Más en concreto, cada vez que escucho we are the champions, me viene la desesperación, porque cojones es el himno del Mandril.
Es cierto que hay una recua de canciones, que sin ser "malas", vomitivas o que no te taladren la trompa de Eustaquio con simplemente sonar, pero las asociamos a algo que rechazamos y no podemos ni oirlas.
Yo le cogí tirria a "Nothing else matters" desde que la putilla aquella la cantó con el piano, el "We are the champions" también me da fatiguita y otra canción futbolera que me gustaba y me han ARREBATADO es el LOLOROLOLOLOOOOLOOOO de white stripes.
Compartid vuestras neuras, oh chusma.