cuellopavo
Frikazo
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Yo viví 3 o 4 largos veranos a mitad de camino entre el temor, la excitación, y los abismos filogenéticos. Una prima, un año mayor que yo...un verano la dejé siendo una niña y al verano siguiente la encuentro recién salida de su crisálida reluciente. La niña pecosa con la que jugaba al escondite se había convertido, en cosa de un año, en una perturbación para los sentidos. Lo peor no era eso, lo peor es que ella seguía viéndome como a su primito, y yo comencé a mirarla como lo que era, una especie de esfinge concupiscente y voluptuosa.
Y así comenzó el sufrimiento, luego...año tras año, seguía yendo a veranear justo al centro ígneo del universo, allí donde la tentación no vive arriba, sino en el cuarto de al lado. Una vez entré a su habitación para despertarla y me la encontré dormida y totalmente desnuda. Aquello, a parte de ser un combustible imaginario suficiente para cubrir mis años de más entusiasta onanismo, suposo una especie de ruptura, el descubrimiento de su intimidad como zona alejada, como quimera dolorosa...
Al tercer o cuarto año después de su conversión en mariposa, yo ya era un adolescente con granos en la cara y erecciones comprometedoras. Jugábamos a meternos mano en la piscina haciéndole creer al otro que entre primos ya se sabe...creo que nunca un ser tan minúsculo ha sido tan odiado por el resto de hombres gigantescos, convertidos todos en seres deseantes e inquietos ante la presencia de esa gota de erotismo pura que era mi prima. (el pariente David, con su onda genética, destrozando al poderoso Goliat, con su pene a punto de erupción)
Un año nos emborrachamos bastante y nos dimos un par de besos y algún magreo que parecía transgredir las leyes de la sangre, a partir de ahí las cosas se empezaron a enfriar (la moral y sus destrozos de conciencia) pero yo la seguí utilizando, y aún la uso, como artista de lujo en mis fantasías solitarias...
Gracias Eva, por aquellos años de desesperación...
Y así comenzó el sufrimiento, luego...año tras año, seguía yendo a veranear justo al centro ígneo del universo, allí donde la tentación no vive arriba, sino en el cuarto de al lado. Una vez entré a su habitación para despertarla y me la encontré dormida y totalmente desnuda. Aquello, a parte de ser un combustible imaginario suficiente para cubrir mis años de más entusiasta onanismo, suposo una especie de ruptura, el descubrimiento de su intimidad como zona alejada, como quimera dolorosa...
Al tercer o cuarto año después de su conversión en mariposa, yo ya era un adolescente con granos en la cara y erecciones comprometedoras. Jugábamos a meternos mano en la piscina haciéndole creer al otro que entre primos ya se sabe...creo que nunca un ser tan minúsculo ha sido tan odiado por el resto de hombres gigantescos, convertidos todos en seres deseantes e inquietos ante la presencia de esa gota de erotismo pura que era mi prima. (el pariente David, con su onda genética, destrozando al poderoso Goliat, con su pene a punto de erupción)
Un año nos emborrachamos bastante y nos dimos un par de besos y algún magreo que parecía transgredir las leyes de la sangre, a partir de ahí las cosas se empezaron a enfriar (la moral y sus destrozos de conciencia) pero yo la seguí utilizando, y aún la uso, como artista de lujo en mis fantasías solitarias...
Gracias Eva, por aquellos años de desesperación...
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