M
MIROK
Guest
Tras realizar un somero análisis de este foro, he llegado a conclusiones realmente sorprendentes, como que la mayoría de los que escriben ahí, no lo hacen para debatir ideas, ni siquiera para exponer tesis sobre diferentes temas; sino más bien para interactuar con los demás.
Lo que le interesa al forero, en general, es lograr un contacto, a través de sus mensajes, con otros usuarios, ya sea para sentirse acompañado o para enzarzarse en disputas barriobajeras con otros.
De tal manera que prácticamente se puede hablar de dos tipos de mensajes en ese foro, atendiendo a su naturaleza: los mensajes positivos y los mensajes negativos.
Los mensajes positivos tratan de crear un clima de complicidad fácil entre los adictos, a través de un lenguaje neutro, que aspira a parecer gracioso y en un tono que pretende ser entrañable, se establecen lazos de comunicación basados en guiños de complicidad, a menudo infantil, que hace que los interesados establezcan una comunicación más emocional que racional en el foro, con otros adictos al mismo. Es evidente que nadie pretende obtener unas relaciones firmes y duraderas con otros internautas; sino más bien, crear un ambiente de concordia artificial, que les haga sentirse acompañados. Los usuarios aficionados a este tipo de mensajes, responden a un perfil de personas con una gran necesidad de expandir su afectividad, hasta el punto de utilizar un juego de internet y su foro, como plataforma para crearse una comunidad de afectos virtual, que les satisface su ansia de sentirse queridos y aceptados por los demás. Para conseguir esa identidad grupal utilizan el lenguaje muy cuidadosamente, evitando herir la susceptibilidad de nadie, ya que conocen la enorme inestabilidad emocional que les rodea en ese lugar, que hace a los demás muy susceptibles en cuanto a críticas o comentarios negativos de sus mensajes. La mejor manera de conseguir un insulto allí, es censurando o comentando negativamente el mensaje de otro; por lo cual optan por mensajes infantiloides, de carácter ñoño que no les comprometan. Ellos no entran ahí a exponer sus ideas sobre variados temas, sino a contactar por medio mensajes afectivos, con otros mensajes que les ayuden a pasar el tiempo, sintiendo de una manera artificial que son aceptados y queridos por los demás. Sus ocurrencias en el foro, van siempre dirigidas a encontrar el aplauso y la complicidad de los demás. Se trata por lo general de personas con problemas de relación real, que buscan satisfacer sus ansias de comunicación y afectividad a través de un portal de internet.
Los mensajes negativos se basan en la descalificación de otros usuarios. Buscan también interactuar con los demás, pero en vez de tratar de conseguir un clima de concordia con otros foreros, su objetivo es denigrar a los demás. Mientras el forero prototípico de los mensajes positivos satisface su ansia de afectividad a través del foro, el forero de mensajes negativos busca satisfacer su agresividad a través del ataque dialéctico con insultos, mofas y frases despreciativas a otros usuarios.
En ambos casos el usuario no busca debatir ideas, sino volcar unas necesidades personales en ese foro y en los otros usuarios. En el caso del que escribe mensajes positivos, busca recibir estímulos agradables que le hagan sentirse parte de una comunidad virtual de la que carece en su vida cotidiana. En el caso del que escribe mensajes negativos, busca descargar sus frustraciones personales y su malestar psíquico mediante la agresión verbal a otros foreros.
A menudo se establecen iconos sobre a quién deben dirigirse mensajes positivos o negativos. Una amplia mayoría de usuarios, no es radicalmente negativa o positiva; sino que respondiendo a estímulos puede resultar positiva o negativa. Dependiendo del usuario con quien traten, hacen un tipo de mensaje positivo que rebosa una especie de pseudocariño y aceptación, con frases amistosas complementadas con dibujos que quieren expresar su confraternización digital. Si se dirigen a otros usuarios por los que sienten hostilidad debido a que sus anteriores mensajes no les han complacido o a que piensan que no forman parte del círculo de confraternización, aprovecharán para volcar todas sus frustraciones y fobias en ellos, haciéndoles casi responsables con sus reproches mal disimulados y sus insultos, de los males que a ellos personalmente les aquejan.
Es por tanto, lógico, que quienes busquen un lugar de debate en ese foro, se sientan francamente decepcionados. Pero es connatural a la inmensa mayoría de los usuarios, la tentación de expandir sus problemas psíquicos en ese portal. Mientras unos pretenden crear una especie de sociedad virtual, que les aporte un cariño digital en sus vidas, otros buscan al grupo para desahogar sus frustraciones personales, desde el anonimato de sus nicknames. En ambos casos se trata de sujetos con graves problemas de relación en sus vidas cotidianas, que a través de ese portal tratan de solventar, satisfaciendo las necesidades afectivas que la vida les niega o volcando su agresividad sobre otros seres anónimos.
