FlorianSotoPeña
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- 16 Ago 2009
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Tengo una historia que contar, hamijos, quizás la del personaje más ruin e idiota que he conocido en mi vida, y eso que es un buen tipo, de los que puedes confiar en ellos y te harían los favores que hiciesen falta.
La historia es la siguiente: Este hamijo ha entrado ya en una edad madura, bastante más mayor que yo, separado y con varios hijos. La cuestión es que el muy mongo era el típico nerd que desde muy joven ahuyentaba al género femenino, las mujeres huían a su paso por su fealdad física, la cual venía aderezada por una incipiente joroba que crecía día a día haciendo sombra sobre su nuca. De hecho consiguió encontrar a su mujer en una agencia matrimonial, la cual era una tullida de cuidado, además de estar bastante mal de la cabeza. La cuestión es que con los años el matrimonio prosperó y dio sus frutos en forma de varios hijos, todos ellos normales a diferencia de los progenitores. Él era el típico calzonazos que hacía lo que su mujer decía sin rechistar ni oponer resistencia alguna a las decisiones de ésta última. Finalmente ella decidió abandonarlo poniendo una serie de excusas ridículas, cuando en realidad es que estaba ya liada con otro maromo, el cual era otro pobre diablo con un sobrante de cromosomas considerable.
La cuestión es que tras la traumática separación el hamijo en cuestión acaba en la puta calle, con un trabajo de mierda, sin sus hijos y bastante dañado moral y psicológicamente. Con toda esta situación tuvo que regresar a casa de su madre. Pero a partir de ese momento, en lugar de disfrutar de su soltería recién adquirida y de todas las ventajas que ello conlleva decidió que era mejor intentar ligar con feisbuk, chats de la internet y a saliendo por las noches a pubs y discotecas. A partir de ese momento se convirtió, según él, en una especie de galán a lo Alfredo Landa que tenía pretendientas por todas partes. Cada semana, según él, tenía una cita con una distinta, luego descubrí que él interpretaba que cada mujer que le hiciese un poco de caso y hablase con él, según su criterio estaba enamorada por él, e incluso decía que tenía una lista de 4 o 5 mujeres para elegir. Una vez me dijo que en realidad podría seguir riéndose de todas ellas una buena temporada hasta que él, cual macho alfa que era, eligiese tranquilamente cual de aquellas ninfas se iba a convertir en la benefactora de su lefa.
La realidad de toda historia era esa, un mongo de edad madura haciendo el ridículo con tías de 25 años en antros de ocio nocturno, y alguna de ellas salió alguna vez a tomar algo con él, pero sin ningún compromiso, incluso a visitar algún museo o exposición, y según él aquello ya era una relación. Además todo eran, según él, tías buenísimas, despampanantes. La realidad es que yo vi a una de esas, media al menos 1,80, con estética gótica y cara de tarada, mientras que él es medirá sobre el 1,75, regordete, contrahecho y con cara de nerd. No pegaban ni por asomo, de hecho cualquiera con dos dedos de frente veía que la tipa en cuestión no tenía ningún interés erótico-festivo en él. La cuestión es que el hamijo es bastante prepotente en algunos aspectos de su vida, no solamente presumía de ser un seductor sino también de tener una inteligencia superior, todo ello a pesar de no haber superado los estudios básicos, al parecer era un incomprendido y no supieron tratar su caso en el colegio de curas en el que estuvo interno. Todo bastante risión.
Lo mejor de todo vino hace unos pocos meses cuando una gorda asquerosa, con cara de retrasada (como él) le tiró los trastos por el facebook y le pidió tener una relación con él, y esta lo hizo de verdad. La tipa en cuestión no ha alcanzado la treintena, es un auténtico cachalote, su obesidad mórbida es tal que tiene una barriga en plan cervecero descolgada que le llega casi hasta las rodillas, piernas cortísimas, y un hedor corporal bastante desagradable. Además de eso cuando hemos estado reunidos con más hamijos o conocidos la tipa tiene una boca de cloaca impresionante, hablando de obscenidades, pollas, follar etc. En cambio él no ve defecto alguno en ella, es pura perfección, solamente está un poco gorda, pero es que es "una crack", dice que ella también tiene una inteligencia superior, como él, y luego me entero de que tiene un alto porcentaje de discapacidad, me imagino que es mental.
Para finalizar, y lo que es ya la risión más absoluta, es que resulta que esa gordaca repugnante le ha pedido que se haga una vasectomía, y él ha aceptado mansamente, como buen calzonazos, y eso que hace apenas dos meses que se conocen, y para colmo no viven juntos, sino que la gorda vive con su supuesto ex-marido, al que no echa a la calle por pena. Unido a esto tenemos el que a este mongo le ha tocado recientemente un premio de la lotería, de la once creo, no ha sido nada del otro mundo, pero una cantidad de dinero más que decente, y ella está utilizándolo a él para dilapidar un dinero que bien podría usar para beneficio de sus hijos.
La historia es tan penosa y ridícula, obviando detalles, que las contadas acerca de un servidor son una anécdota. Un tipo que no se come un rosco, medio idiota, muy buena persona eso sí, que es víctima del engaño de cualquier mujer, incluso por orcos como el que he descrito más arriba y del que podría contar un buen número de cosas ridículas. ¿Conocéis a alguien tan ridículo como el caso descrito? Lo peor de todo es que no quiero decirle nada para que no se pelee conmigo, ni crea que el resto de gente que lo conocemos y piensan como yo le tenemos envidia por el "mujerón" que ha conquistado.
