THE SHOW MUST GO ON
Siempre que estamos cerca de volver a nuestra vida, hay algo que lo impide y nos obligan a volver a la casilla de salida. Parece que, en efecto, nunca volveremos a nuestar vida anterior. Siempre habrá algún motivo que lo impida. Triste y descorazonador. Somos ganado y hacen con nosotros lo que quieren.

Y nadie se cuestiona nada de lo que está pasando...
Y ya están todos, o casi todos los reinos de taifas como locos dando marcha atrás e imponiendo de nuevo restricciones a la hosteleria y al ocio nocturno.
Cataluña, por ejemplo, se cepilla el ocio nocturno en interiores hasta finales de julio. Y en el caso de eventos al aire libre, si son de más de 500 personas, te obligan a presentar una PCR negativa para acudir. Vamos, que allí se han cepillado la posibilidad de cualquier concierto o evento. Te sale la PCR tres veces más cara que la entrada el evento en sí mismo.
En otros sitios, pues, más de lo mismo. En algunos lados adelantan el horario de cierre de la hostelería a las 23:00. En otros imponen medidas de 'impacto', como adelantar el cierre del ocio nocturno de 3:00 a 2:00. Gran medida. Y, por desgracia, vuelven los cierres perimetrales. Ya se están aplicando en algunas localidades menores, porque el sátrapa de turno ha tenido el aval de la Justicia.
Y luego tenemos a Euskadi, donde no se toman medidas adicionales a las ya existentes, pero Urkullu tenía antonjo de hacer un nuevo decreto, y ahí que lo tenemos, nuevo decreto que prohíbe lo que ya estaba prohibido desde hace decenios: el botellón.
Luego tenemos a los más subormales, como la hija de puta de Sanidad de Castilla y León, del PP, por cierto, que pide, directamente, aplicar un toque de queda de 1 a 6. Desde Sanidad del Gobierno de España ya le han dicho que se olvide,
Otras comunidades, como Euskadi, piden ahora que reimponga de nuevo la obligación de llevar mascarillas en exteriores. Claro, hemos gozado de un mínimo de libertad, y de aire fresco, desde el 26 de junio, y ya parace que es demasiado para algunos, y quiern de nuevo ponermos el bozal en la boca. Desde Sanidad del Gobierno de España les han respondido que no se dará marcha atrás y que no se va a volver a imponer su uso. Veremos.
También quiero aprovechar para mencionar que no todos los políticos son igual de mierdosos, y que al menos aún queda alguno que habla desde la seriedad, sensatez y rigor, y que no se dedica a pedir la aplicación de medidas medievales (por enésima vez) como solución mágica a todo.
Hablo del responsable de Sanidad de Andalucía, que ha pedido que "hay que cambiar el chip" y que no debemos, en el contexto actual, seguir guiándonos por la IA de los contagios, sino que la referencia a partir de ahora para seguir el curso de la pandemia debería ser la presión asistencial en los hospitales. Que ese debería ser el punto de atención y no otro, porque los numero de contagios, en el contexto actual o futuro, no tienen el mismo signficado que podían tener en 2020 o a principios de año.
No creo que los medios estén muy de acuerdo con este señor, básicamente porque la brutal explosión del número de contagios no tiene traslación en cuanto a presión hospitalaria. Lo que vende, pues, es el número de contagios, válido para crear terror, alarma y drama. Las cifras hospitalarias, en cambio, no permiten eso.
He estado viendo los datos y si bien hay un mínimo repunte con respecto a hace una semana, todo se mantiene absolutamente estable:
A 6 de julio, la ocupación de camas por Covid-19 era del 2,37%. El 30 de junio era del 1,95%. El 20 de enero, por ejemplo, era del 19,95 %.
A 6 de julio, la ocupación de camas UCI por Covid-19 era del 6,74%. El 30 de junio era del 6,52%. El 20 de enero era del 35,02%.
A 6 de julio, el número de fallecidos por Covid-19 con fecha de defunción en los últimos 7 días era de 43 personas. El 20 de enero era de 1146.
Ahora os pongo este gráfico (Ministerio de Sanidad) de los fallecidos por Covid-19 en España desde el 1 de diciembre de 2020 hasta el 4 de julio de 2021:
Ver el archivos adjunto 88523
Como podéis ver, la situación ahora mismo en España es absolutamente terrorífica, sí.
Lo vengo diciendo desde hace mucho: da igual los datos sanitarios, siempre que estamos a punto de dar un paso definitivo hacia nuestra vida normal, "pasa algo" para tener que volver a empezar de nuevo.
Ahora, por desgracia, me quedan pocas dudas. Podremos gozar a ratos de mayor o menor libertad, pero, nuestra vida previa al 14 de marzo de 2020 ya no volverá. Siempre estaremos sometidos en mayor o menor medida a restricciones, porque siempre "habrá algo" que impida volver a gozar de plena libertad. A alguien le interesa que sea así, y muchos líderes autonómicos están encantados de gobernar a base de decretos y de tener al ganado totalmente controlado. Se les ve muy cómodos en esta situación.
De las consecuencias económicas-sociales de este nuevo no-verano que se nos avecina, siendo el turismo nuestra primera industria, ni hablo, ¿para qué?
Buenas tardes.