Pensaba ponerla en el Últimos visionados, pero es que me ha parecido morrocotuda, mucho mejor de lo que esperaba.
El mensajero (2013) - FilmAffinity
Sinopsis: Un padre (Johnson) recibe un duro golpe cuando condenan a su hijo adolescente a una pena de treinta años de cárcel por un delito relacionado con el narcotráfico. Para conseguir que reduzcan su condena, intenta ponerse en contacto con un importante traficante.
A priori una peli con The Rock implica hostias como panes desde el minuto 0, y eso es lo que esperaba en esta ocasión, que no tiene nada de malo y me suele divertir. Pero me he quedado con un palmo de narices. A cambio he tenido un thriller realmente soberbio, pero buenísimo de verdad. Partiendo de que no es original en absoluto, la película es de una solidez y una entidad realmente sorprendente. Lo mejor que tiene es, no podía ser de otra forma, el guión. Cojonudo y con una atención a los personajes envidiable. Todo tiene su porqué, sus motivaciones en cada momento están claras y además no se corta en retratar a políticos ávidos de poder, policías íntegros (atención a Barry Pepper, una de las sorpresas del film) y corruptos y padres que tan sólo intentan sostener a su familia desde puntos completamente diferentes pero objetivos idénticos.
Y todo ello con una trama de lo más eficaz y creíble, como decía apoyada en un guión magnífico, que juega perfectamente con el ritmo in crescendo y que te da las dosis de acción justas en cada momento, porque no nos engañemos, no es una peli de acción, pero haberla hayla y muy bien puesta y rodada a la antigua usanza, lo que la hace todavía más efectiva. Ah, y sin efectos digitales, al menos aparentes, seguramente alguno habrá pero ni se nota.
A estas alturas hay que hablar de The Rock. Es un actor que siempre me ha caído bien, pero aquí hace con diferencia el mejor papel de su carrera. Si tras esto no le toman en serio como intérprete apaga y vámonos, el que no lo quiera ver es su problema. No es Al Pacino, eso está claro, pero coño el tío lo hace de putísima madre. Qué carisma, qué presencia en pantalla, joder. Y el director de casting lo ha clavado con los secundarios, desde el Omar de The Wire hasta Benjamin Bratt, pasando como apuntaba antes por Barry Pepper y Susan Sarandon al ralentí que aun así hace de cojones el papel de política zorrupia.
En fin, absolutamente recomendable, y que sin aportar en absoluto nada original ni novedoso es increíblemente efectiva y sólida como una roca (obsérvese el habilísimo juego de palabras

). Le he cascado
un 8 sin vacilar.
Ah, y un enlacito para todos ustedes.