El socio de Diego
Moderador
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El hambre que pasaba la desgraciada @Niandra para aceptar el bocata de un putero charnego...
Demencial que alguien se crea la pose de víctima del seboso fláccido estafador, quien ya publicó su rechazo al movimiento #metoo contra los viciosos abusadores de posición de autoridad para obtener sexo de mujeres arribistas a cambio de ascensos laborales. Las imputaciones judiciales son achacadas a ser rico y famoso, "van a por mí porque me pueden sacar dinero de multas..."
Un pervertido proxeneta corruptor de menores que en su trayectoria delictiva captaba a adolescentes con alteraciones de la personalidad, diagnósticos psiquiátricos de patologías mentales, algunas toxicómanas, chicas sin rumbo en situación de indigencia al ser repudiadas de su familia desestructurada. El modus operandi de acogerlas en su guarida, ofrecer alojamiento y pensión incluida, "pueden quedarse el tiempo que necesiten... hasta la patada de la buena suerte."
Inicialmente no coaccionarlas a la prostitución, acaso tener sexo con el viejo gurú tras obtener su confianza, ofrecer una mísera cantidad a cambio de grabar de forma definitiva su imagen sexual en su juventud. Las supuestas "novias" del proxeneta se convierten en cómplices criminales para permanecer en la pocilga, tener habitación en su antro mugriento donde acuden decadentes puteros a orgías vomitivas, gentuza acabada que costea el burdel, sufragan la secta empachados de gachas.
Demencial que alguien se crea la pose de víctima del seboso fláccido estafador, quien ya publicó su rechazo al movimiento #metoo contra los viciosos abusadores de posición de autoridad para obtener sexo de mujeres arribistas a cambio de ascensos laborales. Las imputaciones judiciales son achacadas a ser rico y famoso, "van a por mí porque me pueden sacar dinero de multas..."
Un pervertido proxeneta corruptor de menores que en su trayectoria delictiva captaba a adolescentes con alteraciones de la personalidad, diagnósticos psiquiátricos de patologías mentales, algunas toxicómanas, chicas sin rumbo en situación de indigencia al ser repudiadas de su familia desestructurada. El modus operandi de acogerlas en su guarida, ofrecer alojamiento y pensión incluida, "pueden quedarse el tiempo que necesiten... hasta la patada de la buena suerte."
Inicialmente no coaccionarlas a la prostitución, acaso tener sexo con el viejo gurú tras obtener su confianza, ofrecer una mísera cantidad a cambio de grabar de forma definitiva su imagen sexual en su juventud. Las supuestas "novias" del proxeneta se convierten en cómplices criminales para permanecer en la pocilga, tener habitación en su antro mugriento donde acuden decadentes puteros a orgías vomitivas, gentuza acabada que costea el burdel, sufragan la secta empachados de gachas.