Viajes Autoestopismo. Emulando a Míriam, Toñi y Desirée

pastanaga

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14 Ago 2007
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Chica haciendo dedo

Los principios básicos del autoestop son conocidos por todos, por lo que podemos pasar a realizar un estudio en profundidad de las ventajas e inconvenientes que presenta.

Pros:
  • Se viaja gratis.

Contras:
  • Se conoce gente.

No se puede negar que los contras son terriblemente desaloentadores, pero las ventajas los contrarrestan claramente. Lo de viajar gratis es como el follar gratis, que todos lo haríamos si pudiésemos. Así que, en principio, parece una forma interesante de ir por el mundo.

Para evitar que todo el mundo opte por él, los poderes fácticos han creado una red de historias falsas y noticias negativas alrededor del viaje a dedo que ha calado hondo en el vulgo en general y en mí en particular. Hoy en día es una práctica residual evitada tanto por conductores como por pasajeros, de tal modo que los únicos que paran en medio de una carretera son los puteros.


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-Hago un francés de muerte.

Desde el punto de vista del conductor, hay que estar chalado para recoger a cualquiera. ¿Vas tan tranquilo escuchando la Cope y vas a cambiarlo por oír a un pesado contarte sus aventurillas vacacionales? Un pesado que seguramente gasta más en transporte que en duchas, que esto del autoestop es muy típico de perroflautas, por lo que te va a dejar las alfombrillas llenas de polvo y su aroma a sudor impregnado en la tapicería durante un par de semanas. Además, por no quedar mal, te vas a ver obligado a acercarlo a su destino exacto, teniendo que desviarte de tu ruta.

Todo esto sin contar que a lo mejor es un psicópata que carga en la mochila con el cadáver troceado de su compañera de viaje, como en "Algo pasa con Mary". Bueno, no me acuerdo muy bien de la película y no sé si era exactamente así, pero al final acaban en un área de descanso donde los gayes hacen cruising. De eso sí que me acuerdo. Bueno, lo importante es que es mucho más realista esa peli que esta otra: Teen Auto Stop - xHamster.com

En el mejor de los casos vas a gastar más gasolina al cargar con más peso y como recompensa te va a dar las gracias un tío a quien no vas a volver a ver más en tu vida. En otros casos, te va a sacar una navaja y te va a decir que tienes un coche muy guapo, que te pares y te bajes ahí mismo sin olvidarte entregarle el móvil y la cartera.

Desde el otro punto de vista tampoco hay grandes expectativas. Porque viendo el panorama que tiene, ¿qué conductor va a parar? El que espere sacar algo del pasajero. ¿Y qué va a sacar de un tío que no tiene ni para coger el autobús? Unos riñones para vender, un muslo para concinar, un ano para penetrar... Hay que desconfiar de quien pare para recogerte, porque sin duda se dedica a dar vueltas en busca de víctimas a las que subir en su vehículo. Como mucho, será un neurótico que necesita a alguien para contarle sus penas. Hay que estar MUY desesperado para aguantar eso por ahorrarse cuatro duros.

En definitiva, nadie en su sano juicio participaría en una actividad tan peligrosa. A no ser que no tengas nada que perder, como aquel catalán paralítico que dice que ha dado varias vueltas al mundo. ¿Qué van a hacer, matarlo? Eso que ganaría. Si alguien tiene el vídeo del chico que lo ponga, por favor, que tengo problemas con Youtube.

Otro día explcaré mis experiencias en el mundo del autoestop, porque naturalmente que sea para chiflados no implica que no haya picado más de una vez. Mientrastanto, podéis explicar vuestras vivencias y opiniones, que seguro que serán más interesantes que las mías.

PD: Coger un taxi no cuenta.
 
Ya he respondido en el hilo que mundele ha copiado para el general, aquel lo vi primero he de decir. El caso es que alli se me olvidó comentar que el Venancio que me cogió en Salamanca llevaba copas de champán en el coche, lo cual verificaba su historia de cuernerio.

