Werther
Veterano
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No entiendo a la gente que dice que es imposible permanecer célibe hasta el matrimonio. Que presente dificultades, no lo dudo, pero se pueden superar. El tiempo todo lo mitiga. Hay que ser pacientes y saber que es algo bueno y digno, ya que “todo el que comete pecado es esclavo del pecado” y que “Todo el que bebe de esta agua volverá a tener sed: en cambio, el que beba del agua que yo quiero darle, nunca más volverá a tener sed. Porque el agua que yo quiero darle se convertirá en su interior en un manantial capaz de dar vida eterna”
Pocas cosas hay tan bellas como llegar al matrimonio y descubrir entre ambos cónyuges un mundo entero de cosas nuevas. Aquí todo está envuelto de la magia de la pureza y del misterio de hacer algo muy importante por primera vez, a lo que se le une el sentir que se hace con alguien a quien amas y del que esperas todo en la vida. Son dos personas que guardan un tesoro muy precioso, el cual han protegido a lo largo de su vida porque quieren compartirlo únicamente con el ser que realmente lo merezca, que es el ser amado. Lo contrario es ofrecer mucho y recibir bien poco, das tu tesoro y no recibes nada a cambio, y una vez perdido el mismo ya nunca más se vuelve a recuperar ¡Con lo importante que es la inocencia para estas cosas! La inocencia, esa luz que da una belleza especial a los ojos que la poseen.
El verdadero amor no es otra cosa que la unión entre hombre y mujer, convirtiéndose ambos en una sola persona, de modo que ya no son dos personas, sino una sola. Y, esta unión, cunado es fruto del sentimiento de ambos es indestructible. Merece la pena esperar hasta que este gran acontecimiento se produzca, guardar nuestro preciado tesoro y tener esperanza en que tarde o temprano se lo ofreceremos a la persona que lo merezca y que una vez recibido no lo abandonará jamás.
Todo lo bueno, noble y sincero cuesta sudor y pesares, pero la recompensa es muy grande. Con humildad todo se puede.
Un saludo.
Pocas cosas hay tan bellas como llegar al matrimonio y descubrir entre ambos cónyuges un mundo entero de cosas nuevas. Aquí todo está envuelto de la magia de la pureza y del misterio de hacer algo muy importante por primera vez, a lo que se le une el sentir que se hace con alguien a quien amas y del que esperas todo en la vida. Son dos personas que guardan un tesoro muy precioso, el cual han protegido a lo largo de su vida porque quieren compartirlo únicamente con el ser que realmente lo merezca, que es el ser amado. Lo contrario es ofrecer mucho y recibir bien poco, das tu tesoro y no recibes nada a cambio, y una vez perdido el mismo ya nunca más se vuelve a recuperar ¡Con lo importante que es la inocencia para estas cosas! La inocencia, esa luz que da una belleza especial a los ojos que la poseen.
El verdadero amor no es otra cosa que la unión entre hombre y mujer, convirtiéndose ambos en una sola persona, de modo que ya no son dos personas, sino una sola. Y, esta unión, cunado es fruto del sentimiento de ambos es indestructible. Merece la pena esperar hasta que este gran acontecimiento se produzca, guardar nuestro preciado tesoro y tener esperanza en que tarde o temprano se lo ofreceremos a la persona que lo merezca y que una vez recibido no lo abandonará jamás.
Todo lo bueno, noble y sincero cuesta sudor y pesares, pero la recompensa es muy grande. Con humildad todo se puede.
Un saludo.