Estás utilizando un navegador obsoleto. Puede que este u otros sitios no se muestren correctamente. Debes actualizarlo o utilizar un navegador alternativo.
Yo sé que es cierto. Vosotros sois de una generación de transición en la que esperabais tener lo mismo que vuestros padres: un trabajito de cuarenta horas más o menos bien pagado, una esposa normalita que no cocinara demasiado mal, un piso a pagar en ocho años como mucho y varios hijos.
Os encontrasteis con tias que os despreciaban pero que a pico y pala muy duro se podía conseguir algo con ellas... que acababa con divorcios. Hijos poquitos. Sueldos mediocres, precios de pisos caros. Pero teníais esperanzas y de ahí vuestras frustraciones y desesperanza.
Los jóvenes de ahora no tienen esperanza, tienen muy asumido que no van a tener nada y asumen con naturalidad el nuncafollismo.
No aconsejo a los jóvenes en la parroquia que se echen novia. Dejé de hacerlo cuando oí decir a varios adolescentes lo mismo: "Los dos moros de la clase han estrenado a casi todas. A nosotros ni nos miran. Nosotros a ellas tampoco".