Buen hilo señorquehacelasfuncionesdeldedodelaniñadelaprimerafoto por cierto.
 
pastanaga rebuznó:
Jodido Mundele, ahora se van a desperdigar las expes entre las dos copias del hilo...


Quizá si se moviese el hilo completo-, hasta que pierda el LoL, si es que lo llega a tener, que sería cuando hay que retornarlo al sucforo viajes-, nos evitamos dobles lecturas. Ara bien, para la hente que pisa el Viajes... :roll:
 
Mongüiver rebuznó:
Ara bien, para la hente que pisa el Viajes... :roll:

Para ellos cuento mi primera vez.

Decía que alguien que pare ante el reclamo de un autoestopista es probablemente un psicópata en busca de presas. Pero hay un caso todavía más flagrante: el del que ofrece llevar a la gente SIN QUE SE LO PIDAN. Eso apesta a cazador de pringuis que nadie echará en falta de mala manera. Si alguna vez os sucede, huid tan rápido como podáis. No por la carretera, claro, porque con el coche os pillarán fácilmente; campo a través o como sea.

Hace años, al bajar de un pequeño ferry en Gran Bretaña, una pareja me ofreció acercarme a la localidad más cercana, que estaba a un par de kilómetros. Su táctica estaba bien estudiada, ya que habló la mujer. Que a uno le hable una mujer es suficientemente perturbador como para no actuar fríamente y rechazar. Sin embargo, resisití el primer golpe y decliné educadamente.

Entonces dijo que no hacía un tiempo como para ir a pie. Ahí todas las alarmas se me deberían haber disparado. No porque fuese mentira, puesto que efectivamente estaba lloviendo. No, la cuestión es que había estado lloviendo todo el puto día y era evidente que llevaba andando desde la mañana en esas condiciones. Si no hubiese estado dispuesto a mojarme, no habría salido de casa. Menudo argumento más endeble.

Pero estaba terriblemente cansado, me había lesionado la rodilla poco antes y no encontré más fuerzas para contraargumentar. Si iba a ser violado y descuartizado, por lo menos habría habido un coño cerca, así que me metí en su coche. Resultó ser un matrimonio de lo más simpático que actuó por sentida amabilidad. Una vez en el destino, les di las gracias y me bajé del coche sin más consecuencias que als de tratar con gente agradable.
 
El principal inconveniente de hacer autostop es la consiguiente pérdida de tiempo. Así que el sistema queda vedado a los que tienen tiempo de sobra para viajar: perroflautas, parados, jubilados, etc.

Personalmente he hecho autostop en Rumanía con fantástico resultado. Lo hice porque no había medios de transporte hasta el día siguiente, así que el tiempo ya lo tenía perdido. Una experiencia que contar.

También lo intenté en Japón, pero parece que allí en vez de la muerta de la curva a los niños les cuentan la historia del destripador occidental...

Conviene comentar también la variante rusa del taxi-autostop. Paras a un coche en la calle y pactas precio. No conviene hacerlo cuando vas tan borracho que no recuerdas como te llamas. Los rusos son gente con la que no conviene bromear... Moscú sería un buen escenario para Resacón en Las Vegas III.

Ah, por último, existe el tronca-taxi, una variante gratuita del taxi-autostop que necesariamente implica tener un amigo que esté buenorro y consiga que una mujer le lleve a casa en coche con la esperanza de cepillárselo.
 
Misógino Empedernido rebuznó:
Conviene comentar también la variante rusa del taxi-autostop. Paras a un coche en la calle y pactas precio. No conviene hacerlo cuando vas tan borracho que no recuerdas como te llamas. Los rusos son gente con la que no conviene bromear... Moscú sería un buen escenario para Resacón en Las Vegas III.
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Pues no sé si será por la herencia soviética, pero en Cuba tambien funciona eso de los taxi-autostop. Alli paras cualquier coche que en la matrícula ponga "particular" y le pides precio, si llegáis a un acuerdo ya tienes taxi, sino a por el siguiente.
 
Misógino Empedernido rebuznó:
También lo intenté en Japón, pero parece que allí en vez de la muerta de la curva a los niños les cuentan la historia del destripador occidental...

