Para gustos colores pero, si las fotos son reales. ¿Cómo puede alguien decir que es bonita? No es fea, pero es normalita sin más. No habría motivo para presumir ni aún ligándosela en una disco (que no sé si todavía existen). En el mundo puteril el mercado no es eficiente por su opacidad. No es un tema que se trate habitualmente y por ello no es fácil hacerse idea del mercado. A mí me pasó en mi juventud. No había internet. Los anuncios de los periódicos no daban demasiadas pistas. Eran sólo palabras. Sí que llegabas a comprender que exhuberante quería decir que no esperases una chica delgada, pero poco más. Las experiencias (las mías al menos) no fueron gran cosa. Hasta que no me atreví a ir a un club de carretera, que rehuía por discreción, no me di cuenta que había un mundo mucho mejor y además sin filtros. Podías ver a la mujer y subir o no sabiendo, al menos, su aspecto físico. La implicación siempre era una cuestión de suerte. Mientras los clubes mantuvieron los estándares, pocas veces fui a pisos y en las que fui, vi que el nivel físico de las mujeres era mucho menor. En un club la competencia era feroz. La que no era tan bella, solía compensarlo con un mejor servicio. A los pisos vas y es raro que te vayas, sin más, salvo que sean horrorosas. Ahora tenemos mayor información por internet pero no ha cambiado tanto la cosa. Las fotos están tan retocadas que casi no mejoran los antiguos anuncios clasificados. Los veteranos se han retirado o, directamente, muerto y no hay testigos para decir que Zaragoza no se rinde y que las mujeres que ejercen la prostitución actualmente no están buenas.
Feliz día de los difuntos, apropiado para la prostitución que está moribunda.