snow
Freak
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- 13 Dic 2003
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Gloria tenia el pelo largo, rizado y rubio, los ojos azules y la voz más firme que hubieras podido escuchar en una chica de 13 años.
Era bonita como un angel y todos los chicos del colegio estaban locos por ella. Se habia incorporado ese año a mi clase y desde que puso un pie en el aula no pude dejar de mirarla, era fascinante, sin duda la persona más bella que yo hubiese visto de cerca jamás.
Por aquel entonces yo era "la niña rara de pelo largo que siempre va con su hermano el tio bueno" y ella, como contrapunto, se posicionó en "la chica más guapa del colegio". Hasta su nombre era perfecto; Gloria, su nombre era ella y no yo, "la del nombre raro"... Desde que la conocí ya no deseé otra cosa que ser ella.
Para conseguirlo inicié una interminable serie de rituales: me lavaba el pelo con un champú de camomilla con la esperanza inutil de que mi negro tornase en rubio, me colgaba de la barra en clase de gimnasia en tiempos especialmente largos esperando crecer unos centímetros más hasta alcanzar su altura, me compré un lapiz azul para delinear mis ojos oscuros esperando que se confundieran los colores y así emular sus ojos claros ... hice tantas locuras que, por hacer, hasta intenté comportarme como ella y mostrarme simpática y atrevida con los chicos.
Naturalmente cada esfuerzo era inútil y por ende mi madre casi muere de un disgusto cuando me vió pintada por vez primera con ese azul prostituta en los ojos... Afortunadamente pasado ese año mis padres me cambiaron de colegio y en el nuevo no habia ninguna Gloria.
La última vez que la ví fué en la fiesta de fin de curso; ella triunfaba con un disfraz de princesa que le quedaba como a un hada y yo me defendía explicando a todo el mundo que mi traje hecho con un mono rojo y dos bolsas de basura negras era el uniforme de los invasores en una serie llamada "V"... nadie lo entendió, de hecho poca gente recordaba la película.
Y hoy, por caprichos del destino, volví a ver a Gloria. Ahora seduce detrás de un mostrador del Corte Inglés de Castellana. Está espléndida, bella como siempre, con el pelo brillante y la sonrisa que deslumbra y desarma. Su cuerpo enfundado en el desafortunado traje de dependendienta se mueve con elegancia y eleva a Alta Costura la falda azul y la blusa de rayas. Ha sido maravilloso volverla a ver, cruzarnos unas palabras y saber que la vida la ha tratado bien durante estos años.
Sin embargo me he dado cuenta de que ya no queria ser ella... no sé porqué. Quizás porque yo misma ya no soy la niña rara... quizás porque ya no voy siempre "con mi hermano el tio bueno"... más probablemente porque ahora sé reconocer y amar mi propia belleza :)
¿Han deseado vdes. ser alguien alguna vez?...
Era bonita como un angel y todos los chicos del colegio estaban locos por ella. Se habia incorporado ese año a mi clase y desde que puso un pie en el aula no pude dejar de mirarla, era fascinante, sin duda la persona más bella que yo hubiese visto de cerca jamás.
Por aquel entonces yo era "la niña rara de pelo largo que siempre va con su hermano el tio bueno" y ella, como contrapunto, se posicionó en "la chica más guapa del colegio". Hasta su nombre era perfecto; Gloria, su nombre era ella y no yo, "la del nombre raro"... Desde que la conocí ya no deseé otra cosa que ser ella.
Para conseguirlo inicié una interminable serie de rituales: me lavaba el pelo con un champú de camomilla con la esperanza inutil de que mi negro tornase en rubio, me colgaba de la barra en clase de gimnasia en tiempos especialmente largos esperando crecer unos centímetros más hasta alcanzar su altura, me compré un lapiz azul para delinear mis ojos oscuros esperando que se confundieran los colores y así emular sus ojos claros ... hice tantas locuras que, por hacer, hasta intenté comportarme como ella y mostrarme simpática y atrevida con los chicos.
Naturalmente cada esfuerzo era inútil y por ende mi madre casi muere de un disgusto cuando me vió pintada por vez primera con ese azul prostituta en los ojos... Afortunadamente pasado ese año mis padres me cambiaron de colegio y en el nuevo no habia ninguna Gloria.
La última vez que la ví fué en la fiesta de fin de curso; ella triunfaba con un disfraz de princesa que le quedaba como a un hada y yo me defendía explicando a todo el mundo que mi traje hecho con un mono rojo y dos bolsas de basura negras era el uniforme de los invasores en una serie llamada "V"... nadie lo entendió, de hecho poca gente recordaba la película.
Y hoy, por caprichos del destino, volví a ver a Gloria. Ahora seduce detrás de un mostrador del Corte Inglés de Castellana. Está espléndida, bella como siempre, con el pelo brillante y la sonrisa que deslumbra y desarma. Su cuerpo enfundado en el desafortunado traje de dependendienta se mueve con elegancia y eleva a Alta Costura la falda azul y la blusa de rayas. Ha sido maravilloso volverla a ver, cruzarnos unas palabras y saber que la vida la ha tratado bien durante estos años.
Sin embargo me he dado cuenta de que ya no queria ser ella... no sé porqué. Quizás porque yo misma ya no soy la niña rara... quizás porque ya no voy siempre "con mi hermano el tio bueno"... más probablemente porque ahora sé reconocer y amar mi propia belleza :)
¿Han deseado vdes. ser alguien alguna vez?...
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