El usuario psíquicamente normal, con una vida afectiva plena, que únicamente busque aquí su enriquecimiento personal, mediante la lectura de mensajes sobre todo tipo de temas, se siente muy pronto decepcionado con la alineación que percibe en el foro y sale de ahí. Esa alineación viene motivada por la necesidad compulsiva de interrelacionarse afectivamente de la inmensa mayoría de los foreros; pues su objetivo al entrar ahí no es el interés o la curiosidad por las ideas de los demás, sino su necesidad de volcar sus sentimientos tanto positivos como negativos sobre alguien, aunque sea una identidad anónima de internet. Para lo cual resulta insignificante su opinión fundada sobre cualquier tema.
Desde esta perspectiva resulta lógica la queja de foreros ansiosos por un debate inteligente, ante tamaña como digo alineación; pues desde el momento que confuden un foro de debate de ideas o conocimientos en internet, con su terapia de grupo para satisfacer sus ansias de socializarse en un portal, ya están alienados. Lo mismo se puede decir de los que pretenden con sus mensajes llenos de agresividad, denigrar a las otras identidades anónimas, su búsqueda particular en estos foros, que tanto los altera, es desahogar sus frustraciones y sus complejos sobre los demás, proyectando sus propias fobias y descargando su malestar.
El uso inteligente y enriquecedor intelectualmente del foro, es tarea imposible ante el abuso emocional que hacen de él, los usuarios más adictos, únicamente pendientes de interactuar afectivamente con los demás. Diciéndolo en términos coloquiales: estos individuos no vienen aquí a debatir, sino a quererse u odiarse mucho; pues lo que buscan no es el intercambio de información o conocimientos, sino de emociones y sentimientos, tanto negativos como positivos, de los que carecen en sus vidas, y a través de este medio de comunicación, tratan de llenar. Al final por obra y gracia de la inmensa mayoría de los usuarios, un foro de internet para debatir ideas, se ha transformado en una comunidad virtual de afectos y desafectos. No es este el lugar más indicado para la reflexión y el análisis de otras opiniones, sólo parece servir para volcar neuróticamente amores y odios sobre otros nicknames.
La explicación es sencilla, está estudiado que en la mayoría de los casos el origen de la adicción a internet, que es la patología que sufren la inmensa mayoría de los que escriben aquí, es un transtorno de personalidad basado en la dificultad de relacionarse con los demás en su medio habitual, por lo que proyectan ese deseo en este medio a través de su identidad cibernética. Mientras que con sus visitas compulsivas dan vida a sus amores y sus odios, llevan una cibervida social aquí, el portal se va enriqueciendo con los banners de publicidad que visualizan, y se pierde totalmente el cometido de unos foros de debate y encuentro entre seres anónimos, donde lo que debería primar es la idea, convirtiéndose esto en un lugar de encuentro para diversos traumatizados sociales, todos ellos adictos a internet. Sobre patetismo que reflejan sus mensajes y la demencia a la que pueden llegar se podría escribir un libro sobre trastornos mentales.
Fraternalmente
Lo que le interesa al forero, en general, es lograr un contacto, a través de sus mensajes, con otros usuarios, ya sea para sentirse acompañado o para enzarzarse en disputas barriobajeras con otros.
De tal manera que prácticamente se puede hablar de dos tipos de mensajes en ese foro, atendiendo a su naturaleza: los mensajes positivos y los mensajes negativos.
Los mensajes positivos tratan de crear un clima de complicidad fácil entre los adictos, a través de un lenguaje neutro, que aspira a parecer gracioso y en un tono que pretende ser entrañable, se establecen lazos de comunicación basados en guiños de complicidad, a menudo infantil, que hace que los interesados establezcan una comunicación más emocional que racional en el foro, con otros adictos al mismo. Es evidente que nadie pretende obtener unas relaciones firmes y duraderas con otros internautas; sino más bien, crear un ambiente de concordia artificial, que les haga sentirse acompañados. Los usuarios aficionados a este tipo de mensajes, responden a un perfil de personas con una gran necesidad de expandir su afectividad, hasta el punto de utilizar un juego de internet y su foro, como plataforma para crearse una comunidad de afectos virtual, que les satisface su ansia de sentirse queridos y aceptados por los demás. Para conseguir esa identidad grupal utilizan el lenguaje muy cuidadosamente, evitando herir la susceptibilidad de nadie, ya que conocen la enorme inestabilidad emocional que les rodea en ese lugar, que hace a los demás muy susceptibles en cuanto a críticas o comentarios negativos de sus mensajes. La mejor manera de conseguir un insulto allí, es censurando o comentando negativamente el mensaje de otro; por lo cual optan por mensajes infantiloides, de carácter ñoño que no les comprometan. Ellos no entran ahí a exponer sus ideas sobre variados temas, sino a contactar por medio mensajes afectivos, con otros mensajes que les ayuden a pasar el tiempo, sintiendo de una manera artificial que son aceptados y queridos por los demás. Sus ocurrencias en el foro, van siempre dirigidas a encontrar el aplauso y la complicidad de los demás. Se trata por lo general de personas con problemas de relación real, que buscan satisfacer sus ansias de comunicación y afectividad a través de un portal de internet.
Los mensajes negativos se basan en la descalificación de otros usuarios. Buscan también interactuar con los demás, pero en vez de tratar de conseguir un clima de concordia con otros foreros, su objetivo es denigrar a los demás. Mientras el forero prototípico de los mensajes positivos satisface su ansia de afectividad a través del foro, el forero de mensajes negativos busca satisfacer su agresividad a través del ataque dialéctico con insultos, mofas y frases despreciativas a otros usuarios.
