Nacer hombres parece una cárcel de placeres. Hay quienes justifican el ir de putas como algo inmoral, ¿cómo va a ser inmoral si lo inmoral es lo que tenemos que aguantar los hombres para ligar? Partiendo de la base que nuestro estado anímico depende un poco de todo eso, y el irse de putas representa una solución tangible.
Si un hombre quiere ligar va a tener que ser rechazado 1, 2 ó más de 10 veces en muchos casos, hasta que al final alguna cae, pero va a tener que pasar las consecuentes depresiones y desmoralizaciones que un rechazo otorga. Ningún hombre escapa de los rechazos y a todos afecta en cierta medida. Ahora por culpa de internet hay un tira y arrastra, los hombres nos arrastramos cada vez más, y bajamos el nivel, para ligar hay que llevarse más rechazos porque ellas tienen el nivel muy alto.
Y como no me da la gana que me pase todo esto, que es completamente una tropelía que atenta contra derechos morales, que pase Dios la humillación de ser rechazado por gordas, algo sólo comparable a cuando me cagué en primero de E.G.B y toda la clase me señalaba con un dedo.
Así que quien no va de putas, es:
Subnormal.
Conformista.
Si lo hace por criterios morales el no querer ir de putas, es gilipollas por aceptar la inmoralidad de las pautas que hay que seguir para ligar, aceptar el tiempo perdido en emprender búsqueda de tías, y toda la mierda que hay que aguantar, por lo tanto es contradictorio si se justifica con ese argumento el no ir de putas.
Que lo aguante su puta madre.
Si un hombre quiere ligar va a tener que ser rechazado 1, 2 ó más de 10 veces en muchos casos, hasta que al final alguna cae, pero va a tener que pasar las consecuentes depresiones y desmoralizaciones que un rechazo otorga. Ningún hombre escapa de los rechazos y a todos afecta en cierta medida. Ahora por culpa de internet hay un tira y arrastra, los hombres nos arrastramos cada vez más, y bajamos el nivel, para ligar hay que llevarse más rechazos porque ellas tienen el nivel muy alto.
Y como no me da la gana que me pase todo esto, que es completamente una tropelía que atenta contra derechos morales, que pase Dios la humillación de ser rechazado por gordas, algo sólo comparable a cuando me cagué en primero de E.G.B y toda la clase me señalaba con un dedo.
Así que quien no va de putas, es:
Subnormal.
Conformista.
Si lo hace por criterios morales el no querer ir de putas, es gilipollas por aceptar la inmoralidad de las pautas que hay que seguir para ligar, aceptar el tiempo perdido en emprender búsqueda de tías, y toda la mierda que hay que aguantar, por lo tanto es contradictorio si se justifica con ese argumento el no ir de putas.
Que lo aguante su puta madre.