Si lo miras como lo que es, un concurso de popularidad, aún es hasta coherente. En sus últimas elecciones sacó más apoyo del que nadie se esperaba, puso la polla en la mesa de cristal. De ahí ha venido una carnicería caníbal porque entre los toris todos querían chupar de un bote que flotaba muy bien a pesar de la incompetencia, cepillarse a Boris y poner algún pelele que les debiera favores. La oposición ni está ni se le espera, no hay nadie competente que de verdad tenga nada que ganar por ponerse en primera línea de este desastre que todos cocinaron y nadie quiere firmar, así que si viene Boris y convoca elecciones, no es un disparate pensar que pueda ganar.