Cataluña ha comenzado este miércoles la vacunación masiva de presos en los centros penitenciarios. En esta fase, se administrará la vacuna de
AstraZeneca a los internos de entre 18 y 55 años, un colectivo que representa el 92% de la población reclusa, con 6.143 personas. El grupo minoritario de internos mayores de 80 años también comenzará a recibir la vacuna, en este caso la de
Pfizer.
La Generalitat ha señalado en un comunicado que "el plan de vacunación ha priorizado al colectivo de internos porque
comparten espacios de uso común, uno de los factores de riesgo de contagio".
Además, añaden que, aunque se realizan pruebas PCR cada vez que hay un nuevo ingreso, un permiso o un traslado para evitar que un positivo que venga del exterior propague el virus en el centro,
los internos están en contacto con los trabajadores que entran y salen diariamente, y con los familiares que los visitan.
Riesgo muy alto de que un positivo desencadene un brote
Y es que,
en un módulo, pueden convivir entre 80 y 150 personas, por lo que el peligro de que un solo positivo desencadene un brote es muy alto. De hecho, el módulo 4 del Centro Penitenciario de Quatre Camins está aislado por un brote de Covid-19, en el que se han detectado 78 positivos.
Ante este peligro,
la Generalitat ha priorizado a los presos de los nueve centros penitenciarios de régimen ordinario: Brians 1, Brians 2, Quatre Camins, Joves, Dones, Mas d’Enric, Ponent, Puig de les Basses y Lledoners.
Por otra parte,
hace un mes y medio ya comenzó la vacunación a los trabajadores de prisiones que están en contacto con los internos y el 80% de la plantilla ya ha sido vacunado.