Jacques de Molay rebuznó:
¿Hay algún friq en el foro que coleccione todas las ediciones que caen en sus manos de algún libro?
¿Hay algún friq que pese a tener ya un libro en una edición de bolsillo se lo vuelve a comprar en otra mejor?
¿Hay algún friq que compre libros compulsivamente a sabiendas de que jamás dispondrá de tiempo para leerlos todos?
Al menos hay uno. Y soy yo.
Un ejemplo, hoy me he comprado de nuevo el "Manuscrito hallado en Zaragosa" de Potocki, que ya tenía en edición de bolsillo, sólo por el placer de tenerlo en la lujosa colección gótica de Valdemar, esos libros negros que valen los casi 30 leuros que pagas por ellos.
Bajo el tercer punto caigo yo también. Me he propuesto no comprar libros en los próximos dos o tres años, prescindir de la droga consumista en la que uno cae. Y de momento, con algunas excepciones justificables (3 o 4 libros al año, que necesito para mis clases) lo voy logrando. Me doy cuenta de que he gastado un dineral en libros. Y eso no es bueno. Desde luego que he aprendido mucho, pero creo que me he pasado, muy a menudo. Calculo haberme gastado del orden de 10 millones de pesetas en libros a lo largo de mi vida. Y ahora me pesa no haberme limitado a, digamos, 6. He comprado más rápido de lo que se podía leer (y eso dedicándole 12 o 14 horas al día de media a la lectura; ahora, por motivos de trabajo, no puedo pasar de 3 o 4 entre semana, si tengo suerte; y el fin de semana, como mucho, 6 o 7 alguno de los días). Y han venido a ser un problema de espacio. Ya casi no me entran en casa. Y encima suponen un problema para un traslado domicilario, que es algo que afronto con cierta frecuencia.
Ahora, bibliógrafo en el sentido fetichista del término nunca lo he sido. Me fijo en lo que está escrito, y no en el formato. No quiere decir que no prefiera unas ediciones a otras, o unos formatos a otros, pero casi siempre esas preferencias se basan en criterios filológicos o lingüísticos serios (del tipo de que la traducción sea mejor, o cosas así). Tengo alguna pequeña rareza en mi biblioteca (ediciones de Schopenhauer en letra gótica, de 1870 una, y de 1945 la otra), pero son cosas que he pillado por muy poco dinero (10 euros o así), y porque era la única edición disponible de la obra cuando la fui a comprar, o al menos la única que pude encontrar sin que el esfuerzo fuera una molestia.
Lo de tener varias ediciones del mismo libro me sucede sólo en 4 o 5 casos, y siempre con una explicación obvia. Por ejemplo, que uno de los ejemplares se me perdiera en una mudanza, y luego volviera a aparecer, después de haber comprado una copia nueva de la misma edición (o a veces de otra). O que una sea una edición, digamos, más pobre, con la que empecé, y que más adelante en la vida me haya hecho con una más "profesional". Pero ya digo que no soy un gran fetichista del libro en ese sentido clásico. Por norma, los bibliógrafos suelen ser malos lectores.
Aunque cuando me paso por Madrid sí que me hecho alguna ojeada por alguna de las librerias de viejo, y me planteo hacerme, por ejemplo, con ediciones de Ortega originales de los años 40, o cosas así (un capricho por el que se paga 20 o 25 euros en vez de los 10 o 12 del libro en edición de bolsillo). Pero creo que en comparación con lo que cuenta Molay, son pecados veniales.- Ah, bueno, y también puedo tener algún libro repetido, pero en dos idiomas, porque la lengua original la aprendí en una fase posterior de mi vida. Pero, vamos, creo que eso es perdonable. Y no son muchos de esos.