¿Lo intentaste en entorno urbano o en plena carretera?

Misógino Empedernido rebuznó:
Ah, por último, existe el tronca-taxi, una variante gratuita del taxi-autostop que necesariamente implica tener un amigo que esté buenorro y consiga que una mujer le lleve a casa en coche con la esperanza de cepillárselo.

Antes de que venga Cachondo Mental señalando las diferencias entre España y Rusia, ¿podrías ampliar eso?
 
pastanaga rebuznó:
¿Lo intentaste en entorno urbano o en plena carretera?
Lo intenté en Kagoshima, cuando fui de excursión al volcán Sakurajima. Se coge un barquito y te deja en la isla del volcán. Habitada, rural. Intenté hacer autoestop a la entrada de una carretera que subía a un mirador (7 km, demasiado para hacerlo andando). No paró ni riqui.

pastanaga rebuznó:
Antes de que venga Cachondo Mental señalando las diferencias entre España y Rusia, ¿podrías ampliar eso?
Pues sencillo. Si tienes un amigo que esté bueno, te vas con él a una zona de aparcamiento, buscas un grupo de tías que se estén yendo a casa y les pides que te lleven. Que no tienes dinero para un taxi y bla, bla.
Si el amigo está bueno y les da un poco de coba, tragan. Lo que sea menester.
 
Un atardecer me encontraba en una calita con la única compañía lejana de una barca de pescadores que estaba echando las redes. El pueblo donde me alojaba estaba en la foto de Google Maps a 100 metros, pero había el doble de ellos de diferencia de altitud por lo agreste de la costa, así que el paseo que me esperaba para volver iba a ser largo a través de carretera y caminos.

A los pocos metros de iniciar la ascensión, me alcanzó una carraca a motor de color rojo. No sé qué modelo de coche era, pero se podría comparar con el Renault 4L. Se paró y el conductor abrió la puerta del copiloto a mi altura. Lo miré con cara de bobo e hizo un gesto para que me metiese.

Volvió a traicionarme el cansancio. Había pasado todo el día caminando por la zona, subiendo y bajando, y a esa hora las pantorrillas impusieron su criterio y me metí en el coche con el desconocido. Rondaría los 60 años, por lo que en el supuesto de que la cosa se pusiese fea, o él sacaba una pistola o me veía capaz de zafarme con un combo de sillita eléctrica, patada voladora y cascanueces.

No hizo falta. Era un pescador sin otra intención que la de ahorrarme el esfuerzo de la subida al pueblo. Lo más curioso es que se sorprendió de que hablase un poco su idioma, y no tenía aspecto de conocer ningún otro más que el suyo materno, lo que significa que solía subir a forasteros con los que ni siquiera podía pasar el rato con una conversación. La mía tampoco es que fuese entretenidísima (le pregunté por los peces que había por allí, y si no conozco los nombres ni en mi lengua, imaginad en la suya), pero bueno, dio para llegar hasta el punto más cercano de su ruta hasta mi destino.

Al cabo de unos días, había trasladado mi alojamiento a otro pueblo cercano. Una tarde que volvía a pie por la carretera, una furgoneta que venía en dirección contraria me pitó. Cuando miré hacia el conductor para mandarle telepáticamente unos insultos, porque iba por el lado correcto sin invadir calzada, me di cuenta de que era "mi amigo" el pescador (en un vehículo distinto aunque también viejo). Me dio el tiempo justo para saludarle gestualmente. Joder, sé que es tremendamente ridículo, pero me hizo ilusión.
 
yo eh hecho autostop algunas veces de un pueblo a otro, lo tipico, pero pastanaga tu eres un trotamundos o que? cuenta
 
dandii rebuznó:
yo eh hecho autostop algunas veces de un pueblo a otro, lo tipico, pero pastanaga tu eres un trotamundos o que? cuenta

Para nada. He visitado muy pocos países y llevo ya unos años sin salir, pero cuando lo hago me gusta que sea como Dios manda.
 
pastanaga rebuznó:
Para nada. He visitado muy pocos países y llevo ya unos años sin salir, pero cuando lo hago me gusta que sea como Dios manda.

si señor.
te ivas sin dinero?
alguien te recomendo un hostal rollo hostel?
 
