Cheshire´s Katua
Prima Donna del Cocoguá
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- 4 Mar 2007
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Estimados hamijos, os cuento la historia que le está pasando a un amigo, a ver qué opináis y yo le transmitiré vuestra sabiduría entre cubata y cubata (a la par que le hago Nelsons varios).
Resulta que mi amigo lleva muchos años con su novia, viven juntos, son muy felices y a él nunca se le ha pasado por la cabeza irse con otra. Hasta aquí perfecto. Hace unas semanas, a mi amigo se le cruzó el cable y empezó a tontear con una compañera de trabajo, mujer respetable, casada y con hijos, con la sana intención de volver a sentir el gusanillo de la conquista, el "si quiero puedo" y entretenerse un rato. Él me ha asegurado que en ningún momento pretendía adornar la testuz de su parienta, y yo le creo, así que vosotros también os lo vais a creer
En estas semanas de tonteo, todo se ha limitado a mensajes de móvil que han sido subiendo de tono sin llegar a algo escandalosamente explícito, pero lo suficiente como para que la señora se haya encaprichado de mi amigo. Nunca han quedado fuera del trabajo, y cuando se ven actúan como si no pasara nada. También es verdad que se ven muy poco porque no trabajan codo con codo; si no fuera asi los Nelsons se multiplicarían por diez por eso de donde tengas la olla...
Mi amigo, una vez henchido su ego y recordado los tiempos adolescentes de la conquista, se ha dado por satisfecho e intenta recular, diciéndole que no pueden destrozar dos parejas, y máxime con dos criaturas de por medio, pero la mujer sigue mandándole mensajes y ayer mismo le preguntó si podía llamarle algún día de estos, porque le daba pena que eso se acabara.
Yo no sé muy bien qué decirle. Ella tiene una situación todavía más peliaguda que la de mi amigo, así que no creo que haga tonterías como llamarle a horas intempestivas para preguntarle qué lleva puesto, pero él quiere cortar con esto de la mejor manera, al menos para no perder el buen ambiente que tienen en el trabajo, ya sabéis.
Ahora bien, hamijos, ¿os ha pasado algo parecido alguna vez? ¿habéis sentido la necesidad de tontear por tontear, simplemente para volver a sentir ese gusanillo y comprobar que tenéis atractivo para otras féminas que no sea con la que compartís la cama por las noches? ¿habéis jugado con fuego y os habéis terminado quemando?
Resulta que mi amigo lleva muchos años con su novia, viven juntos, son muy felices y a él nunca se le ha pasado por la cabeza irse con otra. Hasta aquí perfecto. Hace unas semanas, a mi amigo se le cruzó el cable y empezó a tontear con una compañera de trabajo, mujer respetable, casada y con hijos, con la sana intención de volver a sentir el gusanillo de la conquista, el "si quiero puedo" y entretenerse un rato. Él me ha asegurado que en ningún momento pretendía adornar la testuz de su parienta, y yo le creo, así que vosotros también os lo vais a creer
En estas semanas de tonteo, todo se ha limitado a mensajes de móvil que han sido subiendo de tono sin llegar a algo escandalosamente explícito, pero lo suficiente como para que la señora se haya encaprichado de mi amigo. Nunca han quedado fuera del trabajo, y cuando se ven actúan como si no pasara nada. También es verdad que se ven muy poco porque no trabajan codo con codo; si no fuera asi los Nelsons se multiplicarían por diez por eso de donde tengas la olla...
Mi amigo, una vez henchido su ego y recordado los tiempos adolescentes de la conquista, se ha dado por satisfecho e intenta recular, diciéndole que no pueden destrozar dos parejas, y máxime con dos criaturas de por medio, pero la mujer sigue mandándole mensajes y ayer mismo le preguntó si podía llamarle algún día de estos, porque le daba pena que eso se acabara.
Yo no sé muy bien qué decirle. Ella tiene una situación todavía más peliaguda que la de mi amigo, así que no creo que haga tonterías como llamarle a horas intempestivas para preguntarle qué lleva puesto, pero él quiere cortar con esto de la mejor manera, al menos para no perder el buen ambiente que tienen en el trabajo, ya sabéis.
Ahora bien, hamijos, ¿os ha pasado algo parecido alguna vez? ¿habéis sentido la necesidad de tontear por tontear, simplemente para volver a sentir ese gusanillo y comprobar que tenéis atractivo para otras féminas que no sea con la que compartís la cama por las noches? ¿habéis jugado con fuego y os habéis terminado quemando?