Parece mentira que haya gente que todavía crea en los Reyes Magos cuando todo el mundo sabe que son una sucursal más del entrañable y sí real Ratoncito Pérez.
¿En qué cabeza cabe que tres abuelos vengan en camello desde Oriente Medio a traer regalitos para los niños españoles...? ya suficiente tendrían con la Intifada palestino-israelí como para desplazarse miles de kilómetros ensillados entre las jorobas de un lentísimo cuadrúpedo a colmar los deseos de chavalitos extranjeros con dinero de sobra para que se los compren sus propios viejos. Y ya ni falta hace comentar el caso de Baltasar, un REY moreno a lomos de un camello mientras sus pajes de raza blanca hacen ese mismo camino a patita y portando bolsas descomunales repletas de paquetes del Corte Inglés... eso no me casa con la realidad mundanal...
El Ratoncito Pérez es mucho más español y, como el espabilao gallego Amancio Ortega que regenta los Zara y Espringfíl, comenzó dejando billetes de veinte duros bajo la almohada a cambio de una muela de leche, y ha acabado prosperando y regentando todo un imperio mercantil con miles de colaboradores como es Reyes Magos Inc.. Igualico igualico que los componentes de La Trinca. Que trabaje Rita, los dineros para mí.