Objetivo: La Casa Blanca (2013) - FilmAffinity
Sinopsis: Tras un accidente en el que sólo consigue salvar la vida del Presidente Asher (Aaron Eckhart), el agente del Servicio Secreto Mike Banning (Gerard Butler) decide dejar su puesto para trabajar en el Departamento del Tesoro. Pero, cuando un comando norcoreano liderado por Kang (Rick Yune) ataca la Casa Blanca y toma como rehenes al Presidente y a su equipo, Banning se verá obligado a entrar de nuevo en acción.
¡Pero coño cómo ha pasado inadvertida esta película! La mejor peli de acción pura y dura del año, y en un tiempo también. Apenas 5 minutos y ya está todo trazado y en marcha, personajes encima de la mesa, acción a cascoporro, Ashley Judd luciendo bótox un ratico y hala, a tiros, que se hace tarde.
Gerard Butler lo clava como Terminator del servicio secreto, yo no se a dónde pensaban que iban los ahora malos oficiales del cine yanky, los coreanos. Pero el que lo hace de puta madre es Antoine Fuqua, el director de Training Day, que le imprime a la peli un ritmo que va tan a toda hostia que hace que te lo pases como un enano y disfrutes hasta de las paridas que tiene, amén de unas escenas de acción muy bien rodadas, en este sentido el asalto a la Casa Blanca inicial es cojonudo, a pesar de la evidente y risible actitud de los guardias, que se ofrecen como blancos móviles para la práctica del tiro de los coreanos.
De verdad, es un puto despelote la peli, pero consciente de ello y ser lo suficientemente seria como para no resultar ridícula, con lo cual el resultado es redondo y espectacular, que es de lo que se trata. Tras el comienzo, que puede sonarte fácilmente a miles de películas (a mí me recordó en cierta forma al inicio de Máximo Riesgo en cuanto a lo que les pasa a los personajes) en seguida uno tiene la sensación de que este guión fue desechado como La Jungla 5, porque si quitas a Butler y colocas a Willis y alteras un par de cosas de la historia hubiera sido una Jungla cojonuda, infinitamente mejor que ese mierdón que rodaron en Moscú.
Entre otras virtudes de la peli está el que no pierde tiempo ni esfuerzo en que el sentimiento de culpa del protagonista sea significativo, apenas hay un "buah, qué putada fue aquello" pero vamos que en seguida le importa todo tres cojones y se lía a matar charlys cabrones, y, posiblemente el mayor acierto del film y en cierta forma una sorpresa, que el guión quita de en medio, no diré cómo, al niño repelente echando hostias para no andar jodiendo escenas y estorbar el lucimiento del personaje principal y la acción en general. En otras películas hubiéramos tenido que aguantar al enano con alguna escena ridícula, aquí no, aquí a casita que ha salido Casimiro.
Por último, aparte de Butler, que está cojonudo y reparte estopa que da gusto (para enmarcar la "tortura" a los dos chinorris a los que atrapa y ata a unas sillas), andan por ahí Morgan Freeman con el piloto automático puesto, Aaron Eckhardt haciendo de presidente guapetón (y boxeador, :121), Rick Yune (el de los cachos de diamante en la cara de Muere otro día), Dylan McDermott pasándoselo en grande con la misma jeta que sacaba en Dark Blue, el tío de Paparazzi, y Angela Basset, que debe haber hecho un trato con el diablo o algo así porque está igual que hace 20 años la hijaputa.
Enlacitos para uso y disfrute del personal:
Frikazo
Muerto por dentro