Novato de mierdaCONTRATÓ A UN 'LOBBY' EN WASHINGTON
El Gobierno del PP usó dinero público para que Aznar lograse la Medalla del Congreso de EEUU
MADRID.- El Gobierno de Aznar empleó dos millones de euros en contratar a un gabinete de abogados para, entre otras iniciativas, promover la imagen del ex presidente español en EEUU y conseguir el apoyo para que le fuese concedida la Medalla de Oro del Congreso estadounidense. El PP asegura que se trata de un contrato "perfectamente legal y habitual".
Según los documentos que ha difundido la Cadena Ser, el bufete Piper Rudnick fue contratado meses antes de las elecciones de marzo. De acuerdo con su información, este servicio fue financiado "con fondos del Ministerio de Asuntos Exteriores a través de un cauce extraordinario que garantizaba la confidencialidad".
Uno de los primeros documentos tiene fecha del 30 de diciembre. En él se explica que el bufete "facilitará consejo, asesoramiento y otros servicios en un amplio espectro de asuntos políticos y económicos y otros identificados y descritos por el Gobierno de España".
"El propósito de este acuerdo -continúa el texto- es asistir al Gobierno de España en estrechar las relaciones con Estados Unidos. A este respecto -insiste- el bufete aconsejará al Gobierno de España en todos los asuntos relacionados con la diplomacia pública, la comunicación estratégica con los medios, la evaluación de eventos programados por la embajada y asistirá y aconsejará al Gobierno de España para reforzar sus relaciones con la Casa Blanca, la Secretaría de Estado y otros departamentos y agencias, así como el Congreso de EEUU".
Entre las tareas que efectuó en el mes de enero se incluyen "preparar el discurso de Aznar en la sesión conjunta del Congreso y el Senado; la resolución que autorice la concesión de la Medalla de Oro del Congreso al presidente Aznar y asesorar la reacción de ciertos departamentos del Gobierno a la inciativa económica del presidente Aznar".
'Contrato-tipo'
La ex ministra de Exteriores, Ana Palacio, ha confirmado en una improvisada rueda de prensa celebrada en Washington la existencia del acuerdo, que ha calificado de 'contrato-tipo'. "El objeto del contrato era apoyar la gestión por parte de la embajada de los intereses de España: intereses comerciales, culturales y de diplomacia", ha indicado.
Según ha relatado, cuando se hizo cargo del ministerio de Exteriores, el embajador Javier Rúperez le comentó en una de sus "primeras conversaciones" que tenía "dificultades" para realizar gestiones en Estados Unidos. En aquel momento le trasladó "la necesidad de contar con una empresa de estas características". "Y yo, que conozco bien cómo funciona Estados Unidos, creo, vi que tiene toda la razón y tiene evidentemente apoyo para continuar en esa idea y para conseguirlo", ha especificado.
"Este contrato ha seguido todos los pasos de la contratación pública y ha sido controlado en todo momento por la supervisión del Estado", ha apostillado. "Se está intentando trasladar a la opinión pública que se trata de una cosa rara, extraordinaria, poco habitual y nada más lejos de la realidad -ha reiterado-. Entre los Estados que tienen representación diplomática en Washington, por lo menos 70 tienen contratadas empresas con contratos de idénticas características. Y en esos 70 Estados están los de nuestro entorno: Reino Unido, Francia, etc".
"Quiero además dejar constancia de que la iniciativa de la medalla del Congreso al presidente fue bipartidista, partió de congresistas y no tuvo nada que ver ni el Gobierno ni la embajada. Es una iniciativa de congresistas republicanos y demócratas que, conjuntamente, promueven la idea de la medalla del Congreso para el presidente Aznar a primeros de mayo del año pasado, esto es, mucho antes del contrato", ha recalcado.
'Legal y habitual'
El que fuera entonces secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Ramón Gil-Casares, ha asegurado que ese contrato es "perfectamente legal y habitual", que tiene "carácter general" y que en ningún caso detalla acciones como la concesión de la medalla a Aznar.
Según ha explicado, el contrato "no especifica acciones porque no quisimos atarnos" y tan sólo precisa la "ayuda a los intereses de España y la mejora de la imagen". Casares ha especificado que el sistema de trabajo consistía en que los miembros del despacho contratado se reunían periódicamente con representates de la Embajada en EEUU "para ver las cosas que se les iban ocurriendo a unos y a otros en favor de la imagen de España".
"Parece ser -ha añadido- que en una de las actas de esas reuniones ellos dicen que, como va a ir el presidente del Gobierno, van a preparar la visita y trabajar para que sea un éxito; pero eso no es el contrato, es un acta de una reunión".
La concesión de la medalla "puede que se haya tratado en una reunión, pero la firma del contrato es anterior y para la defensa de los intereses generales españoles y la mejora de la imagen de España; lo de la medalla va por su cuenta, si no recuerdo mal, la propuesta es de unos diputados y creo incluso que antes de la firma del contrato con el lobby", ha puntualizado.
Los documentos revelados están dirigidos al entonces embajador de España en Washington, Javier Rupérez. Entre ellos se incluye también la especificación de los pagos. El primero, de 700.000 dólares. El resto, añade, se efectuará a través de mensualidades de 100.000 dólares hasta completar el total de dos millones.
Aznar pronunció un dicurso ante el Congreso de EEUU el pasado 4 de febrero como 'apoyo' a la concesión de la Medalla de Oro. La concesión de esta insignia aún está en trámites y Aznar podría recibirla pese a no ocupar ya la jefatura del Gobierno de España.
