saca-al-tarado
Clásico
- Registro
- 22 Mar 2006
- Mensajes
- 2.702
- Reacciones
- 66
Les sugiero que echen un vistazo a la cartelera de cine de este viernes. Se estrena a bombo y platillo "La clienta", película de la que probablemente sea perfecta muestra su cartel: cincuentona de buen ver se recuesta juguetona sobre un diván mientra en primer plano se ve la mano de un hombre, desnudo de cintura para arriba, que se introduce unos billetes en el bolsillo. Los pantalones son unos vaqueros, clara sugerencia de que se trata de un hombre joven, probablemente entre los veintipocos y los treinta y alguno.
Ella se muestra, cómo no, divertida, probablemente tanto como la directora de la película al parir el asunto, quien ha pretendido -afirma- reflexionar no sólo sobre la prostitución masculina sino acerca de la soledad de las mujeres.
Después por tanto del bombardeo mediático acerca de lo repugnante, asquerosa, alienante y esclavista que es la prostitución; tras recibir día sí y día también mensajes relativos a que el hombre que recurre a ella es un individuo emocionalmente insuficiente, sentimentalmente lastrado y socialmente apestado llega este cartel para decirnos bien a las claras que en cambio ellas lo que buscan es compañía, que no está mal echar una canita al aire, que ellas son modernas y liberadas, que el asunto puede ser incluso divertido; tal vez la película nos cuente en el fondo que para la coñocracia está bien recurrir a un gigolo, porque seguro que en tal caso no es vicio sino terapia, claro.
En definitiva, una vuelta de tuerca más de estas hijas de puta, y las que quedan.
Ella se muestra, cómo no, divertida, probablemente tanto como la directora de la película al parir el asunto, quien ha pretendido -afirma- reflexionar no sólo sobre la prostitución masculina sino acerca de la soledad de las mujeres.
Después por tanto del bombardeo mediático acerca de lo repugnante, asquerosa, alienante y esclavista que es la prostitución; tras recibir día sí y día también mensajes relativos a que el hombre que recurre a ella es un individuo emocionalmente insuficiente, sentimentalmente lastrado y socialmente apestado llega este cartel para decirnos bien a las claras que en cambio ellas lo que buscan es compañía, que no está mal echar una canita al aire, que ellas son modernas y liberadas, que el asunto puede ser incluso divertido; tal vez la película nos cuente en el fondo que para la coñocracia está bien recurrir a un gigolo, porque seguro que en tal caso no es vicio sino terapia, claro.
En definitiva, una vuelta de tuerca más de estas hijas de puta, y las que quedan.