saca-al-tarado
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- 22 Mar 2006
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¿Quieren que les resuma en un solo término tal sueño? Es sencillo: impunidad.
Les sugiero que contemplen esta foto:
¿La ven? Sucia, sudorosa, borracha, excitada pero ante todo protagonista e impune. Enseño mis tetas, levanto pollas a mi alrededor y la masa, en lugar de proporcionarme el merecido bukkake, gang bang y cagada colectiva en el pecho que merecería, me ampara, protege y pagafantea. ¿Que me toca alguno una teta? Da igual va en el lote.
Es fascinante ver esos rostros plenos de felicidad, ¿no les llaman la atención estos animalillos?
Da lo mismo la planitud o malformación tetil, las lorzas, la mixtura de sudor, meados y mierda de varios días que estas kermesses generan inevitablemente es el gran momento de la niña para sentirse, como dicen ellas, "poderosa" o "empoderada" (término oficial).
Cierto es que en ocasiones existe justicia, algunas de estas nenas se vuelven para su casa con unas purgaciones, unas simpáticas ladillas, puede que en poco tiempo con un bombo y entonces llega la fase de los pretextos ("bebí mucho", "no tolero bien el alcohol", "no sabía lo que hacía", "me utilizaron", "me engañaron", incluso algún desgraciado tendrá que lidiar penalmente con el "abusaron de mí" cuando la nena desea lavar su maltrecha imagen). Todo mentira, ninguna de estas zorras puede resistirse al encanto de decirse a sí misma durante unos minutos que tuvo una manada de machos a sus piés y por lo tanto corren todos los riesgos que bien conocen.
También el tiempo tiene otro arma, como el remordimiento, que luego se vuelve contra ellas. Después hay que escuchar sus lamentos de putilla barata sobre esas fotos que les hicieron y con las que, por fortuna, todos podemos pajearnos a gusto. Se pondrán dignas, incluso tendrán la caradura de llamarlas "fotos robadas", pero lo mejor de todo es que esas imágenes testimoniarán mejor que nada su conducta de puercas irredentas.
Dejemos que disfruten de su sueño favorito, será un placer esperar sentados a que, en ocasiones, se convierta en pesadilla.
Les sugiero que contemplen esta foto:
![1zx347l.jpg](https://i56.tinypic.com/1zx347l.jpg)
¿La ven? Sucia, sudorosa, borracha, excitada pero ante todo protagonista e impune. Enseño mis tetas, levanto pollas a mi alrededor y la masa, en lugar de proporcionarme el merecido bukkake, gang bang y cagada colectiva en el pecho que merecería, me ampara, protege y pagafantea. ¿Que me toca alguno una teta? Da igual va en el lote.
Es fascinante ver esos rostros plenos de felicidad, ¿no les llaman la atención estos animalillos?
![girltits3.jpg](https://www.tenorama.com/sites/default/files/styles/large_640x480/public/foto/girltits3.jpg)
![2005070657sanfermin_g.jpg](https://www.unizar.es/gine/blog/2005070657sanfermin_g.jpg)
Da lo mismo la planitud o malformación tetil, las lorzas, la mixtura de sudor, meados y mierda de varios días que estas kermesses generan inevitablemente es el gran momento de la niña para sentirse, como dicen ellas, "poderosa" o "empoderada" (término oficial).
Cierto es que en ocasiones existe justicia, algunas de estas nenas se vuelven para su casa con unas purgaciones, unas simpáticas ladillas, puede que en poco tiempo con un bombo y entonces llega la fase de los pretextos ("bebí mucho", "no tolero bien el alcohol", "no sabía lo que hacía", "me utilizaron", "me engañaron", incluso algún desgraciado tendrá que lidiar penalmente con el "abusaron de mí" cuando la nena desea lavar su maltrecha imagen). Todo mentira, ninguna de estas zorras puede resistirse al encanto de decirse a sí misma durante unos minutos que tuvo una manada de machos a sus piés y por lo tanto corren todos los riesgos que bien conocen.
También el tiempo tiene otro arma, como el remordimiento, que luego se vuelve contra ellas. Después hay que escuchar sus lamentos de putilla barata sobre esas fotos que les hicieron y con las que, por fortuna, todos podemos pajearnos a gusto. Se pondrán dignas, incluso tendrán la caradura de llamarlas "fotos robadas", pero lo mejor de todo es que esas imágenes testimoniarán mejor que nada su conducta de puercas irredentas.
Dejemos que disfruten de su sueño favorito, será un placer esperar sentados a que, en ocasiones, se convierta en pesadilla.