Hubo un tiempo en el que se aplicaba el infalible e implacable "Candado, BAN y a otra cosa" como el que le echa un chorro de anís de Rute al café.
Pero el tiempo, ¡ay! Cómo escribió Tolkien: " devora todas las cosas, hombres, bestias, plantas y flores. Roe el hierro, muerde el acero..."
Pues nada, así estamos.