Eso me ha recordado otro reventón incluyendo llanta doblada (esta vez trasera) en la autopista entre Santiago de Chile y la costa del Pacífico (Valparaíso y Viña del Mar). Iba a adelantar a un camión (con remolque) que llevaba troncos de 2,40 m -allí llamados palos- y se le cae uno justo al carril de su izquierda (el mío), freno de golpe y el coche se gira a derechas por amortiguación en mal estado, suelto (si no volcamos ahí mismo) y lo enderezo; el
palo rebota desde la mediana y se me mete entre las ruedas delanteras y traseras, un golpe tremendo, zaga catapultada y más bandazos, mi mujer (de entonces) gritando: "que nos matamooooosssss"... y nada, consigo parar en el arcén y veo que el camión se para también como 1 km más adelante. Bajo a ver los daños y en esto que el camión arranca...

, arranco yo también, lo alcanzo y le obligo a parar. Al principio pretendía escurrir el bulto, pero no... y además apareció justo una persona de la compañía del camión en coche que prefirió pagarlo todo en lugar de hacer papeles: habló por teléfono con un
llantero cercano para ver si tenían uno igual y nos lo pusieron, la llanta recibió unos cuantos martillazos y continuamos nuestro plan...
En la foto no se aprecia bien porque mi preocupación era sobre todo que saliera la matrícula (del camión):
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