A mi lo que me quema no es que se haya comido alguna poya o le hayan dado placer a su agujero para satisfacer sus instintos de hembra y la necesidad que tienen de ser penetradas, lo que me toca realmente son los perroflautas que se hacen pajas pensando como una tía que no es puta y tampoco actriz porno pueda aparecer recibiendo carne por televisión.
Estamos hablando de una tía que podría ser vuestra amiga, vecina, compañera de trabajo y ale, un montón de pagafantas estarán delante del televisor imaginando como se follan a la robahierros por televisión. Pajearse con la idea no es malo, lo malo es estar mirando como otras tías reciben carne que no es la vuestra y ven como son satisfechos por machos y no por llorones de medio pelo que sueñan con algún día tirarse a la tía.
Yo este Lunes vere el programa en casa de una amiga, no me voy a ir a hacer una paja, le voy a comer la boca y luego a dejarla satisfecha, gracias a los pagafantas de turno, a los segundones por hacer que este programa tenga éxito, Samanta lo sabe y juega con ello. Se la puede llamar calientapollas, pero lo que si que es seguro es que alguno de los actores porno la ha satisfecho a base de bien y la ha sojuzgado como un verdadero hombre debe hacer con una mujer.