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- 22 Feb 2009
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Embargado por los efectos de la masturbación, lo veo todo con mucha más claridad. Es por ello que me he decidido a abrir un hilo para dirimir definitivamente y de una vez por todas tan angosta cuestión, que subyace en la psique de todos los foreros.
¿El tamaño importa?
No voy a ser yo el que mienta diciendo que jamás se ha visto atenazado por esa misma duda, en parte por el subconsciente masculino, en parte por la errática y volátil opinión de las mujeres al respecto. Para empezar tratando el tema de una forma amena procedo a colgar un par de fotos ilustrativas:
Este ballenato joven es nuestra conforera Tamara. Tal y como podréis constatar, su orondo perímetro configura un cuerpo de depredadora sexual apto para sobrevivir en los más adversos terrenos. A juzgar por las sabias palabras de Rastrer0, mi inspirador a la hora de abrir este hilo:
Tamara no puede ser sino una suerte de ángel del amor, un mamífero de bondad sólo superada por su volumen y cuya vorágine sexual debe de ser casi equiparable a la voracidad que a bien seguro muestra en sus periódicas visitas a la nevera. Debajo de todas y cada una de sus lorzas se esconde su verdadera feminidad, y estoy seguro que cada vez que se arrodilla para desatarle a su hamado las botas de skinjer no sólo bate récords científicos de compresión de lípidos sino que también alumbra los soldados urbanos con los que retoza con su esplendorosa buena salud.
Que haga el favor de posicionarse el mentiroso que asegure que no se follaría todos y cada uno de sus agujeros, depositando su simiente en los generosos pliegues de su ombligo. ¿No era la Venus de Willendorf una hembra de proporciones considerables? ¿Acaso el capitán Achab de Melville no sufrió hasta el último de sus días una obsesiva patología por la persecución de rorcuales semejantes? ¿Es cierto que las gordas se esfuerzan más para compensar el -15 en atractivo que causan? ¿O quizás sólo lo creen causar? ¿La chupan mejor? ¿Debería ser tipificado el impacto visual de Tamara como colisión en la carretera? ¿El tamaño importa?
Quizás el único inconveniente que tiene es el lastre crónico que supone alimentarla, así como el hecho de que una criatura de semejante calibre no puede ocultarse durante un tiempo indefinido a ojos de nuestras amistades, que a bien seguro nos empezarían a señalar con el dedo por nuestra afición a las chicas con sobrepeso.
Es ahí donde entran las valoraciones sexuales por un lado, y las sociales por el otro. Las primeras nos empujan a fertilizar las hembras de grandes ubres y amplio contorno, mientras que las segundas tienden a ridiculizar las relaciones con ballenas de más de 250 kg. Y por ello os lanzo la pregunta que encabeza este hilo, y además os animo a que relatéis vuestras experiencias, por bizarras que sean, con las hijas de Ronald McDonald.
-Apruebo este hilo! Mírame, Tamara, llevo botas!!!!
Desde aquí también me gustaría animar las floreras a participar. Podéis contar por qué vuestras microtetas son mejores que las ubres de la tetuda que os levantó el novio, los lolérrimos efectos que habéis experimentado desde la toma de la píldora anticonceptiva, o el tremendo atractivo que entontráis en ese rollizo contable por el que abandonásteis al futbolista de tercera regional con el que salíais desde sexto. Fotos mediante en todos los casos, por supuesto.
¿El tamaño importa?
No voy a ser yo el que mienta diciendo que jamás se ha visto atenazado por esa misma duda, en parte por el subconsciente masculino, en parte por la errática y volátil opinión de las mujeres al respecto. Para empezar tratando el tema de una forma amena procedo a colgar un par de fotos ilustrativas:
Este ballenato joven es nuestra conforera Tamara. Tal y como podréis constatar, su orondo perímetro configura un cuerpo de depredadora sexual apto para sobrevivir en los más adversos terrenos. A juzgar por las sabias palabras de Rastrer0, mi inspirador a la hora de abrir este hilo:
Rastrer0 rebuznó:
Tamara no puede ser sino una suerte de ángel del amor, un mamífero de bondad sólo superada por su volumen y cuya vorágine sexual debe de ser casi equiparable a la voracidad que a bien seguro muestra en sus periódicas visitas a la nevera. Debajo de todas y cada una de sus lorzas se esconde su verdadera feminidad, y estoy seguro que cada vez que se arrodilla para desatarle a su hamado las botas de skinjer no sólo bate récords científicos de compresión de lípidos sino que también alumbra los soldados urbanos con los que retoza con su esplendorosa buena salud.
Que haga el favor de posicionarse el mentiroso que asegure que no se follaría todos y cada uno de sus agujeros, depositando su simiente en los generosos pliegues de su ombligo. ¿No era la Venus de Willendorf una hembra de proporciones considerables? ¿Acaso el capitán Achab de Melville no sufrió hasta el último de sus días una obsesiva patología por la persecución de rorcuales semejantes? ¿Es cierto que las gordas se esfuerzan más para compensar el -15 en atractivo que causan? ¿O quizás sólo lo creen causar? ¿La chupan mejor? ¿Debería ser tipificado el impacto visual de Tamara como colisión en la carretera? ¿El tamaño importa?
Quizás el único inconveniente que tiene es el lastre crónico que supone alimentarla, así como el hecho de que una criatura de semejante calibre no puede ocultarse durante un tiempo indefinido a ojos de nuestras amistades, que a bien seguro nos empezarían a señalar con el dedo por nuestra afición a las chicas con sobrepeso.
Es ahí donde entran las valoraciones sexuales por un lado, y las sociales por el otro. Las primeras nos empujan a fertilizar las hembras de grandes ubres y amplio contorno, mientras que las segundas tienden a ridiculizar las relaciones con ballenas de más de 250 kg. Y por ello os lanzo la pregunta que encabeza este hilo, y además os animo a que relatéis vuestras experiencias, por bizarras que sean, con las hijas de Ronald McDonald.
-Apruebo este hilo! Mírame, Tamara, llevo botas!!!!
Desde aquí también me gustaría animar las floreras a participar. Podéis contar por qué vuestras microtetas son mejores que las ubres de la tetuda que os levantó el novio, los lolérrimos efectos que habéis experimentado desde la toma de la píldora anticonceptiva, o el tremendo atractivo que entontráis en ese rollizo contable por el que abandonásteis al futbolista de tercera regional con el que salíais desde sexto. Fotos mediante en todos los casos, por supuesto.
Clásico
Forero del todo a cien
Leyenda
Muerto por dentro+
Freak total
Veterano