En ambos casos el usuario no busca debatir ideas, sino volcar unas necesidades personales en ese foro y en los otros usuarios. En el caso del que escribe mensajes positivos, busca recibir estímulos agradables que le hagan sentirse parte de una comunidad virtual de la que carece en su vida cotidiana. En el caso del que escribe mensajes negativos, busca descargar sus frustraciones personales y su malestar psíquico mediante la agresión verbal a otros foreros.
A menudo se establecen iconos sobre a quién deben dirigirse mensajes positivos o negativos. Una amplia mayoría de usuarios, no es radicalmente negativa o positiva; sino que respondiendo a estímulos puede resultar positiva o negativa. Dependiendo del usuario con quien traten, hacen un tipo de mensaje positivo que rebosa una especie de pseudocariño y aceptación, con frases amistosas complementadas con dibujos que quieren expresar su confraternización digital. Si se dirigen a otros usuarios por los que sienten hostilidad debido a que sus anteriores mensajes no les han complacido o a que piensan que no forman parte del círculo de confraternización, aprovecharán para volcar todas sus frustraciones y fobias en ellos, haciéndoles casi responsables con sus reproches mal disimulados y sus insultos, de los males que a ellos personalmente les aquejan.
Es por tanto, lógico, que quienes busquen un lugar de debate en ese foro, se sientan francamente decepcionados. Pero es connatural a la inmensa mayoría de los usuarios, la tentación de expandir sus problemas psíquicos en ese portal. Mientras unos pretenden crear una especie de sociedad virtual, que les aporte un cariño digital en sus vidas, otros buscan al grupo para desahogar sus frustraciones personales, desde el anonimato de sus nicknames. En ambos casos se trata de sujetos con graves problemas de relación en sus vidas cotidianas, que a través de ese portal tratan de solventar, satisfaciendo las necesidades afectivas que la vida les niega o volcando su agresividad sobre otros seres anónimos.
El usuario psíquicamente normal, con una vida afectiva plena, que únicamente busque aquí su enriquecimiento personal, mediante la lectura de mensajes sobre todo tipo de temas, se siente muy pronto decepcionado con la alineación que percibe en el foro y sale de ahí. Esa alineación viene motivada por la necesidad compulsiva de interrelacionarse afectivamente de la inmensa mayoría de los foreros; pues su objetivo al entrar ahí no es el interés o la curiosidad por las ideas de los demás, sino su necesidad de volcar sus sentimientos tanto positivos como negativos sobre alguien, aunque sea una identidad anónima de internet. Para lo cual resulta insignificante su opinión fundada sobre cualquier tema.
Desde esta perspectiva resulta lógica la queja de foreros ansiosos por un debate inteligente, ante tamaña como digo alineación; pues desde el momento que confuden un foro de debate de ideas o conocimientos en internet, con su terapia de grupo para satisfacer sus ansias de socializarse en un portal, ya están alienados. Lo mismo se puede decir de los que pretenden con sus mensajes llenos de agresividad, denigrar a las otras identidades anónimas, su búsqueda particular en estos foros, que tanto los altera, es desahogar sus frustraciones y sus complejos sobre los demás, proyectando sus propias fobias y descargando su malestar.
El uso inteligente y enriquecedor intelectualmente del foro, es tarea imposible ante el abuso emocional que hacen de él, los usuarios más adictos, únicamente pendientes de interactuar afectivamente con los demás. Diciéndolo en términos coloquiales: estos individuos no vienen aquí a debatir, sino a quererse u odiarse mucho; pues lo que buscan no es el intercambio de información o conocimientos, sino de emociones y sentimientos, tanto negativos como positivos, de los que carecen en sus vidas, y a través de este medio de comunicación, tratan de llenar. Al final por obra y gracia de la inmensa mayoría de los usuarios, un foro de internet para debatir ideas, se ha transformado en una comunidad virtual de afectos y desafectos. No es este el lugar más indicado para la reflexión y el análisis de otras opiniones, sólo parece servir para volcar neuróticamente amores y odios sobre otros nicknames.
La explicación es sencilla, está estudiado que en la mayoría de los casos el origen de la adicción a internet, que es la patología que sufren la inmensa mayoría de los que escriben aquí, es un transtorno de personalidad basado en la dificultad de relacionarse con los demás en su medio habitual, por lo que proyectan ese deseo en este medio a través de su identidad cibernética. Mientras que con sus visitas compulsivas dan vida a sus amores y sus odios, llevan una cibervida social aquí, el portal se va enriqueciendo con los banners de publicidad que visualizan, y se pierde totalmente el cometido de unos foros de debate y encuentro entre seres anónimos, donde lo que debería primar es la idea, convirtiéndose esto en un lugar de encuentro para diversos traumatizados sociales, todos ellos adictos a internet. Sobre patetismo que reflejan sus mensajes y la demencia a la que pueden llegar se podría escribir un libro sobre trastornos mentales.
Fraternalmente