OSLO (AFP) - Un noruego encarcelado produjo durante varios días vino de grosella sin que nadie en la prisión se diera cuenta.
Las autoriades penitenciarias noruegas informaron este viernes de que finalmente habían capturado al clandestino viticultor.
"Nos hemos incautado de dos bidones de una capacidad total de 20 litros", declaró a AFP Arnt-Roger Hoeiby, responsable de la prisió de 'baja seguridad' de Ilseng.
En esta prisión están las personas condenadas a penas cortas, a menudo por conducir en estado de embriaguez.
El hombre recolectaba grosellas bajo las ventanas del antiguo despacho del director de la prisión.
Gracias a los presos que trabajaban en la cocina, preparaba el vino mezclando las frutas con agua, levadura y un poco de azúcar.
Desenmascarado tras contarle sus actividades en una carta a otro detenido de otra prisión, en la que la correspondencia es vigilada, el preso fue llevado a un establecimiento de alta seguridad.
Hagamos todos vino con lo que sea y enviemoselo en solidadridad con él
Las autoriades penitenciarias noruegas informaron este viernes de que finalmente habían capturado al clandestino viticultor.
"Nos hemos incautado de dos bidones de una capacidad total de 20 litros", declaró a AFP Arnt-Roger Hoeiby, responsable de la prisió de 'baja seguridad' de Ilseng.
En esta prisión están las personas condenadas a penas cortas, a menudo por conducir en estado de embriaguez.
El hombre recolectaba grosellas bajo las ventanas del antiguo despacho del director de la prisión.
Gracias a los presos que trabajaban en la cocina, preparaba el vino mezclando las frutas con agua, levadura y un poco de azúcar.
Desenmascarado tras contarle sus actividades en una carta a otro detenido de otra prisión, en la que la correspondencia es vigilada, el preso fue llevado a un establecimiento de alta seguridad.
Hagamos todos vino con lo que sea y enviemoselo en solidadridad con él