ichi is back
Veterano
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A principios de los 50, en los USA, el dueño de una editorial de cómics religiosos se dijo que era hora de publicar algo realmente interesante e importante. Canceló toda la basura piadosa y sacó colecciones de cómics de terror, crímenes y guerra.
Pero no eran cómics normales. Algunos de ellos eran verdaderas obras maestras de su género y muchos eran un golpe directo a todo lo establecido hasta entonces en la industria del cómic y del entretenimiento en general.
Pagaron por ello.
Fueron denunciados por asociaciones de padres y de defensa de la decencia, con apoyo de las autoridades, de psicólogos y, en general, de la extrema derecha americana.
La industria del cómic americano creó un sistema de censura contra estos ataques y la EC cómics tuvo que cerrar acosada por los editores, distribuidores y la opinión pública. Sus artistas tuvieron que trabajar en publicidad, la enseñanza o en revistas de humor.
Esta es una de las malvadas historias que tanto enfadaron a la honrada extrema derecha americana y que les llevaron a los tribunales.
Pero no eran cómics normales. Algunos de ellos eran verdaderas obras maestras de su género y muchos eran un golpe directo a todo lo establecido hasta entonces en la industria del cómic y del entretenimiento en general.
Pagaron por ello.
Fueron denunciados por asociaciones de padres y de defensa de la decencia, con apoyo de las autoridades, de psicólogos y, en general, de la extrema derecha americana.
La industria del cómic americano creó un sistema de censura contra estos ataques y la EC cómics tuvo que cerrar acosada por los editores, distribuidores y la opinión pública. Sus artistas tuvieron que trabajar en publicidad, la enseñanza o en revistas de humor.
Esta es una de las malvadas historias que tanto enfadaron a la honrada extrema derecha americana y que les llevaron a los tribunales.