La historia es la siguiente: Este hamijo ha entrado ya en una edad madura, bastante más mayor que yo, separado y con varios hijos. La cuestión es que el muy mongo era el típico nerd que desde muy joven ahuyentaba al género femenino, las mujeres huían a su paso por su fealdad física, la cual venía aderezada por una incipiente joroba que crecía día a día haciendo sombra sobre su nuca. De hecho consiguió encontrar a su mujer en una agencia matrimonial, la cual era una tullida de cuidado, además de estar bastante mal de la cabeza. La cuestión es que con los años el matrimonio prosperó y dio sus frutos en forma de varios hijos, todos ellos normales a diferencia de los progenitores. Él era el típico calzonazos que hacía lo que su mujer decía sin rechistar ni oponer resistencia alguna a las decisiones de ésta última. Finalmente ella decidió abandonarlo poniendo una serie de excusas ridículas, cuando en realidad es que estaba ya liada con otro maromo, el cual era otro pobre diablo con un sobrante de cromosomas considerable.
La cuestión es que tras la traumática separación el hamijo en cuestión acaba en la puta calle, con un trabajo de mierda, sin sus hijos y bastante dañado moral y psicológicamente. Con toda esta situación tuvo que regresar a casa de su madre. Pero a partir de ese momento, en lugar de disfrutar de su soltería recién adquirida y de todas las ventajas que ello conlleva decidió que era mejor intentar ligar con feisbuk, chats de la internet y a saliendo por las noches a pubs y discotecas. A partir de ese momento se convirtió, según él, en una especie de galán a lo Alfredo Landa que tenía pretendientas por todas partes. Cada semana, según él, tenía una cita con una distinta, luego descubrí que él interpretaba que cada mujer que le hiciese un poco de caso y hablase con él, según su criterio estaba enamorada por él, e incluso decía que tenía una lista de 4 o 5 mujeres para elegir. Una vez me dijo que en realidad podría seguir riéndose de todas ellas una buena temporada hasta que él, cual macho alfa que era, eligiese tranquilamente cual de aquellas ninfas se iba a convertir en la benefactora de su lefa.
La realidad de toda historia era esa, un mongo de edad madura haciendo el ridículo con tías de 25 años en antros de ocio nocturno, y alguna de ellas salió alguna vez a tomar algo con él, pero sin ningún compromiso, incluso a visitar algún museo o exposición, y según él aquello ya era una relación. Además todo eran, según él, tías buenísimas, despampanantes. La realidad es que yo vi a una de esas, media al menos 1,80, con estética gótica y cara de tarada, mientras que él es medirá sobre el 1,75, regordete, contrahecho y con cara de nerd. No pegaban ni por asomo, de hecho cualquiera con dos dedos de frente veía que la tipa en cuestión no tenía ningún interés erótico-festivo en él. La cuestión es que el hamijo es bastante prepotente en algunos aspectos de su vida, no solamente presumía de ser un seductor sino también de tener una inteligencia superior, todo ello a pesar de no haber superado los estudios básicos, al parecer era un incomprendido y no supieron tratar su caso en el colegio de curas en el que estuvo interno. Todo bastante risión.
Lo mejor de todo vino hace unos pocos meses cuando una gorda asquerosa, con cara de retrasada (como él) le tiró los trastos por el facebook y le pidió tener una relación con él, y esta lo hizo de verdad. La tipa en cuestión no ha alcanzado la treintena, es un auténtico cachalote, su obesidad mórbida es tal que tiene una barriga en plan cervecero descolgada que le llega casi hasta las rodillas, piernas cortísimas, y un hedor corporal bastante desagradable. Además de eso cuando hemos estado reunidos con más hamijos o conocidos la tipa tiene una boca de cloaca impresionante, hablando de obscenidades, pollas, follar etc. En cambio él no ve defecto alguno en ella, es pura perfección, solamente está un poco gorda, pero es que es "una crack", dice que ella también tiene una inteligencia superior, como él, y luego me entero de que tiene un alto porcentaje de discapacidad, me imagino que es mental.
Para finalizar, y lo que es ya la risión más absoluta, es que resulta que esa gordaca repugnante le ha pedido que se haga una vasectomía, y él ha aceptado mansamente, como buen calzonazos, y eso que hace apenas dos meses que se conocen, y para colmo no viven juntos, sino que la gorda vive con su supuesto ex-marido, al que no echa a la calle por pena. Unido a esto tenemos el que a este mongo le ha tocado recientemente un premio de la lotería, de la once creo, no ha sido nada del otro mundo, pero una cantidad de dinero más que decente, y ella está utilizándolo a él para dilapidar un dinero que bien podría usar para beneficio de sus hijos.
La historia es tan penosa y ridícula, obviando detalles, que las contadas acerca de un servidor son una anécdota. Un tipo que no se come un rosco, medio idiota, muy buena persona eso sí, que es víctima del engaño de cualquier mujer, incluso por orcos como el que he descrito más arriba y del que podría contar un buen número de cosas ridículas. ¿Conocéis a alguien tan ridículo como el caso descrito? Lo peor de todo es que no quiero decirle nada para que no se pelee conmigo, ni crea que el resto de gente que lo conocemos y piensan como yo le tenemos envidia por el "mujerón" que ha conquistado.
Freak
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121:121
Forero del todo a cien