Curioso, no pensaba que fuera a ser nada épico. Estando casado, al menos en mi caso, implica irme a dormir y estar en un colchón de 150 cm con una mujer a diario, lo cual deriva de vez en cuando en sexo. Dando por bueno el 2 de 7 (que bien podría ser 1/7 en semanas ajetreadas o 4/7 en vacaciones), 2/7 es un 28% de las ocasiones que acaben en ayuntamiento carnal. Esto es, menos de una de cada tres acaba en orgasmos mutuos*.
¿Monótono? Pues ya de por sí, añadimos monotonía en hacerlo siempre con la misma persona, mismos pechos, misma forma de chuparla, misma forma de moverse, etc. Pero luego siempre acabas haciéndolo en las mismas posturas, misma dinámica. Una sola mirada antes de dormir ya nos indica que el otro está solícito, así que si ella es la que quiere mambo acaba encima mía hasta correrse, y si soy yo la acabo poniento a 4 patas. De vez en cuando alternamos con un misionero clásico o con sexo oral mutuo, para añadir algo de "variedad" a la coyunta, y ya.
El que suscribe ha intentado añadir algo de variedad (con escaso éxito) a base de juguetes, lencería, juegos de roles, sesiones fotográficas y demás. Pero siempre hay alguna buena excusa para no hacerlo, o poco tiempo por lo que acabamos en un rapidito. Total, a la noche siguiente podremos (y la noche siguiente volverá a aparecer alguna excusa, y lo dejaremos para la otra, y así
ad aeternum). Eso sí, los escasísimos días en los que se inspira son sublimes, pena que cada vez estén más espaciados en el tiempo.
Joder, suena aún más patético puesto por escrito
* Acuerdo tácito de, al menos, quedar siempre empatados en el marcador de orgasmos. Sí, rutina hasta para eso