Andújar. Seguramente el destino más violento de España para un policía. Un lugar donde patrullar es jugarse la vida.
Ese policía no se habia visto en una situación así en su carrera. Y ni había desenfundado el arma desde la academia. No hablemos del compañero. Es fácil que cuando les llegó el aviso acababan de tomar el café en el Bar Manolo.
Siendo bochornoso, que no lo niego, hay que analizar más allá de lo evidente. Y es el escenario.
Si mañana se pusiera algún loco a amenazar con la escopeta en tu pueblo. Los municipales no se habrán visto en nada parecido por muchos tiros que hubieran rodeos en el campo de tiro, no sabría decirte si el resultado sería diferenre. Según indica el enlace, el tiro atravesó al agresor y después impacto en el compañero. Al agresor como si nada recibir el tiro que acertó en él, porque era un tarado insconsciente. Y que impactara la bala en el compañero después de atravesar al loco una desgracia. A mi me parece que lo que mata al policía son más cosas más allá de si el que pegó el tiro lo hizo torpemente o de forma certera.
Lo que habría que analizar es si hace cuarenta años, los policías de Andújar o los municipales de tu pueblo hubieran obrado diferente. No creo que se hubiera visto un espectáculo muy diferente. Porque tampoco se habrían visto en algo así en su puta vida