El Gobierno del PP usó dinero público para que Aznar lograse la Medalla del Congreso de EEUU
MADRID.- El Gobierno de Aznar empleó dos millones de euros en contratar a un gabinete de abogados para, entre otras iniciativas, promover la imagen del ex presidente español en EEUU y conseguir el apoyo para que le fuese concedida la Medalla de Oro del Congreso estadounidense. El PP asegura que se trata de un contrato "perfectamente legal y habitual".
Según los documentos que ha difundido la Cadena Ser, el bufete Piper Rudnick fue contratado meses antes de las elecciones de marzo. De acuerdo con su información, este servicio fue financiado "con fondos del Ministerio de Asuntos Exteriores a través de un cauce extraordinario que garantizaba la confidencialidad".
Uno de los primeros documentos tiene fecha del 30 de diciembre. En él se explica que el bufete "facilitará consejo, asesoramiento y otros servicios en un amplio espectro de asuntos políticos y económicos y otros identificados y descritos por el Gobierno de España".
"El propósito de este acuerdo -continúa el texto- es asistir al Gobierno de España en estrechar las relaciones con Estados Unidos. A este respecto -insiste- el bufete aconsejará al Gobierno de España en todos los asuntos relacionados con la diplomacia pública, la comunicación estratégica con los medios, la evaluación de eventos programados por la embajada y asistirá y aconsejará al Gobierno de España para reforzar sus relaciones con la Casa Blanca, la Secretaría de Estado y otros departamentos y agencias, así como el Congreso de EEUU".
Entre las tareas que efectuó en el mes de enero se incluyen "preparar el discurso de Aznar en la sesión conjunta del Congreso y el Senado; la resolución que autorice la concesión de la Medalla de Oro del Congreso al presidente Aznar y asesorar la reacción de ciertos departamentos del Gobierno a la inciativa económica del presidente Aznar".
'Contrato-tipo'
La ex ministra de Exteriores, Ana Palacio, ha confirmado en una improvisada rueda de prensa celebrada en Washington la existencia del acuerdo, que ha calificado de 'contrato-tipo'. "El objeto del contrato era apoyar la gestión por parte de la embajada de los intereses de España: intereses comerciales, culturales y de diplomacia", ha indicado.
Según ha relatado, cuando se hizo cargo del ministerio de Exteriores, el embajador Javier Rúperez le comentó en una de sus "primeras conversaciones" que tenía "dificultades" para realizar gestiones en Estados Unidos. En aquel momento le trasladó "la necesidad de contar con una empresa de estas características". "Y yo, que conozco bien cómo funciona Estados Unidos, creo, vi que tiene toda la razón y tiene evidentemente apoyo para continuar en esa idea y para conseguirlo", ha especificado.
"Este contrato ha seguido todos los pasos de la contratación pública y ha sido controlado en todo momento por la supervisión del Estado", ha apostillado. "Se está intentando trasladar a la opinión pública que se trata de una cosa rara, extraordinaria, poco habitual y nada más lejos de la realidad -ha reiterado-. Entre los Estados que tienen representación diplomática en Washington, por lo menos 70 tienen contratadas empresas con contratos de idénticas características. Y en esos 70 Estados están los de nuestro entorno: Reino Unido, Francia, etc".
"Quiero además dejar constancia de que la iniciativa de la medalla del Congreso al presidente fue bipartidista, partió de congresistas y no tuvo nada que ver ni el Gobierno ni la embajada. Es una iniciativa de congresistas republicanos y demócratas que, conjuntamente, promueven la idea de la medalla del Congreso para el presidente Aznar a primeros de mayo del año pasado, esto es, mucho antes del contrato", ha recalcado.
'Legal y habitual'
El que fuera entonces secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Ramón Gil-Casares, ha asegurado que ese contrato es "perfectamente legal y habitual", que tiene "carácter general" y que en ningún caso detalla acciones como la concesión de la medalla a Aznar.
Según ha explicado, el contrato "no especifica acciones porque no quisimos atarnos" y tan sólo precisa la "ayuda a los intereses de España y la mejora de la imagen". Casares ha especificado que el sistema de trabajo consistía en que los miembros del despacho contratado se reunían periódicamente con representates de la Embajada en EEUU "para ver las cosas que se les iban ocurriendo a unos y a otros en favor de la imagen de España".
"Parece ser -ha añadido- que en una de las actas de esas reuniones ellos dicen que, como va a ir el presidente del Gobierno, van a preparar la visita y trabajar para que sea un éxito; pero eso no es el contrato, es un acta de una reunión".
La concesión de la medalla "puede que se haya tratado en una reunión, pero la firma del contrato es anterior y para la defensa de los intereses generales españoles y la mejora de la imagen de España; lo de la medalla va por su cuenta, si no recuerdo mal, la propuesta es de unos diputados y creo incluso que antes de la firma del contrato con el lobby", ha puntualizado.
Los documentos revelados están dirigidos al entonces embajador de España en Washington, Javier Rupérez. Entre ellos se incluye también la especificación de los pagos. El primero, de 700.000 dólares. El resto, añade, se efectuará a través de mensualidades de 100.000 dólares hasta completar el total de dos millones.
Aznar pronunció un dicurso ante el Congreso de EEUU el pasado 4 de febrero como 'apoyo' a la concesión de la Medalla de Oro. La concesión de esta insignia aún está en trámites y Aznar podría recibirla pese a no ocupar ya la jefatura del Gobierno de España.
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