas cuotas de 500€ sin interés alguno. Y ya libre de cargas y deudas, desde entonces, disfruta de un tren de vida que le permite su sueldo de unos 45000 limpios al año, con coche y móvil de empresa, 200€ de dietas semanales y el internet de casa pagado por la empresa.

La vida.
Me he perdío.
 
Quien tiene un amigo en algún momento de la amistad ha dejado dinero que no ha vuelto. Suelen ser siempre pequeñas cantidades a usarse para cubrir una necesidad momentánea; por ejemplo, "¿me dejas un euro para la máquina del café?" y tú lo das sabiendo que las probabilidades de que ese euro vuelva a ti son menores a pillar en verde todos los semáforos que te tocan de vuelta a casa. Creo que eso lo hemos hecho todos y en mi caso tantas veces que no merece la pena pararse en ello.

La única vez que presté dinero fue hace un par de años, en pleno proceso de quimioterapia. Fue a un buen colega, del pueblo de estos de no toda la vida pero sí desde la tierna adolescencia. La cantidad: 1000€. ¿El motivo? Ayudar a un colega que estaba jodido conviviendo con una, reciente, ex-novia que le maltrataba psicológicamente en el extranjero y sin curro. Ella se aprovechaba de que tenía un curro y él no. Una situación bastante jodida, la verdad. Uno no es de carne, cuando se corta, sangra y en el momento en el que a mi amigo por teléfono se le quebró la voz contándome su situación -fui al primero y durante mucho tiempo único al que se atrevió a contar su cruda realidad, sus padres ignoraban el asunto aunque su hermano no, convivía en esa casa también, pero tenía sus rollos y su actitud era de cobarde equidistancia entre mi amigo y su ex- me decidí a actuar y lo primero que le propuse fue que le pagaba un avión para el día siguiente que le volviera a la madre patria al refugio de sus padres porque esa situación en la que estaba era indigna. Le sonaba bien pero lo rechazó porque "tenía cosas que hacer/cerrar" ahí así que le dije frontalmente si con 1000 euros tenía para buscarse una habitación y colchón económico para aguantar el tiempo necesario para buscarse un trabajo, que siempre dignifica y lo que necesitaba era recuperar la dignidad; entre lágrimas me dijo que sí, que con eso tiraba y ponía mandar a tomar por culo a la perra del infierno.

Con el dinero que le mandé pudo huir de esa casa no sin antes sufrir una nueva traición del hermano: le dijo que no se podía tener ese final tan a malas y qué menos que hacer una cena de despedida entre los tres. Supongo que el momento emocional de mi amigo influyó en la estupidez de aceptar y tener buena actitud en la cena de restaurante.

Pasado unos meses se volvió a España porque el padre le dijo que ya estaba bien de hacer el gilipollas y que se pusiera serio con la vida. Para facilitarle la cosa le consiguió un curro en la empresa en la que lleva más de 30 años currando muy bien pagado y me devolvió el dinero en dos cómodas cuotas de 500€ sin interés alguno. Y ya libre de cargas y deudas, desde entonces, disfruta de un tren de vida que le permite su sueldo de unos 45000 limpios al año, con coche y móvil de empresa, 200€ de dietas semanales y el internet de casa pagado por la empresa.

La vida.

menos mal que le pagan el internet, si no con 45000 al año mas 200 en dietas semanales las iba a pasar putas para ver porno
 
Un amigo mio me había dicho que el secreto era prestar muy poco dinero a una persona que sabias que no te lo iba a devolver de modo que cuando te pidiese mas, tu sólo tenías que decirle: Eh, me debes dinero.

Me puso un ejemplo de un amigo que estaba por allí y que le había prestado un euro. Como si de la prueba empírica se tratase vino el susodicho a junto de nosotros, le pidió otro euro y mi amigo sin despeinarse le dijo: Eh, me debes dinero.

El fulano se dió media vuelta sin mediar palabra y se fue a buscar otro para pedirle dinero. Ante mi cara de asombro me dijo....¿Ves? Esto funciona así.

Que razón tenía.
 
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No me devolvían los juegos de la play cuando era un crío, iba yo a prestar dinero, ¡ja!
Solo cometí el error en una ocasión, con 14-15 años que teníamos que poner todos 10 por cabeza para un regalo de cumpleaños. Uno no llevaba encima nada y lo puse por él. Me costó casi 2 años que me devolviese los 10 euros, que me quiso devolver en chocolate, porque según él era buena inversión, porque si yo compraba 10 euros por ahí, me iban a dar menos.
 
Hará poco más de un año presté quinientos leuros para pagar un aborto (la larva no era mía), a una joven de la que no espero retribución sexual alguna ni favor de por vida alguno. No me lo ha devuelto todavía.

Supérenlo.
 
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