En el último viaje que he hecho, tenía un día el plan de ir hasta un lugar en autobús para hacer unos paseos por los alrededores. Por ir un poco más ligero, pensé en hacer primero una vuelta de 10 km, regresar a donde dejaba el autobús a comprar agua, y luego volver a caminar por otros lados, para acabar cogiendo el autobús de vuelta por la tarde.

Estando a cinco kilómetros del campo base encontré un desvío que parecía más interesante que el que llevaba, y me metí por él. Lo era, sólo que me alejaba y, aparentemente, me llevaba en dirección a donde estaba alojado. Bajo un sol que te cagas, iba racionando el agua que había cogido para los 10 km iniciales de modo que me llegase para volver al autobús deshaciendo el camino, pero, como aquello seguía teniendo pinta de acercarme a "casa", me animaba y todavía no daba la vuelta. Cuando llegó el punto en el que la preocupación por el agua era imposible de arrinconar en el cerebro, ya no estaba nada claro si saldría más a cuenta tirar para adelante o para atrás. Encima no había nadie a quien mendigarle no ya un trago, sino ni siquiera información sobre qué dirección tomar. Volver me iba a costar unas tres horas; seguir, ni puta idea. Decidí sentarme en un recodo del camino para intentar echar una minisiesta y pensar después con calma qué hacer. Tenía que intentar despejar un poco la mente, que ya ocupaba buena parte del tiempo de proceso en imaginar mi cuerpo reseco, picoteado por los grajos y con la camiseta en la boca tras haber intentado infructuosamente humedecer los labios sorbiendo el sudor que todavía no se hubiese evaporado.

No había llegado a dormirme cuando oí un rumor que se aproximaba. Era de un vehículo y tenía que pasar por ahí mismo, porque, si bien no sabía el recorrido exacto de, camino, lo que era seguro es que no había ningún otro alrededor. Pues en lugar de lanzarme en medio del paso para que parase, voy y me quedo mirando pasmado como las vacas al tren. Era una ranchera 4x4 cuyo conductor al verme (no sé bien cómo lo hizo, porque yo estaba un poco retirado) aminoró y me saludó con la mano. No sólo eso, sino que paró a pocos metros de distancia. En ese momento ya se me activó el instinto asesino y fui hacia él. El coche era tan viejo que no tenía elevalunas eléctrico y el tío quitó el seguro e hizo ademán de abrir la puerta del copiloto para hablarme. Como en ese punto yo ya estaba ciego, cual tiburón ante la presa desangrándose, no es que no me hiciese el remolón como otras veces, es que ni me esperé a que me ofreciese llevarme. Me senté en el asiento sin haberle dejado abrir la boca. Era un puto ángel de la guarda que me había enviado el Señor para salvarme, y me iba a salvar aunque tuviese que amenazarle con partirle las piernas.

Después de arrancar, ya empezamos a hablar. Agua aseguró no tener, pero por lo menos iba hasta prácticamente donde estaba alojado, así que me valía perfectamente. Según él, en aquel punto lo más corto clarísimamente era seguir adelante, si bien lo puse en cuarentena porque el viaje en coche duró casi media hora. También es verdad que el camino estaba bastante cascado, e igual la velocidad era 30 km/h como igual 10, vete a saber.

Tras agradecerle como se merecía la salvación y bajarme del coche, me llevé un chasco. Descubrí que había racionado el agua mejor de lo que pensaba y que me quedaba bastante, prácticamente la mitad. Me la bebí de un trago y me fui a duchar.
 
¿Por dónde andabas, Pastanaga, en España o en otro país?

pastanaga rebuznó:
Tras agradecerle como se merecía la salvación


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Lebrom rebuznó:
¿Por dónde andabas, Pastanaga, en España o en otro país?

Por uno de esos países del sur de Europa donde en las zonas rurales ven a un desconocido y lo saludan.
 
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