cuellopavo
Frikazo
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...ese es el dilema. El otro día leí, en un artículo, en el que hablaban maravillosamente de esa facultad que tienen los humanos y tumbaban a Freud (que dijo: "una persona feliz nunca fantasea, sólo la insatisfecha lo hace") dos cosas que me parecieron muy interesantes:
1. ¿Se deben compartir las fantasías con la pareja? Si hay equilibrio entre ambos, bien, pero si uno se convierte en objeto sexual del otro, entonces ¿cómo lo veis?
2. ¿Se debe hacer todo lo posible para que las fantasías se cumplan? Al hacerse realidad puede perder la magia que tienen en nuestra mente y la evolución de las mismas ya no la controlamos como cuando estaban dentro de nosotros; pero, por otro lado, quien se puede resistir a una situación que se perfila y se identifica con alguna de nuestras fantasías más intensas y recurrentes.
Me gustaría que me dijéis qué fantasías habéis compartido con vuestras parejas y cuales habéis hecho realidad. ¿Fue ésta más placentera que cuando sólo existía en vuestra imaginación?
1. ¿Se deben compartir las fantasías con la pareja? Si hay equilibrio entre ambos, bien, pero si uno se convierte en objeto sexual del otro, entonces ¿cómo lo veis?
2. ¿Se debe hacer todo lo posible para que las fantasías se cumplan? Al hacerse realidad puede perder la magia que tienen en nuestra mente y la evolución de las mismas ya no la controlamos como cuando estaban dentro de nosotros; pero, por otro lado, quien se puede resistir a una situación que se perfila y se identifica con alguna de nuestras fantasías más intensas y recurrentes.
Me gustaría que me dijéis qué fantasías habéis compartido con vuestras parejas y cuales habéis hecho realidad. ¿Fue ésta más placentera que cuando sólo existía en vuestra imaginación?