Fascinante historia la de los Templarios, cuya orden acabó siendo un contra-poder dentro de los estados e Iglesia, y su acumulación de fortuna objeto de codicia por parte de varios reyes que precipitaron su caída.
Junto a la ciudad de la Coruña, hay un pequeño núcleo perteneciente a uno de los ayuntamientos que conforman su comarca, cuya zona más próxima constituye el cinturón de pequeños núcleos "dormitorio" de la ciudad, cuyo término es realmente pequeño (33 km2).
Uno de los núcleos lleva por nombre, El Burgo, y junto a este hay otro denominado "El Temple", que pertenece a otro ayuntamiento.
"
Fue asentamiento templario, pues aquí tenía su castillo fortaleza esa orden de caballería. De la primitiva bailía sólo se conserva la iglesia, el puente del s. XIV y algunos topónimos como “Costa da Tapia”. Otros elementos de relevancia son el “puente nuevo” y el Paraguas, ambos construidos a finales de la década de 1940."
Algo de historia:
"Durante las fiestas de Pascua de 1146 el abad Bernardo de Claraval exhorta a la Segunda Cruzada apoyado por una bula del Papa Eugenio III. A esta llamada responden 150.000 cruzados que partirán hacia Jerusalem. Los germanos al mando de Conrado III salen de Regensburgo y llegan a Palestina por Hungría y Bulgaria.
Los franceses dirigidos por Luis VII parten de Metz y siguen también la ruta por tierra.
A su vez, el 19 de mayo de 1147 un ejército de Cruzados compuesto por ingleses, alemanes y flamencos, embarcados en unas 200 naves, partieron del puerto de Dartmouth hacia Tierra Santa.
Por causa de un fuerte temporal la flota se ve obligada a refugiarse en la ría de Noia, donde descansaron, hicieron acopio de víveres, repararon sus naves y visitaron la tumba del Apóstol Santiago el 8 de junio de 1147, en que celebraron la fiesta de Pentecostés.
Este ejército en apoyo de Alonso Enriquez conquistaría Lisboa en 1149 con la ayuda de Templarios portugueses.
En la preparación de esta Segunda Cruzada, el conde Don Fernando Pérez de Traba tuvo ocasión de conocer a San Bernardo, por el cual sentía gran admiración y de este conocimiento surge el apoyo de dicho conde a los hermanos del Císter y a la Orden del Temple.
Probablemente Don Fernando junto a su hermano Bermudo y a su primo Don Menendo Rodríguez aprovechasen la llegada de la flota a la ría de Noia para sumarse a ella y posiblemente fuera la misma que al mando del Almirante Simon Dover, fondeara previamente en la ría de Viveiro.
La expedición terminaría en un rotundo fracaso, de la cual el Conde regresaría en el año 1148, fecha que coincide con la aparición en Galicia de diversos documentos que llevan su firma.
Hacia el año 1153 los Templarios restablecerían el orden en la zona, la cual controlaban mediante la fortaleza de Gaza. Por estas fechas el Conde realizaría su segundo viaje a Jerusalén, tal como se cita en un documento del 1º de mayo en Palas de Rei, en el que Don Fernando hace donación al monasterio de Sobrado y firma como "Comes Fernandus secundo Jerosolyman perrexi", debiendo regresar a mediados de 1154.
De este viaje, según Antonio López Ferreiro, el Conde de Traba pudo traer la hidria de pórfido que se conserva en la Iglesia de Santa María de Cambre, de la cual el Cardenal Jerónimo del Hoyo decía que Cristo había hecho el milagro de las bodas de Canaá y que otra tradición afirma que fueron los caballeros Templarios quienes trajeron el ánfora de Palestina en la segunda Cruzada depositandola en la Iglesia de Santa María del Temple, situada a dos kilómetros de distancia de la de Cambre, a la cual llegaría una vez disuelta la Orden en el siglo XIV.
En Galicia el establecimiento de los templarios está ligado directamente con la familia Froilaz-Traba pues ellos dominaban todo el territorio y donaban tanto al Císter como al las órdenes de caballería, así es que la principal encomienda de Coruña, Burgo de Faro,la impulsó el conde Fernando Perez de Traba y después se produce la expansión y en Portugal lo hace Doña Teresa también de la misma familia,una vez que se autoproclama reina en 1127. Respecto a la hidria, con el basamento nuevo mide aproximadamente 1,5 mts de alto y es de piedra caliza, aragonito y yeso, similar a alabastro.
En el bordillo dice IDRIE IHLM (Idria Jerusalén).
Tanto por su historia, como por lo bello del templo y de todos sus elementos tanto interiores como exteriores, se trata de un lugar digno de conocer y que recomiendo a todo el mundo que visite la Coruña o alrededores.