Elhombre
Forero del todo a cien
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- 22 Feb 2007
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Soy tímido. O lo que la mayoría de la gente suele considerar tímido, tengo los cojones hinchados de que me lo digan, sobre todo las tías. Es curioso. Nunca he tenido miedo a hablar en público, incluso diría que se me da bastante bien. Yo nunca me he sentido a mi mismo como tímido, creo que hablo lo necesario, lo normal; son los otros los raros, los que llenan conversaciones y conversaciones de gilipolleces sin ningun sentido. Esto último lo percibo especialmente a la hora de ligar.
Triunfar con una desconocida me parece algo imposible, nunca he ligado de noche, siempre me las he arreglado pidiendo citas a chicas que conocía de cursos, amigas de amigas, lo que fuera, dedicando mucho tiempo y esfuerzo. Al revés si ha ocurrido, entrarme una chica a mí. Soy moderadamente atractivo, he estado con chicas guapas, pero me jode la sensación de que nunca controlo la situación, mientras que hay otros que si lo hacen, o eso parece.
Tener labia lo llaman. Verborrea inmunda digo yo, chatarra verbal. A veces pienso que no existe, que los tios guapos creen que es lo tienen pero no existe y que la sociedad fomenta el mito para que los feos crean que tienen las mismas oportunidades que los demás.
¿Qué se le dice a una chica que no conoces de nada de madrugada? Simplemente presentarse, no, que es muy soso. Eso me dijo una, a mí a unos amigos, es que sois muy sosos, ¿y que hago puta? ¿Te bailo una jota? Algo gracioso, dice la gente. Lo intento, solo me salen torrentadas que no sirven para nada. Yo puedo hablar de infinidad de temas, pero a esas horas no se puede hablar de nada minimante complicado, y antes hay que superar el escollo de entablar conversación.
Por eso propongo intentar recordar (ya se que le alcohol es un obstáculo) las conversaciones que tenemos de noche con el mayor detalle posible. No para crear un manual gilipollas de ligue, lleno de frases mágicas que sean la llave que nos abra todos los pares de piernas, sino para intentar mejorar, dentro de lo posible y sin expectativas desproporcionadas, de la única manera que existe en la vida, mediante el hábito y el entrenamiento.
Empiezo yo, aunque solo puedo aportar las experiencias contrarias, en las que practicamente ya esta todo hecho.
Me acodo en la barra para pedir una cerveza. Me he fijado por detrás en la tia que esta junto a mí pero no pretendía nada, al menos conscientemente.
-Ella: ¿Que tal es x país (cuyo nombre aparece en mi camiseta)?
-Yo (en ese momento locuaz y alegre al ver que me dan pie): de puta madre, bonito, las chicas guapas (más elaborado)
Prosigue la conversación, en la que rapidamente hay piropos bastante descarados hacia mi de ella, pronto correpondidos. Enhorabuena, hoy pillas.
En una barra libre, cuando se acaba la bebida.
-Ella: ¿Qué estas bebiendo?
Joder, pensé, que gorrona hija de puta. Pero no, lo que quería era hablar conmigo. Aqui fue mi raro, no recuerdo lo que me dijo pero sí el tono tontorron con intenciones más que evidentes. A los cinco minutos ya le estaba comiendo el morro. La tía estaba tan ciega, por cierto, que me pego unos bocados de espanto en los labios.
Ambas aperturas, especialmente la segunda, me parecen impracticables si no se apoyan en el contundente argumento de un par de tetas, sobre todo la segunda. Lo se, después he intentado las dos con nulo resultado.
Triunfar con una desconocida me parece algo imposible, nunca he ligado de noche, siempre me las he arreglado pidiendo citas a chicas que conocía de cursos, amigas de amigas, lo que fuera, dedicando mucho tiempo y esfuerzo. Al revés si ha ocurrido, entrarme una chica a mí. Soy moderadamente atractivo, he estado con chicas guapas, pero me jode la sensación de que nunca controlo la situación, mientras que hay otros que si lo hacen, o eso parece.
Tener labia lo llaman. Verborrea inmunda digo yo, chatarra verbal. A veces pienso que no existe, que los tios guapos creen que es lo tienen pero no existe y que la sociedad fomenta el mito para que los feos crean que tienen las mismas oportunidades que los demás.
¿Qué se le dice a una chica que no conoces de nada de madrugada? Simplemente presentarse, no, que es muy soso. Eso me dijo una, a mí a unos amigos, es que sois muy sosos, ¿y que hago puta? ¿Te bailo una jota? Algo gracioso, dice la gente. Lo intento, solo me salen torrentadas que no sirven para nada. Yo puedo hablar de infinidad de temas, pero a esas horas no se puede hablar de nada minimante complicado, y antes hay que superar el escollo de entablar conversación.
Por eso propongo intentar recordar (ya se que le alcohol es un obstáculo) las conversaciones que tenemos de noche con el mayor detalle posible. No para crear un manual gilipollas de ligue, lleno de frases mágicas que sean la llave que nos abra todos los pares de piernas, sino para intentar mejorar, dentro de lo posible y sin expectativas desproporcionadas, de la única manera que existe en la vida, mediante el hábito y el entrenamiento.
Empiezo yo, aunque solo puedo aportar las experiencias contrarias, en las que practicamente ya esta todo hecho.
Me acodo en la barra para pedir una cerveza. Me he fijado por detrás en la tia que esta junto a mí pero no pretendía nada, al menos conscientemente.
-Ella: ¿Que tal es x país (cuyo nombre aparece en mi camiseta)?
-Yo (en ese momento locuaz y alegre al ver que me dan pie): de puta madre, bonito, las chicas guapas (más elaborado)
Prosigue la conversación, en la que rapidamente hay piropos bastante descarados hacia mi de ella, pronto correpondidos. Enhorabuena, hoy pillas.
En una barra libre, cuando se acaba la bebida.
-Ella: ¿Qué estas bebiendo?
Joder, pensé, que gorrona hija de puta. Pero no, lo que quería era hablar conmigo. Aqui fue mi raro, no recuerdo lo que me dijo pero sí el tono tontorron con intenciones más que evidentes. A los cinco minutos ya le estaba comiendo el morro. La tía estaba tan ciega, por cierto, que me pego unos bocados de espanto en los labios.
Ambas aperturas, especialmente la segunda, me parecen impracticables si no se apoyan en el contundente argumento de un par de tetas, sobre todo la segunda. Lo se, después he intentado las dos con nulo resultado.
Freak
Veterano
Clásico
), bien afeitadito y con un par de años de gimnasio, triunfa. Digo más: hasta se le acerca ella. Hace pocas semanas vi un ejemplo muy claro, ahí en plan estudio sociológico humano.
sino de 
