La sociedad sueca es, con diferencia, y seguida muy de cerca por otros países occidentales como Inglaterra, Francia o Alemania, la sociedad más deprimente del mundo. El único pueblo del mundo que ha aceptado voluntariamente su extinción y reemplazo étnico y racial en todo el planeta, seguida de cerca por los países mencionados. Agresiones de todo tipo, violaciones y asesinatos perpetrados contra la población nativa con la connivencia de su propio gobierno, ciudades tomadas por invasores moronegros como Malmo. Unas autoridades que se dedican a camuflar de manera sistemática todos estos casos y a insultar a la población nativa en cuanto se rebelan un poco contra la situación y se proclama como "el primer gobierno feminista de la historia", con muchos años de adoctrinamiento en las escuelas con las ideologías de género y la feminización del varón sueco. En fin, un desastre.
También podríamos hablar de otras sociedades tercermundistas como auténticos estercoleros, y no nos faltarían países en la lista, como en el caso de Haití, por ejemplo, que es un país de mierda incapaz de prosperar en ningún sentido y donde en lugar de cultivar la tierra consumen galletas de tierra, o bien cualquier país de su entorno, donde te pueden secuestrar y despiezar con más destreza que el rey del Cachopo. Y ya no hablemos de África con sus guerras tribales, sus enfermedades pandémicas o Sudáfrica, el antaño país más desarrollado de África, en tiempos del apartheid, convertido en un nido de SIDRA (literal) donde genocidian a los blancos a punta de machete. Pero bueno, estos países no pueden esperar otra cosa que miseria y putrefacción, siempre lo han sido y no les viene de grande. En cambio Suecia era un país con unos índices de calidad de vida y bienestar brutales, que gracias al multiculturalismo y su puta madre entre otros agentes externos, ha mandado a tomar por el culo.