1984 reload
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- 29 May 2009
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Amijos floreros, me dirijo a vosotros animándoos a opinar sobre Facebook o como meterte un peloto en casa por voluntad propia.
Recientemente en un ataque de attentionwhorismo afirme que era un Milhouse de la vida. Mentí o mejor dicho exagere: al igual que millones de zombis tengo una cuenta en Fleishbook donde comparto chorradas y afotos, tanto con amiguitos y conocidos como con gente que no conozco de nada pero que agrego con la esperanza de conocer a alguna moza dispuesta dejarse meter la morcilla que de eso se trata el juego aunque no lo queramos admitir.
La cosa no revestiría peligro, más allá de entrar cocido los sábados y escribir idioteces si no fuera por lo siguiente: ¿No estamos dando excesiva información de nosotros mismos al gobierno? Colgamos nuestras fotos, saben que paginas Web visitamos y que ideología tenemos, saben si apoyamos a USAIsrael o a los moritos, saben si estamos “indignados” o si calificamos a los indignados de perroflautas, saben si somos partidarios de la invasión o si despotricamos contra ella en webs filonancis como esta…
En la novela 1984 las telepantallas eran obligatorias y todos estaban vigilados en todo momento por el estado, en nuestra democracia no ha sido necesario obligarnos.
El gran hermano habría flipado con los móviles y su sistema de localización por GPS: al pobre Winston no le hubiese sido posible deambular por los barrios de proles londinenses.
Recientemente en un ataque de attentionwhorismo afirme que era un Milhouse de la vida. Mentí o mejor dicho exagere: al igual que millones de zombis tengo una cuenta en Fleishbook donde comparto chorradas y afotos, tanto con amiguitos y conocidos como con gente que no conozco de nada pero que agrego con la esperanza de conocer a alguna moza dispuesta dejarse meter la morcilla que de eso se trata el juego aunque no lo queramos admitir.
La cosa no revestiría peligro, más allá de entrar cocido los sábados y escribir idioteces si no fuera por lo siguiente: ¿No estamos dando excesiva información de nosotros mismos al gobierno? Colgamos nuestras fotos, saben que paginas Web visitamos y que ideología tenemos, saben si apoyamos a USAIsrael o a los moritos, saben si estamos “indignados” o si calificamos a los indignados de perroflautas, saben si somos partidarios de la invasión o si despotricamos contra ella en webs filonancis como esta…
En la novela 1984 las telepantallas eran obligatorias y todos estaban vigilados en todo momento por el estado, en nuestra democracia no ha sido necesario obligarnos.
El gran hermano habría flipado con los móviles y su sistema de localización por GPS: al pobre Winston no le hubiese sido posible deambular por los barrios de proles londinenses.