cuellopavo
El hombre y la caja
- Registro
- 23 Abr 2006
- Mensajes
- 15.318
- Reacciones
- 9.454
Parece que fue ayer, pero este artículo escrito fue en 1.934..... me parece de lo más actual.
La historia se repite. En España la Historia no se digiere bien.
W. Fernández Flores.
ANTIESPAÑOLISMO EN LA UNIVERSIDAD DE BARCELONA (29-VI-1.934)
Pero la persecución sistemática, la exclusión decidida a todo lo español en aquel Centro donde se forma la mentalidad de los hombres de mañana representa un daño inferido al Estado español en uno de sus más vitales elementos. Y vulnera el artículo 4º de la Constitución (de la República que dice:
El castellano es el idioma oficial de la República.
Todo español tiene obligación de saberlo y derecho de usarlo, sin perjuicio de los derechos que las leyes del Estado reconozcan a las lenguas de las provincias o regiones.
Salvo lo que se disponga en leyes especiales, a nadie se le podrá exigir el conocimiento ni el uso de ninguna lengua regional.)....
Va derecha, certera y perturbadora contra la esencia del Estado, de la propia España.
¿Quién ha procurado poner el coto que señala la Constitución a estas extralimitaciones? ¿Qué cejas se han fruncido? ¿Qué minorías se han indignado?
Hay un españolismo un poco de pandereta, conmovedoramente infantil y sin duda bien intencionado, que nos e fija más que en detallitos menudos, formales, cuya aparatosidad lee sobresalta y le inspira apóstrofes, elegías y amenazas. Ese españolismo se encrespa cuando cualquier majadero arranca una bandera o profiere un grito hostil. Pero permanece INMÓVIL, SOSEGADO, confiadamente MUDO, cuando hombres hábiles, consagrados con obstinación al servicio del ODIO, van cortando hilo a hilo el amarre espiritual con España.
Ah, y los mossos d´esquadra estarían con las mossas en la cuadra, desparramando el heno, y cobran el doble que la Benemérita. ¡Qué paisanaje!
La historia se repite. En España la Historia no se digiere bien.
W. Fernández Flores.
ANTIESPAÑOLISMO EN LA UNIVERSIDAD DE BARCELONA (29-VI-1.934)
Pero la persecución sistemática, la exclusión decidida a todo lo español en aquel Centro donde se forma la mentalidad de los hombres de mañana representa un daño inferido al Estado español en uno de sus más vitales elementos. Y vulnera el artículo 4º de la Constitución (de la República que dice:
El castellano es el idioma oficial de la República.
Todo español tiene obligación de saberlo y derecho de usarlo, sin perjuicio de los derechos que las leyes del Estado reconozcan a las lenguas de las provincias o regiones.
Salvo lo que se disponga en leyes especiales, a nadie se le podrá exigir el conocimiento ni el uso de ninguna lengua regional.)....
Va derecha, certera y perturbadora contra la esencia del Estado, de la propia España.
¿Quién ha procurado poner el coto que señala la Constitución a estas extralimitaciones? ¿Qué cejas se han fruncido? ¿Qué minorías se han indignado?
Hay un españolismo un poco de pandereta, conmovedoramente infantil y sin duda bien intencionado, que nos e fija más que en detallitos menudos, formales, cuya aparatosidad lee sobresalta y le inspira apóstrofes, elegías y amenazas. Ese españolismo se encrespa cuando cualquier majadero arranca una bandera o profiere un grito hostil. Pero permanece INMÓVIL, SOSEGADO, confiadamente MUDO, cuando hombres hábiles, consagrados con obstinación al servicio del ODIO, van cortando hilo a hilo el amarre espiritual con España.
Ah, y los mossos d´esquadra estarían con las mossas en la cuadra, desparramando el heno, y cobran el doble que la Benemérita. ¡Qué paisanaje!